˓ 愛 › ، First Date || Bakudeku OS

愛

Estaba justo frente a la puerta de su habitación.

¿En qué momento llegué a este punto? No tenia ninguna jodida idea de como es que esto había pasado. Realmente estoy confundido por la manera en la que salieron las cosas.

Hace solo unos meses estaba seguro de que odiaba a esta persona, que quería simplemente no saber nada, no ser nada suyo, no sentir nada mas que un simple sentimiento de asco.

Y aún así no pude evitar caer por este maldito nerd de ojos encantadores.

Sentía mi corazón latir con fuerza, mis manos sudaban más de lo normal y ni siquiera sabía cómo mierda se hacía esto. Mina me había dicho que lo mejor era ser directo, intentar abrirme a lo que sentía y otras estupideces que ya no recuerdo.

Simplemente debía hacerlo, no era ningún cobarde o algo por el estilo. Solo debía tocar la puerta y decirle lo que tenía para decir.

Justo cuando iba a tocar la puerta un pánico se apoderó de mi cuerpo y salí corriendo. No quería hacerlo, la verdad estaba bastante inseguro sobre lo que podía pasar.

— Oh, hombre, ¿estas bien?

La voz de Kirishima me sacó de mis pensamientos. Estaba frente mio dentro del ascensor con Sero a su lado.

— Te ves muy... ¿alterado?, ¿enojado?, ¿asustado? —dijo sero mientras ladeaba su cabeza.

— Cállate, mierda.

— Okei, vamos, ven acá.

Kirishima tomó la mano de Sero para salir del asensor y me miró atento. Soltó a su novio para poner sus manos en mis hombros mientras me inspeccionaba como si fuera una completa anomalía.

— ¿Qué haces?

— Te estoy leyendo, cállate un segundo.

Oh mierda. Ahora tenía a dos pendejos frente mio mientras intentaban suponer mis sentimientos, muy molesto. Quité sus manos de un empujón y llevé mis manos a los bolsillos de mi pantalón.

— Me voy, tengo mejores cosas que hacer.

— Oh, vamos bakugou, solo debes decirnos qué sucede. ¡Ayudaremos en lo que desees! —Sero posó ridículamente, una pose que se supone es de All might. — Estamos aquí para ayudarte.

— Sero tiene razón. Sé que estas nervioso por algo, pero no sé que es lo que esta sucediendo.

Maldita sea. Odiaba cuando Kirishima lograba leerme tan bien, tanto tiempo juntos ayudó a que notara con mayor facilidad mis cambios de humor.

— Oh... ¿no es este el piso donde esta Izu?

Sero estaba ahora mirando al pasillo, inspeccionando el lugar con detenimiento.

— Sí, es verdad. ¿Qué hacías acá katsuki?...—después de una pequeña pausa en donde sus neuronas funcionaron un poco más, Kirishima volteó a verme con una sonrisa coqueta. — Así que... ¿es por izuku?

— Listo, me voy.

Me di media vuelta para comenzar a correr hacia el ascensor sin embargo, Kirishima logró tomar mi brazo para pararme.

— ¡Esta bien kats!, vamos, vamos. Es solo tocar su puerta, nosotros podemos ayudarte.

— Así es, para eso están los amigos.

Sero y Kirishima comenzaron a jalarme rumbo a la habitación de Izuku. Cada uno jalaba un brazo mío mientras yo intentaba zafarme de su agarre. Maldito el día en el que dejé que estos idiotas agarraran confianza conmigo, claro que tenia sus ventajas, pero no iba a aceptar eso.