Wang Yibo un chico apenas de 18 años, que tenía todo lo necesario, con una vida normal que termina viviendo en las calles, donde conoce a un chico lindo y caprichoso por el cual terminara enamorado.
Xiao Zhan con 24 años tiene todo una familia, dine...
Estaba en en el aeropuerto, con un vuelo con destino a Milán Italia, dejaría China, el país en el que había vivido sus 19 años, dejaría todo atrás, iniciaría en un lugar nuevo, con personas que apenas conocía, diferente cultura e idioma.
le dolía dejar todo atrás, tenia miedo, pero lo único que le daba fuerzas es su Bebe, quería darle un mejor futuro, no quería que nadie lo dañara, debía ser fuerte por el bebe, un buen padre, sus pensamientos fueron interrumpidos por el anuncio que debía ir a la área de abordaje.
- ¿Esta seguro de ir?- pregunto el señor Gong Yoo- sabes que te apoyare con lo que decidas, lo único que quiero es tu bienestar.
- yo.. estoy seguro, quiero tener un nuevo inicio- dijo seguro, ¿Qué perdía? no tenia nada ni ha nadie.
- bueno, debemos abordar- dijo Jong Suk, Tomando de la mano a Yibo, asiendo que este con su acción se avergonzara.
el avión estaba despejando, por el rostro del rubio bajaban silenciosas lagrimas, no había vuelta atrás, tal vez nunca volvería a ver a Zhan, sabia que como siempre estaba huyendo en vez de enfrentar los problemas, pero tenia miedo que por estar cerca del pelinegro lo dañara, que por su culpa perdiera por todo lo que la familia Xiao había trabajado, tal vez no era la mejor decisión y solo estaba siendo un cobarde.
sintió como su mano fue tomada fuertemente, su mirada se dirigió al señor Gong Yoo quien le sonrió cálidamente y le susurro.
- todo esta mejor, prometo que nadie mas te dañara, te protegeré- no sabia por cuanto había pasado su pequeño, este no que quiso mencionar quien era el padre del bebe que estaba esperando y el no le insistió en saber algo de su pasado, cuando se sintiera listo se lo diría.
- gracias..- dijo Yibo y sonrió entre lagrimas..
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Después de las horas de viaje por fin estaba en Milán, era una ciudad hermosa, Yibo estaba sorprendido y con curiosidad veía todo atreves de la ventana del automóvil, se dirigían a la casa de señor Gong Yoo.
- ¿Te gusta la ciudad?, cuando estés mejor daremos un paseo, será tu guía turístico- dijo emocionado Jong Suk.
- me encanta.. espero pronto poder conocer un poco..- dijo con un sonrisa sin apartar la vista de la venta del auto.
Jong Suk sonrió, ante la acción del rubio, Yibo era un joven muy tierno e inocente, era muy lindo, no sabia como alguien se atrevía a dañarlo, pero estaba seguro que el lo protegería no quería ver esos hermosos ojos llenos de tristeza y dolor, quería verlos brillar de felicidad, su rostro con una sonrisa genuina, estaría siempre para Yibo y el Bebe que crecía dentro del menor, los protegería, nadie mas los dañaría y haría lo posible porque fueran felices, una promesa ese día se hizo.
llegaron a la casa en donde ahora viviría junto al señor Gong Yoo, era enorme y con un estilo hermoso, estaba impresionado de igual manera con lo estuvo al conocer la Mansión Xiao, nunca se acostumbró a los lujos, de hecho prefería una vida sencilla.
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