Capitulo 1 - Mi realidad

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-Malditos imbéciles, creyeron que me harían daño, yo no quise ser así, ustedes me hicieron así, solo son unos hijos de puta que voy a matar hasta sacarles los ojos y cortarlos a la mitad con un cuchillo, desearán jamás haber nacido...
2021: Y pensar que las cosas no se pondrían peor, Andrew, el chico nuevo de secundaria sería no muy bien recibido por los demás alumnos, algunos insultándolo por el rumor de que su mamá abusa de el en casa y es acosado sexualmente por su vecina desde hace tiempo, algunos no se le acercan, otros le insultan, lo empujan y en ocasiones lo escupen, mientras que en ocasiones es esperado a la salida para ser golpeado y hacerlo sangrar pero... ¿Cómo empezó todo esto?
-La verdad creo que todo comenzó luego de que mi padre dejara a mi madre, ella me dejaba muchas veces solo en casa a cuidado de mi vecina Yesica, era una persona que solo me vio como un objeto sexual muchas veces para su placer propio y siempre pienso que muchos me dirán "Pero si eso no es malo" "Si fuera tú hubiera aprovechado la oportunidad" me doy cuenta de esto por las redes sociales y lo ridícula que suele ser las personas muchas veces dando opiniones de la percepción de ellos pero nunca se ponen en los zapatos de la otra persona, nunca se ponen a pensar cómo serían ellos en esa situación pero sigo pensando de que por más que explique mi situación muchos me verán como un perdedor pero a diferencia de los demás yo tengo algo que muchos no tienen, respeto propio. Muchas veces le expliqué a Yesica que no quería tener sexo con ella pero nunca me escuchaba y me decía que le diría a mi mamá que me porté mal, solo tenía 13 años en ese entonces, Yesica tenía 19, no saben la incomodidad y tristeza que sentía tener que ser acosado sexualmente sin poder decirle nadie solo porque me amenaza con cosas absurdas, unos dirán que es estúpido dejarse intimidar solo con la amenaza de que le dirá a mi madre pero ella desde que mi padre la separó no es la misma, me trata mal, me dice inútil, inservible, pedazo de mierda y muchas veces quiero demostrar lo contrario pero nunca me escucha, sale a trabajar temprano y tengo que estar con mi vecina toda la mañana y tarde. De nada sirve intentar buscar o llamar a la policía ya que si intento escapar Yesica me golpeará bruscamente con cualquier objeto que tenga a la mano y si intento usar mi celular para pedir ayuda ella lo revisa constantemente y no puedo hacer nada, me dice que soy su juguete y me obliga a lamer su vagina, cosa que aunque para muchos sea un sueño, para mí era de lo peor hacer aptos sexuales a temprana edad. En mi antiguo colegio todos me miraban con extrañez por los golpes que tenía en la cara, los profesores se me acercaban y les explicaba la situación, unos se reían por pensar que una mujer podría abusar sexualmente de un hombre y otros no me creían por lo que cometí mi primer crimen...

La noche siguiente luego de que les contara a los profesores mi situación estuve intentando hablar de nuevo con mi mamá pero ella no me quería escuchar, me decía que si los golpes en la cara era de gente del colegio debía aprender a defenderme, que soy muy débil y que ni para eso soy bueno por lo que no valía de nada discutir con ella por lo que solo me cepillé y me acosté a dormir. Recuerdo que tuve un sueño muy extraño, habían personas al rededor mío burlándose de mí y yo estaba en el suelo sangrando pero luego me levanté y les dije "Malditos imbéciles, creyeron que me harían daño, yo no quise ser así, ustedes me hicieron así, solo son unos hijos de puta que voy a matar hasta sacarles los ojos y cortarlos a la mitad con un cuchillo, desearán jamás haber nacido" Luego de eso me intentaron golpear de nuevo y me dieron en la nariz, ocasionando que mis vasos sanguíneos reventaran y sangrara por toda mi ropa hasta los zapatos. También recuerdo que eran 3 personas, estábamos en un callejón en plena lluvia con truenos y decidí empezar a atacar, uno por uno, golpe por golpe, lo único que quería era reventarles la cara a cada uno hasta quebrarles los huesos, agarraba piedras del suelo y se las metía bruscamente en la boca a esos chicos, lo que ocasionó que empezaran a suplicar por su vida cada vez más y más hasta el punto de sangrar de tanto gritar, sus lágrimas salían como chorros de sangre por lo que pensé que era buen momento para arrancarles los ojos... En ese momento desperté y me di cuenta que de alguna forma pensar en asesinato me hacía sentir bien, era como si por fin encontrara la forma de llenar ese vacío que tenía, algo que me daba curiosidad experimentar para saber finalmente que se sentiría matar a una persona en la vida real.

Si supieras quién soyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora