I wanna be your slave~ Ethan Torchio

¿Qué hemos hecho?

-Entonces como somos amigos, acepto alcohol

-Genial- me levanté y cogí una botella de ron y otra Coca-Cola para mi- roncola, una de mis bebidas preferidas

-Cuidado con el azúcar, por favor

-Vale mamá- contesté riéndome y le di su vaso.

Unas cuantas copas después nos dimos cuenta de que a pesar de todo nos caíamos bien.

-Al principio me parecías un gilipollas-dije- me enfadaste muchísimo cuando me gritaste- acabé mi cuarta copa y me serví otra

-Tu me parecías borde, bueno me lo sigues pareciendo- nos reímos

-Soy muy borde a veces

-Y yo un gilipollas

-Está bien que lo admitas- me miró y nos empezamos a besar, le quitaba la ropa con rapidez, nos deseábamos en aquel momento. Ethan besaba mi cuello y dejaba pequeños chupetones. Agarraba su pelo suavemente, creo que en ese momento ninguno sabía que acabaríamos haciéndolo pero lo deseábamos.

Me desperté con un dolor de cabeza increíble, miré a mi lado y estaba Ethan tumbado, mierda, no me acuerdo de nada de lo que ha pasado. Levanté la sábana y pude ver que ambos estábamos desnudos, joder, ¿qué hemos hecho?

-Ethan...-empecé a moverle

-Mmmmh...-dijo sin abrir los ojos

-Levántate joder-abrió los ojos

-¿Alessia?

-Joder que hemos follado y no me acuerdo

-Baja la voz por dios- bostezó y se quedó pensando un segundo- ¿qué?

-Ethan que hemos follado y no me acuerdo

-No me jodas... dime que al menos...

-No tengo ni idea... joder joder joder, la hemos cagado

-Yo tampoco me acuerdo de nada... quién cojones me manda beber- dijo echándose las manos a la cabeza

-Lo mismo digo, es que no me lo puedo creer- dije poniéndome una camiseta y levantándome de la cama

-Pero tú... ¿tomas algo?

-Pues no, si no no estaría tan preocupada, imbécil

-Tampoco hace falta que insultes, solo te estoy preguntando

-Es que si pudiera te mataba

-Te recuerdo que esto fue decisión de ambos y que ambos estábamos borrachos

-Déjame- contesté- que la hemos cagado pero bien

-Bueno pues vamos a la farmacia y ya está, se acabó

-Reza para que no me pase nada, que mañana tengo que ir a trabajar

-¿Mañana ya vas?- ignoré su pregunta y me vestí- ¿Puedes responder mi pregunta?

-¿Crees que es lo más importante?

-Vale, lo siento, no hace falta que te pongas así- Me pone de los nervios, no tiene mejor momento para preguntarme si trabajo o no.

Fuimos a la farmacia más cercana

-Entro yo sola, quédate fuera- entré y pedí la pastilla. Después de unas preguntas un tanto incómodas y un par de gritos con el farmacéutico, me dieron la pastilla y salí con ella en la mano.

-¿Ya?

-Me la tengo que tomar- me dio una botella de agua

-He ido a comprarla mientras esperaba-sonrió