I wanna be your slave~ Ethan Torchio

Salvame

AVISO AL LECTOR: ESTE CAPÍTULO CONTIENE UN TEMA QUE PUEDE HERIR LA SENSIBILIDAD DE ALGUNAS PERSONAS.

*POV ALESSIA*

Con tanta "emoción" en el cuerpo, acabamos abriendo el grifo de la ducha sin querer. El agua recorría nuestros cuerpos desnudos llenos de amor y placer. Cada embestida, cada beso y cada gemido que salía de nuestras bocas, provocaba el ansia de seguir y nunca separarnos.

-Joder...-solté un gemido intentando recuperar algo de aire

-Aah...-gruñó en mi oído y juntó nuestras frentes- te amo- No podía evitar sonreír como una estúpida cuando esas dulces palabras salían de su hermosa boca.

-Te amo-sonreí para después besarlo. Retiré un mechón de pelo de su preciosa cara y me quedé mirando sus ojos serenos. No hace falta que digamos nada, con solo una mirada sabemos lo mucho que significamos para el otro.

Una mano agarraba mi cintura mientras que la otra acariciaba mi cuello. Me acerqué lentamente y ,antes de que yo pudiera hacerlo, me besó.

A la mañana siguiente desperté con los brazos de Ethan rodeándome fuertemente, joder, este hombre tiene unos brazos enormes. Me quedé mirando su preciosa cara mientras dormía, parece un ángel. Besé su mejilla para despertarlo.

-Buenos días-susurré, poco a poco empezó a abrir sus ojos y al verme sonrió

-Buenos días-su voz de recién levantado era otro mundo, más bien, él parece de otro mundo. Besó mi frente para después levantarse de la cama y ponerse sus calzoncillos.

Después de ducharnos,preparamos el desayuno entre bailes y risas, parecía que estábamos en una película americana.

-Tengo que irme-dijo mientras depositaba un beso en mi cabeza- me van a matar por llegar tarde

-No te preocupes-sonreí- Más tarde me pasaré a saludar

-Me parece una idea magnífica-sonrió- te veo luego- salió cerrando la puerta tras él.

Empecé a recoger la casa, no sin antes poner un poco de música para poder hacer las cosas mejor.

Recibí una llamada, al cogerla solo se escuchaban fuertes respiraciones así que antes de que pudiera decir algo, colgué. ¿Quién me habría llamado? Con la duda todavía en la cabeza, me cambié de ropa y escribí a Ethan para que supiera que iría al estudio.

Entré en el coche y dejé mi bolso en el asiento de al lado, antes de llegar a ponerme el cinturón sentí como alguien ponía una bolsa en mi cabeza.

-AYUDA-grité moviéndome, poco a poco me quedaba sin aire, estaba muy agobiada.

-No te molestes en moverte ni gritar-dijo una voz gruesa, me resultaba bastante familiar, pero no podía pensar en quién podría ser.

Desperté tumbada sobre lo que creo que es un colchón, tenía las manos y los pies atados y los ojos vendados. Intentaba moverme pero resultaba inútil, estaba tan agobiada que no conseguía soltar ni una sola palabra.

-Parece que ya estás despierta, menos mal- aquella persona me destapó los ojos revelándose, en mi vida pensaba que Rob sería el que me secuestró.

-Rob, suéltame

-No, ahora viene mi venganza al estúpido de tu novio

-Déjame salir de aquí- intenté decir calmada

-Cuando solucionemos unas cuantas cosas podrás salir- me acarició el pelo y giré la cara- estás rebelde hoy

-Suéltame- Lo miré con cara de odio, la furia recorría mi cuerpo pero también lo hacía el miedo y la incertidumbre de no saber cómo acabaría todo esto

-Pero relájate, no te estreses mujer

-¿CÓMO QUIERES QUE ME RELAJE SI ME HAS ATADO?

-Apuesto a que te encanta que te aten-acarició mi entrepierna y me moví para que dejara de tocarme

-No me toques- le escupí

-No sabes cuánto me pones- se mordió el labio y se posicionó entre mis piernas

-NO ME TOQUES-grité casi llorando

-Calladita estás más guapa-tapó mi boca con su mano, me movía para que no me hiciera nada, no quería que me tocara, quería que se fuera y me dejara tranquila- seguro que nos lo pasamos genial- las lágrimas caían por mis mejillas, cerré los ojos suplicando que no me hiciera nada.

Intentaba deshacerse de mi ropa pero me resistía, lo que hacía que se pusiera más nervioso. Se levantó de la cama desquiciado

-No te resistas, aquí vamos a hacer algo, quieras tú o no

-DÉJAME JODER-seguí llorando- TE VOY A DENUNCIAR, HIJO DE PUTA

-Que graciosa eres-soltó una carcajada- vamos al lío-besó mi mejilla y se bajó los pantalones.

Cerré los ojos fuertemente, no quería que me tocara. Me empezó a faltar el aire, intentaba respirar como podía pero no podía .

Llamaron a la puerta y Rob se levantó enfadado, noté como una de las cuerdas de la mano estaba floja y pude sacar la mano, así me ayude para sacar la otra mano y desatarme los pies. Me levanté de la cama y abrí la ventana, estaba muy alto y no podía saltar, así que cogí una lámpara y me escondí detrás de la puerta para pegarle cuando viniera. Cogí mi móvil que estaba en la mesilla y mandé mi ubicación a Ethan junto con la palabra ayuda, necesito que venga a por mi enseguida.

-Alessia ya voy-canturreó desde el otro lado de la casa. Entró en la habitación y no me vio- ALESSIA HIJA DE PUTA- tiré la lámpara encima de su cabeza y salí corriendo- NO TE PUEDES ESCAPAR DE MI- la puerta de la entrada estaba cerrada con llave, me acerqué a la cocina y conseguí coger un cuchillo,necesitaba las llaves y  necesitaba salir de aquí rápidamente.