Nueva vida

161 24 0
                                    

Semanas más tarde...

-Amore, ¿has terminado de guardar tus cosas?-preguntó agarrándome por la cintura

-Solamente me faltan un par de cosas y ya estaría lista

-Vale mi Principessa, el camión no tardará en llegar- me besó la frente- te ayudo si quieres

-Por favor-sonreí dulcemente

-Con esa sonrisa no me puedo negar- empezó a ayudarme con las pocas cosas que me faltaban por colocar.
Hoy por fin nos mudaríamos a nuestra nueva casa, ya había ido un par de veces para dejar algunas cosas y era verdaderamente impresionante, más que en la foto, como dijo Ethan.

Las obras del club van mucho más rápido de lo que esperaba, de hecho ya tenemos día para la inauguración.

En cuanto al tema de mi consejero, ya está solucionado, se declaró en un evento a Damiano como mi consejero y su puesto de subjefe lo ocupó Victoria. La verdad que me gusta mucho que ahora estemos todos juntos para todo, nos veo más unidos y esta vez sin secretos.

-Listo-comentó uno de los hombres que nos ayudaría con la mudanza- solamente tienen que firmar aquí- sacó unas hojas y Ethan las firmó

-Muchas gracias por su ayuda- pagó sus servicios y lo ayudó a cerrar la puerta del camión

-Que tengan un buen día-sonrió y se marchó. Por fin estábamos en nuestra nueva casa, no tenía palabras para describir semejante palacio.

-Deberíamos celebrar una fiesta-dije cerrando la gran puerta de la casa

-Pero antes de eso-me abrazó y puse mis brazos alrededor de su cuello-podríamos inaugurar la casa solos tú y yo

-Cuando quieres tienes buenas ideas-besé sus labios dulcemente-pero ahora va a ser un poco imposible

-¿Y una buena copa de vino en el jacuzzi? No te puedes negar a eso-sonrió

-Vale-reí- pero tú te encargas del jacuzzi y yo del vino

-Pero ven sin ropa- sonrió pícaro

-Claro, con un precioso bañador- me reí y fui a buscar dos copas, mientras, Ethan subió a nuestro baño.

Después de buscar y rebuscar en las cajas, me di cuenta de que las copas estaban en la vitrina donde guardábamos todos los vinos. Cogí dos copas y un vino tinto de borgoña que nos regalaron cuando hicimos oficial nuestro noviazgo.

-Ethan, creo que este vino te va a gustar-subí las escaleras riendo. Al no tener respuesta me asusté bastante y corrí hacia el baño, cuando entré Ethan no estaba y yo podía estar en peligro.
Cuidadosamente retrocedí unos cuantos pasos y sin hacer apenas ruido, cogí la pistola que había en mi habitación, debía protegerme y proteger a Ethan.
Seguí buscando a Ethan por toda la planta de arriba, pero no estaba, así que cargué la pistola y volví al baño.
Sentí que alguien me cogía por el cuello,estaba asustada pero no podía dejar que pensaran que habían ganado. Era muy probable que mi final hubiera llegado, pero necesitaba permanecer firme y sin agobiarme

-Nunca dejes tu espalda sin cubrir-susurró Ethan en mi oído

-Ethan te voy a matar- me giré para poder mirarlo a los ojos- pensé que te había pasado algo

-Solamente quería recordarte que siempre tienes que estar pendiente de todo

-No me hables, lo he pasado fatal- sentí como mis ojos se llenaban de lágrimas

-Principessa no llores-me abrazó fuertemente

-Ethan joder, suéltame- me aparté de él- No me vuelvas a hacer estas bromas

-Pero es que no era una broma-me cogió una mano- No te enfades

-No me enfado joder, pero estaba pensando que alguien podría haberte hecho algo

-Pero no es así- me besó y me quedé quieta- tómatelo como si fuera un entrenamiento, al fin y al cabo has respondido correctamente

-Me cago en todo Ethan- le di una bofetada y después lo besé- No vuelvas a hacerme esto

-Mensaje captado- se acarició la mejilla-olvidémonos del tema, a ver si así se me pasa el dolor

-Podría haberte disparado y haber sido todo mucho peor-cogí aire y poco a poco lo solté- coge el vino, está en la habitación- asintió y fue a cogerlo. Me desvestí y entré en el jacuzzi

-Aquí tienes principessa- me dio mi copa y después entró en el jacuzzi- No me pongas esa cara-me besó la mejilla- odio que te enfades conmigo

-Pero te lo mereces- bebí un poco de mi copa- pero ya está, ahora quiero estar tranquila- me acomodé y cerré los ojos

-Tu ahora relájate- puso sus manos en mis hombros y empezó a hacerme un masaje- te voy a consentir esta noche, así te compenso el susto

-Deberías consentirme todos los días-sonreí- me gusta esto

-Hecho-besó mi cuello

-Ethan...-abrí los ojos y cogí su mano- me gustaría más en otro sitio-sonreí llevando su mano por debajo del agua

-Ya veo por dónde vas-sonrió y me senté encima de él, el resto fue historia.
Nuestros cuerpos estaban unidos en uno, arañaba su espalda para suplicarle que no parase nunca, deseaba estar así para siempre con él.

-Te quiero-besé sus labios para guardar uno de los últimos gemidos- aaah...

-Ti amo-me besó y apartó mi pelo de la cara- eres preciosa-sonrió

-Cállate y bésame-sonreí y me besó

-También eres muy borde- se recogió el pelo todavía un poco mojado

-Solo un poquito-besé su mejilla y cogí las dos copas dándole una de ellas- brindemos por nosotros

-Por nosotros- brindó conmigo- Por nuestra vida juntos-sonrió

Tenía mi cabeza apoyada sobre el hombro de Ethan, nos contábamos nuestras historias y reíamos de lo patéticos que éramos en algunas situaciones.

-Tenemos que planear la boda- dijo mientras se secaba el pelo con una toalla

-Podríamos hablar con Zinerva, para que nos ayudase- dije poniéndome una camiseta  negra  bastante ancha- aunque primero deberíamos saber dónde casarnos

-¿Dónde te apetece que nos casemos?- se sentó en la cama

-La verdad es que no lo se- me quedé mirando a la nada pensativa

-¿Has ido alguna vez a Grecia?

-Nunca, pero tiene que ser precioso- miré fijamente sus ojos- casémonos en Grecia, así saldremos de Italia un tiempo, nos hace falta

-Lo que la principessa pida-sonrió

Casarnos en Grecia me parecía la idea más increíble que jamás había escuchado. Ethan tenía que descansar un poco de Roma y sus negocios turbios, aunque fuera solamente por un par de días.

I wanna be your slave~ Ethan TorchioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora