I wanna be your slave~ Ethan Torchio

Tranquilidad

No podía dejar de pensar en lo que acababa de pasar con Ethan, supongo que debería de creerle, pero sigue habiendo una parte en mi que quiere rechazarlo, pero me es imposible.

Llegué a la cafetería y pedí un café para llevar y un donut, fui bebiendo por la calle, necesitaba pasear y desconectar.

No se si es porque soy gilipollas o porque realmente le creo, pero lo único que se es que estaba buscando su nombre en mi móvil para llamarle.

-Alessia-contestó feliz

-Cállate y escúchame, te veo en mi casa en media hora, como me falles no volverás a verme jamás, espero que no me estés mintiendo

-Te veo enseguida, te prometo que no te arrepentirás -colgué y fui de vuelta a mi apartamento. No se si estaba haciendo lo correcto, pero yo quería estar con él.

Subí hacia mi apartamento y él ya estaba esperándome en la puerta.

-Ale, no sabes cuanto me alegro de que me dejes hablar

-Entra antes de que me arrepienta-abrí la puerta y pasamos dentro

-Lo primero quiero pedirte perdón, aquella chica es solo una amiga, de verdad, es amiga mía de toda la vida, solo salimos a cenar

-Vale, te creo-sonrió- sigue hablando

-Alessia, tú me gustas, muchísimo, a veces siento que no soy suficiente para alguien como tú

-No tienes que sentirte así, Ethan-me acerqué a él- ¿y que hay de las palizas que te dan?

-Me dan igual-dijo mirándome a los ojos- volvería a defenderte mil y una veces-le miré extrañada- Rob no es como tú crees, no te quiere

-Es un compañero de trabajo

-Y quiere aprovecharse de ti-puso su mano en mi cara para acercarme a él- Tienes que creerme

-Ethan, yo te creo, confío en ti, pero no vuelvas a hacerme daño

-No lo haré, te lo prometo-me besó- prometo nunca más volver a hacerte daño

-Esta es la última oportunidad que te doy-volví a besarle

-Te prometo que no te haré más daño, incluso hablare con Rob y le dejaré las cosas claras

-Te va a dejar el otro ojo morado-reí

-Deberías de ver su labio entonces

-Que macarra eres-reí- Pero será mejor que hable yo con él o que hablemos los dos, así no te hará nada

-Está bien, tú mandas-le abracé

-Quédate un rato conmigo-dije- te he echado de menos

-Pensé que nunca me lo dirías-sonrió y me besó

-No te vayas de mi lado-susurré abrazándole más fuerte

-No me voy, ya no, te lo prometo-me besó la cabeza-ahora, respóndeme una cosa. ¿Por qué saliste a cenar con él?

-Porque tú no me hacías caso, no me llamabas ni respondías mis mensajes, estaba sola y triste-me abrazó fuerte

-Perdóname, por favor

-Estás perdonado, pero me dolió muchísimo

-Alessia, si hubiera sabido que esto te causaría tanto dolor nunca lo hubiera hecho-hizo una pausa- te quiero-le miré a los ojos

-¿Cómo?-dije

-Que te quiero-repitió y sonreí- te quiero

-Ethan... te quiero-le besé y sonreí, parezco una estúpida sonriendo cuando estoy con Ethan. A pesar de todo no puedo evitar lo que siento por él, quiero estar con él, siempre.

Estábamos tumbados en el suelo del salón, riéndonos de nuestras gilipolleces.

-Lo mejor de aquella noche fue cuando te caiste de la cama-dije llorando de la risa

-Me hice daño-replicó- Pero he de reconocer que fue gracioso-dijo

-Creo que fue una de mis noches favoritas contigo-seguí riéndome- es que fue genial

-Vale, Vale, se que fue gracioso, pero ya está- se cruzó de brazos

-No te enfades-besé su mejilla

-Me alegra que estemos así...echaba de menos tus besos y abrazos

-Tu culpa por irte-le saqué la lengua y le abracé

-Hoy es el día de estar en contra de Ethan Torchio-dijo riendo- me sumo a la causa

-Siempre es el día de estar en contra de Ethan-me miró fijamente y me acerqué un poco a él- echaba de menos esto

-Yo también-aparté su pelo de la cara para besarle.

Sus labios y los míos no se despegaban, mis manos recorrían su cuerpo, sabía que necesitaba estar con él, le necesitaba. Desabroché sus pantalones sin dejar de besarle, le miré a los ojos y le besé el cuello. Me quitó el top y bajó mis pantalones, me subí encima de él, me necesitaba tanto como yo a él.

-Te necesito Ale-susurró en mi oído y me agarró con fuerzas y entró haciendo que ambos soltáramos un pequeño gruñido

-Ethan...- nuestras respiraciones, cada vez más agitadas, se entremezclaban.

Sin saber cómo, terminamos en mi cama, estábamos abrazados, yo acariciaba su pelo y él jugaba con las esposas que todavía seguían enganchadas en mi mano. Las palabras sobraban, sabía que esta sería la última vez que él se iría sin darme explicaciones.

-Ale-dijo mirándome fijamente- quería hablarte de una cosa

-Claro, dime-me senté en la cama para verle mejor- ¿todo bien?

-Si, tranquila. Es solo que... bueno, me gustaría que no viéramos a nadie más- me quedé mirándole fijamente

-Ethan...-hice una pausa, sabía que era lo que quería pero no quiero que piensen que estoy desesperada

-Alessia...-contestó, estaba más nervioso que yo, ni que nos fuéramos a casar. Solté una risita- No te rías

-Te he puesto nervioso-contesté- pero-cogí su mano- Yo también quiero lo mismo... no quiero que veamos a nadie más- le besé

-Entonces, ¿se podría decir que somos novios?

-Se podría decir-sonreí