Muero Por Ti ♕Aʟᴀsᴛᴏʀ ʏ ᴛᴜ́♕

T ú

¿Que demonios hace él aquí?

Las palabras de Elizabeth se repetía cada maldito segundo .Estaba sentada en esa silla parecia flotar en un abismo oscuro  y siniestro y si hacia algún movimiento  brusco caería sin dudarlo.

—¿Elizabeth?— Gilbert despejó todo pensamiento.

—¿Ministro?—se levantó lo más rápido posible como si fuera un soldado

—Te estaba presentando a  Alastor, Nuestro "Ángel guardián "—

Ministro  hasta un Ángel se sentiría Insultado en este momento

Ya veo...—dije con todo tranquilidad —Soy Elizabeth Santoro   — mi obligación fue estirar mi brazo para estrecharlo ,pero no espere de su parte que tomara mi mano con elegancia y la besara.

—Encantado de Conocerte —sonreía muy satisfecho .Luego de tanto días sin aparecer.  Había dado su entrada triunfal.

—Espero que se lleven muy bien— Gilbert sonreía mientras Eliza quitaba su mano disimulando un poco

—¡Ministro ! —Cristina interrumpió toda escena — unas de las cantantes del coro esta aquí. Lo busca, dice que no cantara hasta que hable con usted personalmente.

—Pero será posible esta desobediencia es absurdo Iré de inmediato hablar con ella .si me disculpan  ,¡Por Dios! —Gilbert habia desparacido.

No  ahora ,no por favor ...

—Así  que...Elizabeth que casualidad encontrarte  aquí —Alastor recorría la habitación.

Casualidad las Pelotas

Si  ,la verdad que es toda casualidad— mi ironía se oyó por  todos lados —gusto en verte de nuevo Al 

—¿Enserio? Que raro tu cara no dice lo mismo—

—¿Debería estar impresionada?—fingi ser la peor actriz del mundo— Lamento no ser Esa mujer Dramática de los teatros  pero eso no viene al caso.  Solo existe un tema de que hablar y ese es ¿Que diablos hace aquí?

—El lenguaje mi querida ,estamos en una iglesia

Me Cruze de brazos —te hice una pregunta 

—Ya lo sabes dulce e inocente Elizabeth, los niños necesitan un poco de ayuda  de vez en cuando—

—Oh ya veo... y viniste a rescatarnos, estoy feliz por eso  — dije aún más con ironía—¿Cual será tu próximo movimiento ? ¿ matar al ministro?—

—Que buena idea, seria interesante serlo realidad

—Estas demente— Eliza estaba  perdiendo la paciencia —

—¿Llamas demente al que ayuda a los pobres huérfanos?

—No ,  Solo a ti Al.

—¿Esa es tu forma de decir que me extrañas  mi querida belle?

Me acorraló en unas de las paredes de la Oficina .Ni siquiera me dio tiempo de reaccionar. Sus ojos me clavaron en esa pared ,himnotizandome cada maldito momento.