Entre Ritmos y Melodías | Jicheol ³

Décimo capítulo

Lamentablemente, las dos semanas habían pasado demasiado rápido para su gusto.

Había podido terminar la canción y aunque no quisiera admitirlo, extrañaba al mayor, ya que no lo veía desde hace dos semanas porque estaba fuera de la ciudad.

El día del concurso llegó y Jihoon se estaba arrepintiendo seriamente. Al saber que su hermana y Seungcheol (que volvía de su viaje ese mismo día) irían a apoyarlo, se armó con un poquito más de valor.

— Esta es una canción con un sentimiento único...

La voz del presentador empezó a decir la pequeña descripción de la canción de Jihoon y el menor ahora si estaba arrepentido.

Su respiración se empezó a acelerar y pequeñas lágrimas se empezaron a formar.

— N-no, por favor —se agarró firmemente del piano frente a él, tenía una relación de amor-odio con aquel instrumento,— P-pensé que te habías ido ¿Por qué volviste ahora? —le habló a su crisis de pánico.

Sintió a alguien a su lado cuando las primeras lágrimas cayeron.

— Hoonie, está bien —Seungcheol lo abrazó,— Respira... Eres el mejor, siempre lo serás para mi.

Jihoon trató de calmarse, pero tristemente no podía. Seungcheol no tuvo otra opción.

— Perdóname, Ji...

Seungcheol elevó suavemente el rostro del menor y posó sus labios sobre los contrarios, tratando de despejar la mente en aquel tímido gesto; aquel pequeño beso quitó toda la ansiedad del menor, que ahora se encontraba sonrojado a más no poder.

— ¿Mejor? —Seungcheol lo abrazó, haciendo que el menor se aferrara a su camisa mientras asentía despacio,— Te veré desde el público, primera fila.

Besó su coronilla y lo soltó, alejándose del lugar justo en el momento en que el presentador terminaba de hablar.

— Con ustedes, Lee Jihoon presentando la canción "What Kind of Future".

Los aplausos resonaron, los del staff estudiantil corrieron el piano al centro del escenario y Jihoon entró temeroso, haciendo una pequeña reverencia y aún con sus mejillas sonrojadas.

Se acomodó en el piano y respiró hondo; empezó a tocar.

Como si nada sucedió

Me dije a mi mismo que todo fue un sueño

Cuando cierro mis ojos y los abro de nuevo

Quiero despertarme con alivio

Jihoon empezó a cantar y mientras lo hacía, los dolorosos recuerdos que aún mantenía en su memoria empezaban a disiparse, trayendo sólo los mejores momentos.

Cuando no habíamos terminado

Mientras me aferraba a lo que quedaba

Tú me dejaste mientras yo me negaba

A pesar de que no quiero verte, te extraño

A pesar de que te odio, te extraño

No me entiendo a mi mismo

¿Qué tan personal podrían sentir los demás esta canción? No lo sé, pero para Jihoon era el desahogo que siempre soñó.

Esta era una canción dedicada para si mismo... De Jihoon a Jihoon.

Pero éramos felices cuando nuestros corazones se juntaban

Tú, quien ya no está conmigo

A pesar de que no quiero verte, te extraño

A pesar de que te odio, te quiero

No me entiendo a mi mismo

Y al final ¿Qué clase de futuro vendrá a nosotros?

Incluso si el cielo no nos da la respuesta

Soy bastante tonto como para darme cuenta que no podré saberlo

La canción terminó y un Jihoon empapado en lágrimas hizo una venia de despedida.

Buscó con su mirada a Seungcheol por primera vez y al toparla, le sonrió mientras limpiaba sus lágrimas.

Saltó el escenario y se lanzó al público, corriendo hacia los brazos de Seungcheol, quien sonrió atrapándolo.

— Eres el mejor pequeño, estoy orgulloso de ti...

Jihoon besó su mejilla suavemente, dejando helado al contrario.

— Te quiero Cheol —dijo Jihoon firmemente mientras lo miraba a los ojos. Sonrió.

— Y-yo...

— No. Corrijo. —Jihoon lo silenció y dio un pico pequeño,— Te amo.

Seungcheol lo abrazó más fuerte, tomando su nuca y volviendo a besarlo.

El menor tendría que comprender que esa era su manera de decirle cuánto lo amaba y si era necesario, recorrería mar y cielo con tal de hacérselo saber.

Porque en un futuro incierto... ¿Cuáles son las probabilidades de encontrar el sentido a algo tan confuso como el amor?