28| Mala madre

60 3 0
                                    

Valka y Estoico se separaron de la pareja, sonriendo emocionados mientras los felicitaban. Elsa giró la mirada a sus hermanos, Aster le sonrió con cariño y se acercó a abrazarla con cuidado, felicitándola. Tooth se unió al abrazo, siendo cuidadosa para no lastimarlos. Astrid felicitó al castaño con calma, dejando un golpecito amistoso en su hombro y esperando a poder acercarse a la futura madre.

Cuando Elsa se separó de su hermano y cuñada giró su mirada a su madre, que se acercó junto con Jack. Son sonrisa se hizo más amplia al verla cerca, creyendo que la felicitaría como el resto.

—Mamá, quise decirte antes, pero creí que...

El sonido de la bofetada que Elena le dio a la menor resonó con fuerza. Elsa se quedó quieta, tratando de analizar lo que acababa de pasar. Sentía su mejilla arder por el golpe y sus ojos se llenaron de lágrimas casi al instante.

—No te basta con estar cerca del asesino de Emma, si no que ahora.. ¿le darás más hijos a esa familia? —preguntó molesta —Ojalá perdieras ese bebé como me hicieron perder a mi niña.

Hamish se colocó entre ellas enseguida, notando que la mujer volvía a levantar la mano para tratar de golpear de nuevo a la platinada, recibiendo él dicho golpe. Elsa dio un brinco al notar aquello y retrocedió un par de pasos.

—No te metas en esto. —dijo furiosa al castaño —Esto no te incumbe.

—Es de mi hijo de quien habla. —el castaño sintió a la platinada aferrándose a su playera y jalándolo un poco hacia atrás para tratar de alejarlo de Elena—Y le voy a pedir que no vuelva a desearle la muerte. —habló con calma, retrocediendo un paso para mantener su distancia con la mujer y hacer sentir más cómoda a la platinada

—Lo mejor para todos será que esa cosa no nazca. —murmuró —De lo contrario, estará condenado a vivir con una madre incompetente, que en algún momento terminará por matarlo.

—Mamá, basta. —le pidió Jack colocándose a su lado

—Y si ella no lo hace.. seguramente aquellos engendros a los que tanto protegen lo harán por ella. —señaló hacia la mesa donde Anna se encontraba alimentando a su hija, Kristoff frunció su ceño ante sus palabras y colocó su mano en la pierna de su esposa, queriendo darle a entender que él los protegía

—Ya basta. —le pidió Hamish, notando de reojo que Mérida se ponía de pie y estaba lista para recibir instrucciones, al igual que Astrid y las otras doncellas

—¿Sabes? eso se escucha mucho mejor. —se acercó al castaño para tratar de hacerlo a un lado y así llegar a la platinada, sin embargo, él no se movió —Que tengas a tu bebé, que puedas disfrutarlo unos años para que después te lo arrebaten de manera despiadada.

—Mamá, ya basta. —Jack la jaló por el brazo para detenerla

—Serás una pésima madre. Y lo sabes. —forcejeó con su hijo queriendo soltarse de su agarre, Hipo soltó una risa desganada

—Supongo que lo dices por experiencia. —dijo con media sonrisa, la mujer dejó de forcejear con su hijo y vio al castaño con enojo

—¿Qué? —preguntó en un murmullo

—Que eres una mala madre. —aclaró —Quiero decir, criaste a cuatro hijos maravillosos. Pero también les has hecho mucho daño.

—Hamish... —el peliblanco le iba a pedir que parara, pero su madre le interrumpió

—Yo no...

—Una buena madre no habría elegido a su pareja violenta por sobre sus hijos. —siguió el castaño —Tú lo dejaste golpear a tus hijos en más de una ocasión. Dejaste que amenazara la vida de Elsa, que golpeara a Jack hasta la inconciencia y fuera a dar al hospital... 

UN NUEVO LEGADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora