Espíritus: Amor & Magia

Capítulo 5

Narra Rapunzel

Estaba profundamente dormida cuando un grito me despiera, dejenme adivinar, la única que grita aquí es...

-RAPUNZELLLLLLL!!!!!!!!!!!!!!!!!- Es Anna

-Qué tienes en contra del significado de dormir?- digo adormilada mientras me estiraba

Anna camina rápidamente hacia mi cama, me sujeta de los hombros y me sacude para todos lados- Me acaba de pasar algo muy extrañoo!!- quedé mareada cuando me soltó

-Anna, tranquila, inala y exala, y cuentame- dije calmada

-Esta bien- gira su cabeza para encontrarse con Mérida, quien se había despertado por semejante griterio- Y quien es ella?-

-Soy Mérida Dumbroch, princesa de Escocia, del clan Dumbroch-

-Soy Anna Arendelle, del reino de Arendelle, un gusto!- camina hacia mérida y le agarra la mano y la empieza a sacudir de arriba a abajo eufóricamente en señal de saludo- Eres nuestra nueva compañera de habitación verdad??!!- 

-Sí, tranquila ya puedes soltarme- dijo intentando safarse

-Anna que era lo que querías contarme?- dije, a veces Anna suele olvidarse de las cosas fácilmente

-Ammmm, creo que era... ah! sí ! ya lo recordé!- dijo feliz pero luego su expresión cambió a preocupación-Escuchen esto ah sido muuuy raro. Estaba en el jardín con Kristoff, él dejó las plantas muy hermosas y todo para darme una sorpresa a mí, ya que sabe que amo las flores. Pero de pronto empieso a tocarlas y mágicamente las plantas empesaron a crecer y dar más y más flores de muchos colores. Cuando saco mi mano de aquella planta, ésta se quedó estática con esa altura. Luego, sin querer, retrocedí y choqué con una enredadera y estas aumentaron de tamño con muchísimas ramas y hojas. Dejé de tocarlas y Kristoff me miraba con la boca abierta. Decidí venir aquí a contarles- Contaba mientras miraba sus manos

-Anna... estás queriendome decir que tú mágicamente tienes poderes?- le dije muy asombrada

-Guauuu- fue lo único que dijo Mérida

-Eso creo- hubo un silencio después de esto- No me creen verdad?-

Mérida y yo nos miramos dubitativas- Anna, no te ofendas pero, tú nunca tuviste poderes, por qué los tendrías ahora? Yo creo que alguien hechizó el jardín, eso suena más lógico-

Anna miró una maseta que se encontraba en la mesa que está en nuestro cuarto, con una rosa roja y se dirigió hacia ella- Se los demostraré- dijo decidida, y muy temblorosamente, tocó aquella rosa, pero despues de esperar un minuto, no pasó nada- Qué?????? Por qué no crece?-

-Yo coincido con Punzi, creo que el jardín estaba hechizado- dijo Mérida

-Pe-pe-pero- tartamudeaba

La puerta se abrió y entró Elsa con unos papeles- Hola chicas! miren, les traje sus horarios, debemos bajar a almorzar y luego- se detuvo al ver a Mérida- Y ella?- dijo señalándola

-Soy Mérida Dumbroch, princesa de Escocia, del clan Dumbroch, su nueva compañera de avitación. Cuátas veces tendré que decir este chiste?- dijo mientras sonreía forzadamente

Elsa rió- Sólo una vez más, ahora en el almuerzo, te presentaremos dos personas más-

-Elsa, tengo que contarte algo- dijo, Anna

Ella le contó todo lo que le pasó, pero Elsa pensó igual que yo. Mérida le contó toda su vida a las hermanas y ella tambien le contaron en unas pocas horas, nos hicimos muy grandes amigas, inseparables, lo cual fue grandioso, es curioso que en tan poco tiempo tomemos tanta confianza entre nosotras.