Bromas pesadas y sueños raros

298 15 1
                                    

–¿Esto es una buena idea?

–No lo sé, pero, lo averiguaremos

–Vamos a morir

–Lo se, ahora cállate y entra ahí

El peliblanco empujó al rubio cenizo y entraron a la habitación de la única chica del departamento, que estaba plácidamente dormida, el reloj en la mesa de noche marco las 02:47 de la mañana.

–Nos va a matar y lo sabes, ¿No, Dabi?

–La vida se trata de correr riesgos

–Pero yo quiero morir después de cumplir los cincuenta, no antes de los treinta

–Si, si ya gallina, ahora ayúdame a hacer esto

–Te echaré toda la culpa a ti después de esto

El cenizo dijo mientras ayudaba al otro a llenar de miel el pelo y la ropa de la castaña, que soñaba con un pequeño bebé en sus brazos.

–Ma... -la muchacha se removió mientras hablaba en sueños asustando a los otros dos-

–¿Qué cosa? -Touya desconcertado se acercó a oír a la chica-

–¿Tengo cara de saber?

–Mami... Te... Cuida... -dijo y volvió a guardar silencio-

–¿Mami?

–¿Cuidar?

–¿Con que piñas sueña tu novia?

–Repito, ¿Tengo cara de saber?

–Para nada

La conversación concluyó ahí, Touya regreso a su habitación y Keigo se acostó en el suelo.

.

–¡¡TOUYA!!, ¡¡KEIGO!!, ¡¡CUANDO LOS ENCUENTRE ME LAS VAN A PAGAR!! -la ojiazul grito en su cama, con el cuerpo totalmente pegajoso-

En el primer piso del edificio dos muchachos corrían como si su vida dependiera de ello, aunque en realidad así era.

[1 HORA DESPUES...]

El departamento estaba en calma, Touya entro y detrás de él, entraba el cenizo, ambos buscando con la mirada a la castaña pero no hubo señales de ella.

–Ire por mi traje de héroe, llegaré tarde

–Esta bien, yo me quedaré encerrado en mi habitación

[NO MENOS DE 5 MINUTOS DESPUÉS...]

–¡AAHHH!, ¡Esto está frio!

–¡¿Qué pasa?!

–Un balde de agua fría cayó sobre mi

–Ja, eso es obra de Shoko -Keigo dijo observando el sistema de la broma-

–¿Me preguntó que tan cruel es ella? -pregunto y camino jalando un hilo, después dos bolsas de plumas cayeron en su cara y cuerpo- espera, ya no me digas

–Te dije que no lo hiciéramos

–Ya se... Ahora largo a tu trabajo

.

–¡Ayuda!, ¡Esto pica!

Un héroe de apoyo entro a la sala de descanso de la agencia y encontró a Hawks rascándose la espalda contra la pared, como un oso.

–Ehem, ¿Qué le pasa?

–Tengo comezon en todo el cuerpo

–¿Ah?

Hawks... (One-shot's) (Hawks Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora