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-"Vienes conmigo hoy" Mochizuku te habló mientras se colocaba un abrigo y estaba en la puerta

-"Okay" respondiste levantandote de tu asiento para ir con él

-"No preguntas dónde?"

-"Prefiero que sea sorpresa" le dijiste enseguida y tomaste tu abrigo para ponertelo y salir con él

Era de madrugada en aquel momento, estabas despierta y no de casualidad, Mochi anteriormente te había avisado que debías esperarlo ya que te iba a mostrar algo.

No esperabas nada bueno de su parte, pero sentías curiosidad de que era lo que tenía planeado.

-"Me llevas a un burdel" dijiste cuando notaste estar cerca de su destino

-"Lo puedes saber incluso a unos metros de llegar?"

-"Créeme, el aroma ya lo delata" dijiste mirando a un lado observando un poco a tus alrededores

Entraron directamente al lugar, te quitaste el abrigo por el repentino cambio de temperatura.

-"Esto es suyo? Oí que una de las actividades con las cuales está involucrada la organización es la prostitución"

-"Así es listilla" comentó en una sonrisa "Todo esto es nuestro, no tienes una idea de aquellos desesperados que vienen y dejan su dinero aquí"

-"Lo sé" respondiste enseguida "Muchos hombres no consiguen llevar a la cama a las mujeres que quieren, las mujeres somos más inteligentes que ellos, y se sienten frustrados de no conseguir lo que querían, por lo que necesitan sentirse 'realizados' estando con alguna mujer, incluso si eso incluye tener que pagar, les sube el ego que tienen"

-"Haces que suene incluso peor" dijo en una mueca

-"Puedo decir que lo hacen sólo para divertirse, y eso sólo prueba como vuelven un objeto a las mujeres" sonreiste leve viendo como ya lo estabas fastidiando con cada una de tus palabras

-"Seguro eras más agradable cuando estabas en esta 'profesion', mm?" dijo tomando tu mentón "Apuesto a que no podías decir mucho ya que tenías la boca llena" decía en un tono burlesco

-"Burlas, chistes, amenazas, dime lo que gustes, no me afectan" te encogiste de hombros "Y si, tenía la boca llena, algo que tu seguro no podrías hacer porque aquí sigo hablando"

-"Qué mierda estas insinuando?" ya estaba más molesto, apretando tus mejillas

-"Te afecta lo que digo porque eres inseguro~ oh bu bu~" dijiste similando que secabas una lágrima de tu ojo "El hombre grande y fuerte necesita aprobación para sentirse bien consigo mismo? Bu bu~"

-"No te pases de lista conmigo"

-"Primero, lo soy" colocaste tu mano en su muñeca "Segundo, no me importa que me midas como dos metros, y seas puro músculo, no me das miedo, porque eres frágil de mente, y te puedo des-tro-zar" aseguraste mordiendo su mano haciendo que te suelte

Notaste como se separó de ti y por un momento amenazó con golpearte, pero ni siquiera te moviste un centímetro de tu lugar.

-"Hagamos una tregua de paz, mm?" extendiste tu mano hacia él "Es obvio que no te caigo bien, me portaré bien contigo si tu lo haces conmigo, mm?"

-"Lo haré, sólo porque no golpearia a una mujer" dijo entre dientes estrechando tu mano

Reiste levemente por su comentario.

-"Ah~ me divierto mucho con ustedes!" Sonreiste "Puedo pedir una chica?"

Que sorpresa se llevó cuando le pediste algo como eso.

-"Será un regalo de mi parte por nuestra tregua, mm? Sólo está vez, elige la que quieras y ve a la sala privada" te dijo dandote una llave con un número

-"Gracias~" tomaste la misma yendote

Cuando te alejaste de él enseguida cambiaste tu expresión.

Buscaste con tu mirada a alguna de las chicas, alguna que notaras que se sintiera incomoda, con miedo.

Una vez la localizaste la llevaste contigo, al menos ibas a hacer que una noche no la pase mal, pensando en que imbécil la iba a elegir.

Simplemente platicaron en aquel cuarto, hasta que tu tiempo se acabará, y fuese momento de regresar a aquella casa donde te estabas quedando.

Psicología en contra - Bonten (Tokyo Revengers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora