Corazón de Hojalata

Capítulo 6: Como desee.

"Como desee". Ya me había dicho esas enigmáticas palabras otras tantas veces. Que no es que sean enigmáticas, pero si te parabas a pensarlo, ¿Alex cumplía todas mis órdenes? ¿Si así era podría ordenarle que me pidiera matrimonio directamente? Me ahorraría mucho tiempo. A partir de ese momento empecé a pensarlo muy a menudo. Eso y todo el dilema "moral" o lo que fuera que venía a continuación. ¿Estaba bien hacer trampas? ¿Si hacía trampas me pillarían? ¿Mi única motivación para no hacer trampas era que me pillasen? ¿Y si el propósito de todo esto era que yo me diese cuenta de que podía ordenarle a AlexT47-A que me pidiera matrimonio y era todo para pillar? Quizás fuese como un acertijo o algo así... El caso es que todo el trayecto de coche hacia el centro comercial me lo pasé divagando y no pude tener ninguna clase de contacto verbal con el robot.

Intenté no pensar en ello por el momento, era la hora de disfrutar de la cita. Posiblemente la cita fuese importante, en el caso de que el propósito del "juego" no fuese que yo le diera la orden al robot, porque tendría que conquistarle. Al llegar al centro comercial me percaté de que si yo no hablaba, Alex tampoco, así que tenía que proponer un plan lo más rápido posible. Lo primero que se me ocurrió fue ir al cine. Es que no me pude resistir cuando vi que aún estaba en cartel la película de Boku no Pico Academia, Mugen Train. Era una oportunidad única, porque en su momento no me había animado a ir a verla porque ir al cine en solitario me daba un poco de vergüenza. ¡Y esta vez iba con Alex! Sería la envidia de toda la sala, porque iba con un tipo que además era guapísimo.

Alex estaba completamente de acuerdo con ir a ver la película de Boku no Pico Academia, como siempre, con su típico "como desee". Una vez en la sala me percaté de que ir al cine no era lo idóneo para entablar conversación con mi compañero, pero se me olvidó cuando entré en la trama de la película. Tremenda batalla entre All Might y Muzan, los pelos como escarpias. Cuando salí del cine le preguntó a Alex que si le gustó la peli y creo que le dio un cortocircuito.

Para compensar, lo llevé al burger a cenar. Después de pedir mi cena le dije que pidiera, pero me contestó que no puede comer. Me frustré un poco, porque realmente parecía que no había manera de hacer nada con el robot sin que hubiera grandes barreras de desconexión persona-máquina. ¿Qué se supone que se puede hacer con un robot? No se puede ir al cine a ver pelis de otakus porque no le gustan (o lo que sea), no se puede cenar porque no cena... Es que solo me dejan la opción de robot sexual, y no quería dar ese paso tan pronto, no. Además eso era una funcionalidad del robot y ni siquiera cuenta como conquistarlo. Era muy difícil todo aquello.

Alex me estuvo mirando cómo cenaba todo el rato. Era un poco frustrante, pero se compensaba con su cara bonita y su expresión de buenazo-canallita. Porque me pareció ver la expresión de buenazo-canallita. O igual me lo estaba imaginando. La expresión de buenazo-canallita que vi poner a Alex una vez era el único indicio que tenía de que el robot podía tener cierta iniciativa y conciencia propia, así que me aferraba a ella de cualquier modo.

Durante ciertos momentos volví a plantearme todo lo de si era una trampa todo lo del robot y debía yo darle la orden de pedir matrimonio y tal y pascual. Algo en mi corazón me decía que no podía rendirme tan pronto y lanzarme a esta opción, que debía ser un plan desesperado. Decidí que solo probaría esto si en un hipotético caso alcanzara el mes y medio sin que Alex me hubiera pedido matrimonio por su propia voluntad (aunque, según esta teoría, voluntad lo que se dice voluntad no tendría). Traté de no pensarlo más, pero cuando volvimos a casa me pasé la noche dándole vueltas a la cabeza. Pero, sobre todo, le di vueltas a la cabeza sobre otras cosas que podía hacer con Alex para que surgiera la chispa entre ambos.

No podía rendirme en la primera cita, así que tiré para delante. Si tenía dinero prácticamente infinito para hacer cualquier cosa con Alex, tenía que aprovechar y hacer planes de todo tipo. Eso y que, si me fundía todo el dinero de mi viejo durante el mes y medio que estuviera en la mansión, no me haría falta obtener la herencia. Había que sopesar todas las opciones.