Sumiso Del Ángel [JJPROJECT]

¹⁷

JinYoung estaba haciendo un poco de presión en su herida, sintiendo bastante dolor. Esperaba que su hijo estuviera bien. JaeBum conducía por toda la ciudad como un loco en busca de un hospital. Sabía que en al menos había un doctor en cada hospital que había hecho un pacto con su padre.

— ¿por qué me hicieron eso? — sollozó JinYoung asustado. — no he hecho nada.

— no lo sé, amor, no lo sé, pero no dejaré que les suceda algo. — respondió JaeBum aquejado. — mientras vivan, estarán bien.

Cuando llegaron a un hospital, JaeBum cargó a su ángel en brazos y entraron. Im recostó a su esposo en una camilla, luego, llegaron enfermeras a atenderlos.

— quiero que el doctor Jeong venga personalmente a atender a mi esposo. — exigió Im. — lo quiero aquí ya.

— señor, el doctor está en cirugía. — le dijo una enfermera.

— ya no lo está. Dígale que Im JaeBum lo espera. — expuso, y la enfermera tuvo retirarse a buscar al doctor. 

Mientras tanto, en el quirófano, el doctor trataba de salvar al feto de un tumor, sin matar a la madre. Estaba concentrado, cualquier error costaría caro. Una enfermera entró al pabellón y tuvo que parar.

— doctor, alguien lo busca en emergencias. — le dijo la mujer. 

— infórmale que estoy en cirugía.

— le dijo que era urgente. — siguió la enfermera. — me dijo que le dijera su nombre. Im JaeBum.

Jeong detuvo en seco. Su jefe seguramente mataría a la mujer si no iba ahora. 

— cierren a la paciente y pospongan la cirugía. — ordenó a sus equipo y salió del pabellón, corriendo a urgencias. 

Cuando llegó con su jefe, encontró a su jefe y amo, con una pareja. Un chico que no pasaría de los 20 años, pero embarazado, con una herida en su vientre. No se veía mal, y debía representar ningún peligro para ambos, aunque médicamente todo podría salir mal, sabía que JaeBum podría mantener su vida a salvo. 

— Jeong JungKook, te di tu título de medicina, tu carrera y la mejor posición, mínimo debías estar aquí apenas cruzo la puerta. — habló Im. — mi pareja no debe esperar por atención. 

— ya cálmate. — murmuró el chico, acariciando su vientre. — estoy bien, supongo. Fue solo el susto, aunque duele. Pero él está bien.

— ¿Y cuántos meses tiene? 

— dos meses. — respondió JinYoung. 

— bueno, solo te pondré un pequeño parche ya que pareces estable. — le dijo el doctor.

— si algo le sucede a mi esposo o a mi bebé por tu negligencia, voy a asesinarte. — le advirtió Im. 

— dájalo, estamos bien los dos. — dijo JinYoung, tratando de tranquilizar a su esposo. — el dolor ya pasó...

JaeBum tomó un suspiro y dejó ir al doctor. Tuvo que calmarse, solo para que su Jinnie estuviera cómodo. Le pusieron un parche en su herida y le recetaron algunos medicamentos para que el nene en camino estuviera bien.

— quiero ir a casa, a descansar. — pidió el chico, tomando la mano de su esposo.

♡♡♡

Al llegar a casa, JinYoung se puso su pijama, que alguna vez fue de JaeBum, pero le gustaba sentir su aroma, luego se acomodó en el pecho de su esposo, dándole caricias en el pecho.

— no debí dejarte solo. — se lamentó Im. — desde hoy iré contigo a cualquier parte.

— ¿qué hay de tu trabajo? — preguntó con un puchero. — no quiero que te estanques.

— me da igual, quiero que ustedes estén bien. — le contestó, jugando con el cabello de su esposo. — haré todo lo posible para que sigan a mi lado...

— yo jamás me iría de tu lado. — le dijo el embarazado, acariciando su pancita aún delgada. — tuvimos suerte esta vez.

— prometo que no volverá a ocurrir. — le respondió, acariciando la espalda del mortal. — por primera vez amo algo en mi vida, y no dejaré que me lo arrebaten. Eres mi todo.

— tú hiciste todo esto posible, te detuviste apenas te enteraste, ¿no es así?

— sí, paré porque debía protegerte. — le dijo pensativo. — no sabes lo solo que me sentí durante los últimos 2000 años... Vivir una vida de caprichos, llena de escenarios violentos, planes malvados que idear. Ser el anticristo no es fácil.

— al menos ellos te observaban. — contestó Jin, besando los labios del mayor. — perdí todo lo que amaba, a todos los que amaba. ¿Y sabes? Siempre quise saber si Mark y yo hubiéramos sido buenos esposos, claro, si sobrevivía.

— pues, no estarías conmigo. — contestó Im, acariciando el cuello de su esposo.

— sí, lo sé, pero a costa de siglos de dolor, llanto y lamento, observando cosas horribles y siendo víctima de actos atroces. — comentó el menor con tristeza. — estar aquí contigo es imposible, y tampoco sé cómo acabé aquí, así. Bueno, sí lo sé. Pero... jamás se me hubiera ocurrido que luego de tanto estaría aquí, enamorado del... del anticristo...

JaeBum sonrió y recostó a JinYoung en la cama, luego se subió sobre él, empezando a repartir besos en el cuello del embarazado.

— me hubieras dado igual hace 2 años... — le comentó Im. — sé todo sobre los ángeles prisioneros, sobre los sumisos, sobre los abusos. Sabía de ti. — se detuvo unos segundos, quitándole el pantalón de pijama a su esposo y ganarse entre sus piernas, levantando la camisa de su pijama. — supe que me montabas cuando me la jalaba, supe que te masturbabas solo, supe muchas cosas de ti. Pero, también sabía esos enamoramientos que tenías con los humanos. — y guardó silencio, empezando a pasar su lengua por el abdomen aún plano de su pareja, robándole suspiros. — así que... no perdamos más el tiempo separados y sigamos juntos...

JinYoung iba a hablar, pero su esposo lo detuvo, empezando a morder sus piernas con cariño, dejando sutiles marcas, centrándose en los muslos, en la parte interna.

— uhm... — gimió, cubriendo sus labios con el dorso de su mano. — ¿y por qué a mí...?

— porque tú me enamoraste. — contestó, tomando al chico de la cadera y poner sus rodillas sobre sus anchos hombros. — porque tú eres el único para mí. Porque apenas te vi ese día, pensé en no soltarte nunca más. Porque, Jinnie, tú te convertiste en mi única obsesión a lo largo de mi existencia.