Capítulo 2: Entre confusiones y nuevas amistades

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**En el ultimo capitulo**

 Hay que hablar ya, Hikigaya. — Dijo Hayato con una seriedad que solo Hachiman captó completamente.

**Fin de la perspectiva**

- Umm, ¿y para qué vamos a hablar? — Respondió Hachiman con igual seriedad.

- Porque esto es muy, MUY importante. — Insistió Hayato, elevando el tono para subrayar la gravedad de la situación.

Pero antes de que pudieran continuar, un ryajuu de cabello castaño los interrumpió.

- Oh, Hayato, ¿de qué tanto hablan con Hikigaya-san? — Preguntó el ryajuu alegremente.

- Ah, hola Tobe, no te preocupes, es solo un tema entre Hikigaya y yo, sin importancia, ¿no es así, Hikigaya? — Respondió Hayato con una sonrisa forzada, su mirada decía "deberíamos hablar en privado".

- Uh, a-ah, sí, solo una conversación entre... amigos, ¿no es así, Hayato? — Confirmó Hachiman, acentuando la palabra "amigos", lo que no agradó del todo a Hayato.

- Oh, ¿con que es eso? Pensé que era algo importante por la seriedad que mostraban. Incluso todo el salón se ha percatado. — Dijo Tobe sin darle mayor importancia a la conversación detrás de él.

Ambos miraron a sus compañeros para confirmar si la atención estaba en ellos.

- No te preocupes, Tobe, no es nada serio. Solo queríamos coordinar una salida, ya sabes, Hayato y yo no podíamos ponernos de acuerdo porque está muy ocupado con sus deberes, ¿verdad, Hayato? — Dijo Hachiman, mirando a Hayato para que siguiera el juego.

- Así es. Así que, Tobe, si nos disculpas, tenemos que ir a otro lugar para hablar. — Dijo Hayato, tratando de parecer relajado mientras Hachiman lo seguía.

- Oh, no se preocupen, los dejaré para que hablen sobre su salida de amigos. Avísenme más tarde, ¿sí? — Respondió Tobe, sin sospechar nada.

- Claro, al rato les avisamos.

Plap, plap. — Pisadas.

Ambos vieron cómo Tobe se alejaba y luego volvieron a mirarse.

- Así que, Hikigaya, acompáñame.

Hachiman se levantó sin rechistar, consciente de que negarse podría causar un conflicto con el "príncipe" de la escuela, Hayato, y aumentar la tensión, algo que definitivamente quería evitar.

Plap, plap. — Pisadas

Bishibishi. — Murmullos

(Y ustedes, ¿qué murmullan? No, ni eso es murmullo. Desde aquí los escucho. Si no fuera por una de mis 108 habilidades de solitario, no podría entender sus murmullos. En serio, ¿no tienen algo mejor que hacer? Bueno, no es mi problema. Tengo un problema mucho mayor que todos estos normis y simps. Y ese problema se llama Hayato. Por mucho que odie a este ryajuu, odio este silencio. Las miradas, aunque me he acostumbrado a ellas, son incómodas. Pero estas son diferentes, como preguntas y ¿sorpresa? No sé cómo describirlas. Solo quiero acabar esto y volver a casa con mi linda hermana Komachi, Kamakura, Vita-chan y mi Max Coffee. ¿Qué hice para merecer esto?)

Un pequeño salto de tiempo.

Se puede ver a dos jóvenes en una zona aislada de los terrenos de la escuela. Hayato, con una expresión seria, y Hachiman, esperando a que Hayato hablara.

La Pérdida De Algo GenuinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora