¿Que si estaba cansada?, pues si, no me acostumbraba que todas las mañanas hubiera oficiales en la residencia. De hecho, los recibía apresuradamente, después de salir de bañarme o con el cepillo atorado en mi rebelde cabello castaño.
No loculpo que salgan corriendo, pero podrían no ser tan evidentes.
— Se que soy una señorita muy hermosa, pero tampoco no huyan de esta belleza—respondí al oficial que huía tras ver mi escote.
Indiferente cerré la puerta y me dirigí a la sala, abrí el cajón de la mesa, encontrando con el papeles y lapiceros esparcidos por todo el espacio, pero en cambio eso no me importaba, saqué el cajón de sus riendas y con una llave abrí la tabla que se encontraba debajo de este.
—Bien, ¿en qué nos quedamos? —Respondí para mí, sacando el material que si me interesaba—Así. En encontrar la forma de entrar al castillo sin ser descubierto. Que pena que aún no encuentre un punto débil.
No sabíamos nada en cómo podríamos reconocer la flor amarilla, pero Amelia mando una carta a su maestro que resulto otro que sabia sobre su embarazo, este nos respondió que entregaría personalmente la flor en el castillo.
Solo teníamos que entrar.
Me senté, y en la pequeña mesa coloqué el mapa y los papeles de la construcción del castillo. Había pasado siete noches tratando de encontrar un punto débil, pero nada, siempre había algo más halla que arruinaba mis planes.
No había duda no podía entrar sola, sin ayuda de alguien encargado de los controles de seguridad.
—Victoria sigues buscando—pregunto mi padre.
—No esta vez lo tengo, solo necesito un contacto dentro al castillo —lo mire como si tuviera la respuesta—Bien recurriremos al plan B.
—¿Plan B? —dijo mi padre con su seño profundo.
—Sip, solo tengo que buscar a mi presa—le respondí recogiendo todos mis materiales para ocultarlos nuevamente. — Una muy tierna.
Sabía lo que hacía y no me gustaba.
Ahora me encontraba donde un burdel, esperando ser invitada por un hechicero u oficial, pero ninguno quería de mis atenciones. Que alguien me diga el porqué, no es como si los estuviera acechando como mi presa, porque lo son, acaso es tan evidente.
Pare mis pensamientos al ver un joven rubio, bien inocente.
Sonreí por mis adentros, te encontré bebe.
Me pare de mi sitio, y me aferre a su brazo pidiéndole que me escogiera.
—U-u-una be-be-bella mujer—tartamudeo este al tenerme muy cerca de su rostro—Qui-quien es e-ella? —dijo este señalándome.
—¿Ella? ...mmmm—la señora buscaba en su registro— joven creo que-.
La corte de lleno, para sacar de mi escote, atrayendo la mirada del rubio, el documento falso y entregárselo a la mujer—A partir de hoy trabajo aquí.
Solté una risita, nada de mi estilo, y jalé a mi presa a una de las habitaciones teniendo la envidia revoloteando asia mí.
Cerré la puerta con una sonrisa, y me dirigí a la cama en la que estaba, me acerqué como gatito pidiendo ser mimado.
¿Les digo algo?, pero es que nunca me tope con un hombre tan inocente como él. No se movía, nada ni siquiera se atrevió a tocarme, y no dejaba de temblar como si yo fuera un deja bu.
—Miau~—le ronroneo incitándole que diera el primer paso.
Seguí acariciando su cuerpo con el mío, pero este no dejaba de temblar.
Coloque mi pierna en su hombro para que apreciara mi blanca piel, pero este seguía sin moverse.
—¡HA! Ya me cansé—solté, me aferré a su uniforme rasgándolo y con un movimiento lo puse boca abajo, Apretando su cuerpo con mis piernas—¿Qué acaso es tu primera vez?
—¿Q-que haces? —dijo este sonrojado.
Harta saque un cuchillo debajo de mi falda, y coloque el largo cuerpo de esta sobre su garganta.
—¿Qué hago?, pues te amenazo. Escúchame muy bien— aprete mi agarre—estoy harta de tu actuación, tú vas ayudarme con un trabajito.
De repente lo vi sonreír.
—¿Tu trabajito? ¿Y para que quiere una gatita mi ayuda? — dijo este con sus ojos verdes bien abiertos viendo directamente a los míos. —Mmh. No mentiré que me excitaste con un cuchillo en mi garganta.
Al escucharlo, deje de presionar y lo voltee para mirarlo directamente.
—¿Quién eres? —le pregunte tratando de ocultar mi sorpresa.
—Eso mismo quisiera saber de ti. Busco diversión con una bella dama, pero resultaste ser una tirana, haa~ ...Cuando podre encontrar una hermosa dama a mi disposición, para andar bailando por lo bares y que sea la primera en probar mis inventos y.. y.. y si morimos, morir ahogados en los manantiales del castillo seria todo un sueño—quedé estupefacta ante su confesión—pensé que la había encontrado—me miró. —pero eres una tirana y que si mientras hacemos el delicioso y me apuñalas con tu arma. ¡A un soy muy joven! Y nuestros hijos, ¿lo dejarías sin padre?
Retrocedí asustada.
¿Pero qué le pasa? ¡Está loco!
—O-okey...te dejare— al decir eso me apresuré de escapar de él.
—¿No que querías mi ayuda? —su voz me detuvo. —¿y bien? ¿Cuál es tu pedido?
Voltee lo más lento posible y lo mire masticando una manzana estando bien vestido.
Sorprendida, me dedique a mirarlo detenidamente.
Vestido con un conjunto azul, su camisa ya estando abotonada sobresalía por sus bordados, y aunque debería ir un pañuelo en su cuello, estaba completamente abierto. Se notaba despreocupado, y realmente hermoso como eso típicos príncipes de castillos en el cielo.
¡Dios parecía un ángel!
—¿Dime, es gratis tu ayuda? —le pregunte.
—¿Gratis? Ho por supuesto que no, también necesito algo de ti— dijo este con sus ojos y dientes brillantes.
Podría jurar que vi una estrella de 8 puntas en sus ojos. Se notaba que estaba de deseoso en que lo ayudara con lo que quería.
¿Pero quién es mi presa?
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BENDICION DEL CIELO💮☁️ [#PNA]
AdventureCada ochenta y cinco años los dioses bendicen al mundo con un ser sobrenatural enviado como una medida catártica, segun la cual la raza humana puede usar para sus propios fines. Un dia, la hermana de Victoria regreso muy herida y con un hijo bendec...