Capítulo 27.

51 6 1
                                    

CAPITULO XXVII

Seth.

Killua se encontraba en el baño de la habitación de Alluka, seguía algo molesto porque Gon contestó la llamada después de decirle que no lo haría, realmente estaba furioso con gon, además aún seguía con un problema.

A pesar de la situación, su erección seguía ahí abajo y parecía no querer desaparecer, se sonrojó y se enojó aún más, está vez con su propio cuerpo por estar en esa situación.

No solía estar en esa situación muy seguido, realmente nada lo excitaba, pero Gon simplemente lo hacía perder su cordura y después de verlo tan sometido, después de escuchar sus gemidos y sus jadeos, además de sus súplicas por seguir, simplemente lo enloquecían.

Maldiciendose a sí mismo y al Gon sumiso, simplemente salió del baño con una de las almohadas de la cama de Alluka para seguidamente regresar al baño y encargarse de su “problema”.

Al terminar, limpió el lugar, ordenó la habitación de Alluka nuevamente y terminó duchándose de nuevo, luego tomó su celular del suelo, observando que eran ya la 1:37 p.m, no se esperaba que fuese tan tarde, soltó un pesado suspiro y se dirigió a la cocina, tenía que comer algo.

Comenzó a pensar entonces en...¿Qué pasaría ahora?.

Aunque estuvo a punto de tener sexo con Gon, no significaba que eran pareja, ¿Cierto?.

Además, estaba en un conflicto, al saber sobre la enfermedad de aquella joven de ojos claros, temía por el bebé de gon. No sabía mucho de medicina pero en algún momento entre tantos trabajos escolares se topó con el tema del embarazo y al investigar al respecto para poder entregar un buen trabajo, como siempre exigió su familia, se encontró con las complicaciones del embarazo y sabía que para casos como el de Kanon, dónde una enfermedad del corazón está presente, el estado de ánimo de la progenitora era de vital importancia.

Y aunque le hervía la sangre, sabía que esa chica estaba tan enamorado de Gon como él lo estaba, quizá más al poder haber disfrutado su cuerpo una noche. Y el hecho de que Gon la tratase fríamente, podía afectar su estado de ánimo, ¿Cierto?.

Solo eso faltaba, el solo imaginar a gon siendo cariñoso con ella, lo enloquecía de celos, sin darse cuenta Killua comenzó a bufar de lo molestó que estaba.

- Uy, con ese humor, mejor no habría venido. — Mencionó una voz masculina que Killua no reconoció, pero le sirvió para salir de sus pensamientos.

Ahora Killua estaba confundido y algo molesto, ¿Cómo demonios había entrado al apartamento y quién se creía que era para hablarle así?.

La voz provenía de la sala de estar, por lo que después de revisar la cocina y observar que ni siquiera había empezado a cocinar, soltó un pesado suspiro y decidió ir con el desconocido, al correrlo del apartamento comenzaría a preparar su almuerzo.

- ¿Quién diablos eres?, ¿Cómo carajo entraste aquí?. — Preguntó notoriamente molesto con aquella persona que aún no sabía quién era.

Destinos Cruzados [FINALIZADO].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora