Destinos Cruzados [FINALIZADO].

Capítulo 25.

CAPITULO XXV

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Interrupciones.

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Gon mantenía sus manos a ambos costados de la cintura ajena, totalmente perdido en sus pensamientos, su mente y su corazón estaban concentrados en el reciente beso, el cuál no se comparaba a los besos anteriores entre ambos, por un momento, Gon sintió que ese beso significaba el perdón de Killua.

Killua por su parte, comenzó a regresar a la realidad, separando poco a poco su frente de encima de la frente del moreno, mientras miró atentamente su rostro, convenciéndose de que Gon definitivamente estaba frente a él y más aún, el reciente beso, que pareció un sueño, realmente había ocurrido.

Comenzó a analizar los alrededores, recordó que estaba en el apartamento de su hermana y recordó que estaba sentado encima de las piernas de Gon, mientras esté mantenía un firme agarre en su cintura, cosa que lo hizo sonrojar al recordar que tan solo llevaba una toalla blanca alrededor de su cintura, pues cuando escuchó la puerta ser tocada, estaba terminando de ducharse.

Inmediatamente Killua intentó bajar de encima de Gon, pero esté volvió más firme su agarre, evitando así que Killua pudiera moverse.

-Gon, que me hayas besado no significa que te estemos juntos, bueno, de hecho ni siquiera antes estábamos juntos. - Mencionó, algo nervioso, por la posición en la que estaba.

-¿A qué te refieres?, pensé que ya estábamos bien. - Mencionó Gon, mientras en un rápido movimiento uno de sus brazos rodeó la cadera de Killua, y con su brazo libre, acercó su mano a la cara de Killua, acariciando sus mejillas, mientras le sonreía. - Amo tu cara roja. - Mencionó casi en un susurro que hizo estremecer el cuerpo de Killua.

- G-Gon, te perdoné, pero no podemos estar juntos, tú tendrás un hijo y la madre de ese bebé está en peligro, deberías cuidar de ella también, además ese bebé siempre te unirá a ella. - Mencionaba, mientras su voz parecía a punto de quebrarse. - No hagas esto más difícil para ambos, por favor. - Pidió, nuevamente intentando bajar de encima de Gon.

- Pero....¿Podemos permanecer así solo por ahora?, no quiero preocuparme por el futuro, déjame disfrutarte hoy, por favor. - Pidió también Gon, mientras depositaba pequeños besos en las mejillas rojas de Killua.

- G-Gon...Idiota. - Mencionó Killua, escuchando sus palabras, casi en un gemido al sentir los besos de Gon bajar a su cuello.

- Te amo Killua....Te deseo y por ahora, solo quiero probarte. - Mencionó en un susurro en el oído de Killua.

Un pequeño escalofrío recorrió la espalda de Killua al comenzar a sentir las caricias de Gon.

No podía negarlo, él también lo amaba y deseaba.

Al vivir juntos, simplemente dormían juntos, pero jamás paso a más de miradas que demostraban el deseo que sentían por el otro, pero el hecho de qué Gon observara a Killua casi desnudo, simplemente no pudo contenerse más.

Gon siguió besando el cuello de Killua, mientras el albino acariciaba el pecho de Gon, por encima de su ropa, comenzó a bajar sus caricias, hasta adentrar sus curiosas manos debajo de la camisa de Gon, tocando así suavemente las líneas que marcaban cada músculo que el moreno poseía por mantener una muy buena condición física.