- Espera aquí - dijo Zhan cuando se detuvieron en la puerta de su habitación.
Yubin había querido entrar, pero se contentó con echar una mirada hacia adentro cuando Zhan entró al baño.
En efecto, había almohadas sobre la cama, y cobijas; estaba más cálido que en el resto de las habitaciones. Ahí la calefacción estaba unos grados más arriba. Era raro, muy raro, pero no dijo nada, cerró la puerta y aguardó, dando vueltas frente a ella.
Zhan salió con la prueba unos minutos después; su rostro se encontraba contraído en un gesto indescifrable.
- ¿Qué pasa? - preguntó, y éste le tendió la prueba - ¡No puede ser! - exclamó y tomó la prueba en donde se observaba un claro "positivo".
Zhan sacudió la cabeza y señaló la prueba.
- Está caducada o algo.
Yubin revisó la caja. No, no estaba caducada.
- Está mal hecha - replicó.
- Una prueba de sangre, no tendremos dudas con ello.
- Yubin, es imposible
- Lo sé, pero...
- Pero ¿Qué?
- He oído de embarazos psicológicos en hombres. Las pruebas salen positivas, les crecen los pechos, el vientre... pero todo es mental.
Zhan frunció el ceño, no creía que fuera eso.
Con todo, aceptó hacer la dichosa prueba de sangre. Los resultados se repitieron y la perplejidad de los amigos sólo aumentó.
Se mordió la lengua, más de una vez.
Durante la cena con Yibo, quería decirle y a la vez no. Imaginaba que este le diría: "Te lo dije" "Yo tenía razón" Y nadie podía tener razón por encima de él.
La perplejidad llevó a la angustia y se terminó comiendo dos litros de helado de cookies & cream. La angustia dio paso al llanto y acabó llorando en el baño. Finalmente, cuando salió, Yibo lo vio; tampoco pudo decir nada, sólo quiso un abrazo, unos besos y más mimos hasta quedarse dormido.
Al día siguiente, se armó de valor y fue a ver a un amigo suyo. Ayanga era de su completa confianza y si alguien podía ayudarle con aquello, sin duda, sería él.
- Yubin dice que es psicológico - dijo cuando le entregó la prueba de embarazo.
Ayanga le miró con el ceño fruncido y con el sobre de los exámenes entre las manos.
- Si ese es el caso A-Zhan, no soy ese tipo de doctor.
- Sólo échales un vistazo - Zhan se dejó caer en el sofá de la oficina de su amigo y suspiró sonoramente, ¿No tienes dulces aquí?
Ayanga negó y suspiró de nuevo.
🐾🐺🐾
- ¡Esto es imposible! - exclamó el doctor cuando revisó los análisis - ¡Eres hombre! Tal vez, Yubin tiene razón.
- ¿Y cómo me lo quito? - preguntó - Es que no quiero decirle a Yibo, tal vez, se ilusione con algo que sólo existe en mi mente... pero yo no pensé en ello.
Ayanga sacudió la cabeza y se sentó en un sillón contiguo a su sofá.
- Pues, necesitas terapia, supongo.
- ¿Puedes hacer algo?
- No soy ese tipo de doctor... - repitió Ayanga - Espera, ¿Quién es Yibo?
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El origen
RandomEn una noche de luna llena, el lobo alfa de la manada pide un deseo. Bajo el amparo de la Diosa de plata surge una nueva raza. ADAPTACIÓN Esta historia no me pertenece