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*Capitulo sin editar*

Amber tiene una sonrisa amigable en su cara. Ahora estoy más nerviosa, no pense que estuviera su madre aqui ¡Como no va estar si es su casa! ¡Por Dios Vanessa!

—Hola señora Amber— la saludo cordialmente con una sonrisa incluida.

—Hola Vanessa, y por favor no me digas señora— Hace una mueca de horror—. Me hace sentir vieja.

—A mi madre tampoco le gustan que le digan señora o la llamen por su nombre completo— le admito ladeando la cabeza divertida.

Ella rie—¿Quieres pasar? Asi nos conocemos mas.

No dudo dos veces y acepto.
Ya estando adentro, ella me indica que me siente el la sala mientras ella va a preparar algo de comer.
Veo fotos en la mesita que tengo al frente, visualizo el lugar, estoy algo aburrida.

Despúes de un rato llega Amber con unos panes rellenos con queso y jamon, una limonada, y rolls de canela.

Ella me pasa un plato con el pan, y me da un vaso de jugo. Yo espero que ella se siente para empezar a comer, realmente tengo hambre ¡no me juzguen!

—¿Y bueno cariño que te trae por aqui?— pregunta, mientras termina de masticar.

Yo mastico rapido—Vine a charlar con su hijo algo— me limito a decirle.

—¿Algo de su relación?— inquiere con una ceja elevada, y yo empiezo a toser.

—No por ahora Noah y yo somos solo amigos— aseguro acariciandome el pecho.

—Si, no sabia que los amigos de daban besos— ella dice divertida, yo solo puedo abrir los ojos como platos—. Cariño, Noah me cuenta todo, bueno no relativamente todo.

—¡Ay señora Amber!— ella me ve con fastidio por el señora—. Que digo Amber, Noah es complicado.

—Eso lo se cariño, a veces provoca matarlo pero despues recuerdo que es mi hijito— admite y yo no puedo evitar reír a carcajadas.

Sigo comiendo, al igual que ella.

***

Ya terminamos de comer, todo esto ha sido agradable. Amber no ha parado de hablar, realmente no me siento incomoda al hablarle de mis sentimientods respecto a su hijo.

—¿Y usted tiene mas hijos?— pregunta mi lado curioso.

Ella asiente—Pablo de veinte, Amanda de veinticinco, Noah es el mas chiquito de dieciocho.

—Oh, no sabia que Noah tenia hermanos.

—No le gusta hablar mucho de ellos, bueno  nadie de su familia  en general— me afirma.

—¿Porque? Yo hablo de mi familia hasta por los codos— menciono y eso hace reír a Amber.

—Por lo que me ha dicho, no quiere que sepan cual es su punto mas débil, lo cual es su familia— informa seriamente.

Quedamos en silencio. Un silencio abrumador.

—¿Y no sabe cuando viene?— le pregunto.

—La verdad no se, el dijo que saldria pero para saber para donde— asegura divertida.

Amber es muy divertida, y eso me agrada de ella. No le importa reirse tanto asi que hace rato le dice un chiste malo y se rio porque le dio risa mi risa, asi me aseguro ella.

VIVIR SIN MIEDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora