Capítulo 17

771 152 62
                                    

Por segunda ocasión, la visita al hospital no estaba dentro de sus planes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Por segunda ocasión, la visita al hospital no estaba dentro de sus planes. Aunque Idris había asegurado que la lesión de Hope era un esguince leve, Vance había querido llevar a su novia al hospital para estar seguros.

Arden había acompañado a Hope para su revisión, lo que había dejado a Rhys solo, de pie en medio de la sala de espera, leyendo un afiche sobre los efectos de los rayos ultravioleta. Vance y Jude platicaban en voz baja, sentados en una esquina. E Idris estaba al otro lado de la sala, viendo un video musical en la televisión. El resto de los invitados de la clase se había marchado, mientras que las damas habían decidido aprovechar el resto de la noche para afinar detalles de la boda.

Cuando se cansó de estar de pie, Rhys se acercó a Idris y sonrió.

—¿Puedo sentarme?

Idris giró el rostro y Rhys se perdió en sus ojos por unos segundos; eran grandes y expresivos, de un suave color verde agua. Él ocupó el asiento a su lado y apuntó hacia la puerta por la que Hope y Arden habían desaparecido.

—¿Crees que Hope se recupere pronto?

—Si es un esguince leve, sí —respondió Idris—. He sufrido ese tipo de lesiones muchas veces. Con un poco de medicina y reposo estará bien en unos días.

—Ojalá no se sienta triste por no poder continuar practicando el baile.

Idris negó con la cabeza y esbozó una ligera sonrisa.

—Hope no necesita más clases, tiene controlado el vals. Mi madre les dio un par de clases particulares en la academia, hace unas semanas.

—¿La academia es de tu familia?

Él asintió.

—Es de mi madre. Fundó la academia cuando se retiró del ballet. Lleva años dando clase. Yo me uní hace poco más de un año, luego de abandonar la compañía de danza a la que pertenecía.

—¿Qué sucedió? —indagó Rhys.

Por un instante pensó que estaba siendo entrometido, pero era muy fácil hablar con Idris, pues era amable y no notaba incomodidad o desagrado en su semblante.

—Tuve una lesión en la rodilla —respondió—. La verdad es que podría haber seguido bailando profesionalmente con ellos. La compañía no me sacó, pero mi lesión quizá empeoraría con los años.

Rhys se sintió afligido y culpable por haber preguntado.

—Lo siento —murmuró.

—¿Por qué? —El joven sonrió—. Viví los mejores años con la compañía de danza. Aunque soy joven, puedo decir que bailé todo lo que quise. Estuve en muchos espectáculos y fui libre para decidir lo que quería hacer.

Se miraron y Rhys no halló amargura en sus ojos, solo calma.

—Tienes talento —opinó Rhys—. Creo que sientes pasión.

Cómo unir un amor incompleto [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora