extra 01☁️

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- ¡MINHO!

Era lo que gritaba un Han Jisung con el ceño fruncidito conforme avanzaba hacia el comedor del departamento, lugar donde se encontraba el dueño de sus recientes pequeñas rabietas.

-¿Qué pasa, bebé? -preguntó el aludido mientras metía una fresa a su boca.

-¿Qué es esto? -señaló lo que llevaba en las manos al tiempo que se dedicaba a observar a su mayor con los ojos entrecerrados.

-Ehh.. ¿mis zapatos? -cuestionó un tanto confundido por la pregunta del contrario.

-¡Ya sé que son sus zapatos...! Lo que quiero decir es que- ¡Oh, mira, fresas! -se interrumpió a sí mismo para seguido tomar la mencionada fruta del envase que Lee tenía en sus manos.

Minho veía la escena con total desconcierto reflejado en su rostro.

-Como decía.. -continuó el menor tras tragar lo masticado- ¿Sabe dónde estaban los zapatos? No, no lo sabe, porque deja todo desordenado -alegó sin dejar que el más alto respondiera a la pregunta.

-¿Yo soy el que deja todo desordenado? Pero si eres peor que yo, Hannie, por donde quiera que pase encuentro tus cosas regadas -refutó Lee a lo expuesto por el más pequeño.

-Claro que no, hyung, no diga mentiritas -decía frunciendo los labios a la vez que cruzaba los brazos sobre su pecho.

-No digo men- ah, no voy a ganar contra ti, ¿eso era todo?

-¡No! Que el departamento esté desordenadito a todo momento es lo de menos.

-¿Y entonces?

Han suspiró para seguido acercarse a su noviecito y sentarse a horcajadas en su piernas.

-Abrázeme un rato, estoy muy estresadito.

El -ahora- pelinegro realizó lo pedido por el -ahora- peliblanco; sí, al final se tiñeron el cabello justo como Han quería que lo hicieran, a todas estas le quedaban preciosos los colores y combinaban perfecto entre sí.

Y si no quedó claro, pues sí, ahora vivían felizmente juntitos en un departamento, o como Hannie bebito prefería llamarlo, su nidito de amor... y desastres.

-Qué es lo que en realidad pasa, amorcito? -preguntó Lee con voz suave al tiempo que dejaba caricias en la cinturita de su aparentemente decaído noviecito.

-Nada grave, hyung, sólo que... hizo una pausa para apartar la cabeza del cuello del mayor y conectar sus miradas- tengo muchas cosas que hacer, todo lo que tengo que estudiar, hay que ir de compras, llevar a soon-ie, doong-ie y dori al veterinario para colocarles sus vacunas, y visitar a mamá, creo que tener todo eso acumulado me abruma, y... d-de paso lo molesto muchito, es que que usted si-siempre está ocupadito trabajando o estudiando y ahí estoy yo pidiéndole cosas estúpidas todo el t-tiempo.

A este punto sus ojitos ya estaban cristalizados y las lágrimas amenazaban con deslizarse por sus mejillas.

El mayor escuchó todo con atención, no pudiendo evitar sentirse mal por no percatarse de lo que Jisung sentía. Admitía que últimamente la universidad los tenía bastante ocupados a ambos, sin contar que, a pesar de tener el apoyo económico de los padres de ambos, tenía que trabajar para permitirse algunas cosas. Han solía bajonearse fácilmente, y él no había estado al tanto esta vez.

-Perdón, bebito... -musitó mientras dejaba caricias en el rostro frente a por no darme cuenta de cómo te sentías. Estamos juntos en él- Perdón esto, tus preocupaciones también son las mías, y-ya resolveremos todo, pero no llores -sentía un nudito crecer en su garganta-. Y no me molestas, cielo, no pienses eso jamás, al contrario, amo complacerte en las cositas que pides.

-¿En serio no lo molesto, Minhonie?

-Nunca, mi amor.

El peliblanco abrazó fuertemente al mayor dejando salir todo rastro de malos pensamientos de su sistema.

-¿Me da mimitos y muchos besitos, hyung?

-Siempre que quieras, príncipe. -Dijo para luego tomarlo de la nuca y acercarlo hacia él, uniendo sus labios suavemente, chupando y lamiendo los labios contrarios con parsimonia, amando la manera en la que el de mejillitas abultadas le correspondía.

Porque vivir juntos tal vez no era sencillo, desde los desastres hasta los días donde todo parece acumularse de mala forma, pero mientras estuvieran juntitos demostrándose todo el amor que sentían por el otro, tarde o temprano todo se resolvería.

hyung!  |minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora