Como un cuento de hadas (SWANQUEEN)

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DISCLAMER: ¡Hola a todxs!! Vamos con un nuevo capítulo a ver si resolvemos las dudas que ha generado el grito del maldito de Hook. La única duda que no vamos a resolver es por qué este hombre no puede morirse instantáneamente de una vez y dejar de joder... ¡Pero aun así espero qué os guste!! :P

Por cierto, hay un nuevo One Shot que espero que os guste mucho: https://www.wattpad.com/1066791022-de-cisnes-y-reinas-malvadas-lo-que-m%C3%A1s-quieres

Yo no sé si se me quedó pendiente de publicar antes de dar a luz o si lo publiqué pero Wattpad lo ha convertido en borrador, o qué narices ha pasado... la cuestión es que estaba como borrador en oculto y antes de ayer vio la luz!! Así que si queréis leer algo más y darle mucho amor, ahí os lo dejo ^^

Ahora sí, me callo y vamos al meollo :P ¡Nos leemos!! ^^

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Cuando llegan, todo Storybrooke parece estar fuera de sus camas y amontonados alrededor de la puerta de los aposentos de Emma. Allí, Hook permanece tendido en el suelo, sosteniendo su mano contra su frente, que sangra profusamente.

"¿Qué ha pasado?" exclama Snow sobresaltada.

"He venido a ver a Emma, he oído ruidos y he abierto. Daba por hecho que sería ella." Sus ojos la buscan y desde ese momento dirige sus explicaciones directamente a Emma. "Pero al entrar he visto a ese hombre encapuchado rebuscando entre nuestras cosas. Antes de poder detenerle, me ha golpeado con su empuñadura y ha huido." Responde intentando levantarse y David se apresura a ayudarle, llevándole hacia la primera silla que encuentra.

Emma se coloca cerca y extiende su brazo para dar un par de palmaditas sobre el hombro de Hook, antes de recuperarlo y dejarlo reposar rígido contra su cuerpo. A unos metros de ella, Regina mira rápidamente a Henry y prácticamente lo atrapa en un abrazo protector.

"¿Un encapuchado?" repite Gruñón llegando hasta ellos.

"¿Y qué buscaba?" pregunta la abuelita cerrándose la bata de noche.

"No lo sé..." gruñe Hook acomodando su cabeza para que la sangre deje de caerle por la cara. "Ni siquiera estoy seguro de que haya cogido nada."

Al fondo del pasillo, varios guardias dirigidos por Arturo corren hacia ellos.

"¡Hemos oído los gritos! ¿Qué ha sucedido?" inquiere el rey preocupado.

"Han entrado en nuestros aposentos..." gime Hook, tocándose la frente. "Regina, ¿podrías...?" propone mirándose los dedos manchados de sangre. Esta no contesta, sólo se acerca hasta la silla y pasa su mano sobre la herida. A los dos segundos no queda rastro y Hook respira hondo, libre del dolor.

"¿Quién ha sido?" cuestiona Arturo mirando a todas partes.

"No lo sé. No he podido verle la cara. Me golpeó y salió corriendo."

"Ha huído por ahí." Aclara Snow señalando en la dirección correcta, aunque cueste ver entre la multitud de gente agolpada de repente en el corredor. "Pero no he visto hacia dónde se dirigía." Añade cogiendo entre sus brazos a Henry, que sale de los últimos de la habitación de Hood y Regina.

"Guardias, ya habéis oído. Seguidle. Quiero que encontréis cualquier rastro o pista que haya dejado." Exige al instante Arturo, disponiendo a todos sus hombres a la tarea. "Lamento lo ocurrido..." se disculpa en cuanto todos los hombres desaparecen pasillo abajo. "No sé cómo disculparme. Primero el ataque de Percival y ahora esto... Pero averiguaré que está sucediendo, os lo juro."

"¿Crees que está todo relacionado?" cuestiona David.

"Me cuesta imaginar que estén ocurriendo dos conjuras diferentes en el castillo y bajo mis propias narices. Sospecho que Percival contaba con algún cómplice y que ese era el hombre que asaltó vuestros aposentos."

"¿Y qué hacemos?" pregunta Snow observando al tumulto a su alrededor.

"Puedo encantar el pasillo." Propone Regina, captando la atención de los presentes. Emma da un par de pasos hacia su lado del pasillo, antes de detenerse y asumir que está vez no puede ser de gran ayuda con eso. "Si todos os refugiáis en vuestros dormitorios, hechizaré la galería para que, si alguien se atreve a pasar por ella esta noche, quede paralizado."

David es el primero en reaccionar. "Buena idea. Por favor, revisad todos vuestros aposentos. Si notáis algo raro, avisadnos. Si no, permanecer dentro hasta nuevo aviso, ¿entendido?"

Un murmullo general de aprobación y sueño inunda el pasillo, que poco a poco se va despejando con la misma prisa con la que se abarrotó.

"Eres todo un líder." Felicita Arturo, estrechando su hombro. "Ahora, si me disculpáis, me aseguraré de que nadie se acerque por este pasillo, mientras peinamos el resto del Castillo."

"Gracias por todo, Arturo."

Niega con la cabeza antes de responder. "Sois mis invitados y habéis venido a salvarnos, es lo mínimo que puedo hacer."

Cuando el monarca desaparece, en el pasillo sólo quedan Hook, aún sentado en su silla, Snow, David y Henry frente a la entrada de su cuarto, y Hood, Regina y Emma al otro lado. Impera un silencio total, más incómodo para unos que para otros, hasta que Snow abre la boca.

"Deberíamos retirarnos y dejar a Regina trabajar."

"Cierto..." corrobora Emma con la mirada perdida. "¿Henry, quieres quedarte conmigo esta noche?"

"Claro, mamá." Asiente encantado caminando hacia el cuarto y esquivando a Hook. Hood desaparece hacia su dormitorio, y la vista de Emma se pierde tras él, siendo incómodamente consciente de a dónde se dirige. Y dónde, por tanto, pasará la noche en cuanto la magia de Regina inunde el pasillo.

Antes de entrar, mira una última vez a Regina y musita: "¿Necesitas ayuda? Ayuda del tipo no-mágica, claro." No es lo que quiere decir, no es lo que necesita preguntar. Pero no puede hacer otra cosa.

Frente a ella, Regina respira hondo y clava los ojos en los de Emma, mordiéndose el labio. "Puedo hacerlo, no te preocupes."

"Vale... Buenas noches." Musita.

"Buenas noches." Responde automáticamente, rompiendo el contacto sólo al oír a Henry.

"Trata de descansar, mami."

"Lo haré. Felices sueños, cariño." Sonríe tiernamente, antes de levantar sus manos y comenzar con el canto el hechizo.

A escasos metros, Hook se levanta de la silla con intención de seguir a Emma y Henry, pero antes de recibir un portazo en la cara, la Salvadora masculla: "Gruñón estará encantado de acogerte."

Un "Pero, love..." resuena en el aire, mortecino, antes de que la puerta se cierre con él fuera. Y, mientras los pasos furiosos de Hook desaparecen por el corredor, Emma juraría que los cánticos de Regina se vigorizan y casi se regocijan.

Continuará...

DISCLAMER 2: ¿Qué creéis que quería el encapuchado? ¿O quién sería? ¡Os escucho! 😊😊 

Por cierto, ayer tuve algo de tiempo libre y pude preparar este y el siguiente capítulo. Así que si veo que hay quorum y muchas ganas, mañana cae nueva actualización, que la tengo lista en el horno para salir también, ¿qué os parece??