𝐇𝐄𝐋𝐋°| 𝑻𝑶𝑲𝒀𝑶 𝑹𝑬𝑽𝑬𝑵𝑮𝑬𝑹𝑺 "𝕆ℕ𝔼 𝕊ℍ𝕆𝕋"

𝐍𝐀𝐇𝐎𝐘𝐀 𝐊𝐀𝐖𝐀𝐓𝐀

𝑴𝑰𝑺𝑺𝑰𝑵𝑮 𝒀𝑶𝑼

+𝟏𝟖

Nahoya Kawata, el gemelo sonriente que en verdad era un demonio, un miembro importante en la Tokyo Manji Gang y ex cuarto capitán de la misma hace años.

Ese mismo Nahoya, que dejo atrás su pelo chino para hacerse un alaciado y que era alguien de carácter fuerte.

Nahoya había salido de viaje una semana, y si, eso significaba una semana lejos de él, de su aroma, voz, tacto, y de su característica sonrisa.

Era la primera vez que pasaba tanto tiempo fuera de casa, y a decir verdad lo extrañabas tanto sentimentalmente como carnalmente, porque vamos, Nahoya era muy bueno en la cama.

Se supone que era el ultima día de Nahoya fuera, y que volvería en la noche pero en todo el día no te mando mensaje alguno, estabas preocupada de no ser por la llamada de un teléfono desconocido que resultó ser el diciéndote que el avion se había atrasado y que su celular se había quedado sin batería.

Eran las 12 de la madrugada, estabas cansada pero no podías dormirte, lo extrañabas a él.

Sin pensarlo te dirigiste a su gran armario agarrando una camisa de botones color negra y sin duda muy cara, la oliste y un suspiro salió de ti al sentir su aroma impregnada en aquella camisa.

La pegaste más a tu nariz a la par que te dirigías hacia la gran cama que compartías con tu esposo, al oler su fragancia cara, recuerdos de la noche anterior antes de que Nahoya se fuera se colaron por tu mente.

Ambos estaban en el baño, Nahoya adentrando con rapidez sus dedos largos dentro ti mientras que su pulgar daba pequeños empujones a tu clítoris a la par que te susurraba lo bien que te veías temblando ante su toque.

Dejaste salir un jadeo por eso, te quitaste tu pijama para colocarte la gran camisa color negro sin ropa interior, cerraste solo algunos botones, dejando expuesto algo de tu pecho y feminidad.

Acercaste el cuello de la camisa a tu nariz para oler más de cerca la fragancia, tu mano libre se coló por tu feminidad algo húmeda para empezar a masajear esa área.

Entre más recuerdos de Nahoya venían a tu mente, tus dedos más rápido trabajaban.

- ¿Necesitas ayuda cariño? - te exaltaste al escuchar la voz del pelirosa en tu oreja.

Gracias al placer no sentiste cuando entro y se posiciono a un lado tuyo, su voz grave más su aliento a menta solo hizo que te diera un pequeño espasmo.

- Na...Nahoya~.

- Vengo de un viaje, y mi linda esposa me recibe así. - una mano de Nahoya se fue a tu feminidad, por sobre tu mano.