𝐇𝐄𝐋𝐋°| 𝑻𝑶𝑲𝒀𝑶 𝑹𝑬𝑽𝑬𝑵𝑮𝑬𝑹𝑺 "𝕆ℕ𝔼 𝕊ℍ𝕆𝕋"

𝐊𝐀𝐊𝐔𝐂𝐇𝐎 - 𝐈𝐙𝐀𝐍𝐀 - 𝐊𝐎𝐊𝐎𝐍𝐎𝐈 - 𝐑𝐀𝐍

𝑷𝑹𝑰𝒁𝑬

+𝟏𝟖

Te encontrabas ahora mismo parada en medio de Koko y Ran, mientras que ellos jugaban póker junto con Kakucho y Izana

Antes era una junta con los ejecutivos de Tenjiku y una mafia extranjera.

Cuando la junta acabo todos en Tenjiku y demás personas se fueron, Sanzu se quería quedar pero fue llamado por Rindou, te habían llevado para ser traductora para ellos y así poder entender a la mafia extranjera.

Al venir junto con Koko no te quedaba más opción que esperar a que este se retire del lugar.

Tu mirada se paseaba en las cartas de Ran, hasta los hombres sentados frente a ustedes, Kakucho tenía en su mano derecha un cigarrillo y lanzaba el humo a un lado cada que inhalaba de este, por otro lado Izana veian que movimiento hacer con las cartas mostrando gran desinterés al juego frente a él.

- ¿Que se llevara el ganador? - Kakucho puso una carta frente a él, sonrió de lado ante lo que dijo llevando su cigarrillo de vuelta a su boca.

- ¿Que quieren? - esta vez hablo Ran, poniendo también otra carta en el centro de la mesa.

- A ella.

- Trato. - ni siquiera te dejaron hablar, pues Koko ya te había puesto como premio.

Bueno..... Tan mal no sonaba.

Digo no.

- Maldita sea Koko, no soy algún objeto que puedas apostar así como así. - te cruzaste de brazos, te llevabas bien con los ejecutivos de Tenjiku, así que las bromas eran comunes entre ustedes.

- No te preocupes niñita, te trataremos bien. - Izana, al igual que los demás había puesto una carta al centro.

¡NIÑITA! Joder que se saque la ropa y me escupa. DIGO NO

Bueno sí.

- Tengo 24. -Hiciste un leve puchero escuchando la leve risa de Ran.

- Lamentablemente no podemos darles a nuestra _______, pero podemos compartirla.

Kakucho apago el cigarrillo y lo boto en el cenicero para soplar el humo por última vez, frunciste levemente tu ceño, bueno igual no sonaba tan mal es solo que no querías quedar como gata en celo frente a esos hombres.

- ¿Trato? - Koko se recargo en la silla donde estaba sentado, dándote una leve mirada para enseñar su lengua como siempre hacia.

- Por mi está bien. - Ran dejo salir una leve risita.

Así se la pasaron jugando, eran exactamente las 12 de la madrugada, en aquella habitación lujosa los únicos olores predominantes eran el cigarrillo y la colonia de aquellos hombres.