–¿Qué hacen los 5 aquí? –Fue lo primero que preguntó Seungcheol cuando entró a su oficina.
Había estado haciendo una llamada debido a las competencias de invierno que harían cuando su secretaria, Siyeon, le había informado que el entrenador Jihoon tenía que verlo de inmediato.
Se llevó una enorme sorpresa al ver a su hijo, junto con otros chicos a su lado, 3 más grandes, uno menor. Los cinco estaban sentados en su oficina, justo frente a su escritorio, todos en silencio completo y tenso. Con Siyeon y Jihoon parados detrás de ellos.
–Director Choi... –comenzó uno de los chicos mayores, pero se detuvo en cuanto Seungcheol levantó una de sus manos pidiendo silencio.
–Entrenador Lee, ¿qué sucedió?
Todos voltearon a ver al mencionado, esperando a que hablara.
–Tres estudiantes de 5° vinieron durante la cena a preguntarme por Chan, pero cuando les dije que se había quedado en la pista después de mí, ellos me avisaron que aún no había llegado. Parecían demasiado preocupados, por lo que los cuatro fuimos a buscarlo, y lo encontramos con Joshua, Seokmin, Soonyoung y Vernon.
–¿Y qué estaba haciendo? –Volvió a preguntar.
Jihoon pareció pensarlo por unos segundos.
–No escuchamos nada de lo que decían –comenzó–, pero parecían estar discutiendo.
Seungcheol suspiró y miró a su hijo, para después dirigir su mirada hacia los demás. Chan estaba sentado a su derecha, los demás a la izquierda.
Sabía que si sólo preguntaba lo que había sucedido los cinco comenzarían a hablar al mismo tiempo, creando un desastre. Por eso decidió comenzar por Chan, el que sabía que era el más tranquilo de todos.
–Chan, ¿podrías decirme qué pasó?
El chico tardó unos segundos en responder.
Jamás había estado en la oficina del director por ese tipo de asuntos. Nunca se había peleado, ni lo habían castigado, ni siquiera le habían llamado la atención.
En las únicas ocasiones en las que había estado allí, el director le había informado que sería parte del show de bienvenida, o le había deseado suerte para las competencias de invierno.
Sin embargo, allí estaba ahora.
Sabía que no se iba a meter en problemas, ni él ni Vernon, porque ellos no habían peleado en lo absoluto, no habían ni atacado a nadie. Y aún así, sabía quiénes sí debían meterse en problemas después de tantas ocasiones en las que lo habían molestado.
Finalmente levantó la mirada y comenzó a contarle a Seungcheol todo.
No sólo lo que había sucedido aquella noche, sino desde hacía un año, un relato que hizo que Seungcheol, Jihoon, Siyeon y Vernon lo observaran con sorpresa todo el tiempo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
