Capítulo 12

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Cuando salí de donde Inui y Kokonoi estaban, yo tenía que oxigenar mis pulmones, como si hubiera retenido mucho tiempo el aire que respiraba, como si lo hubiera olvidado, no podía creer que me hubiese puesto tan nerviosa al estar al lado de esos dos y al parecer el pelinegro de hace unos minutos, era mi pareja en el futuro. De alguna forma se me hizo bastante curioso el cómo se dio la relación o si solo había sido una orden de Mikey, pero era bastante interesante si yo no sentía nada hacía su persona. Mi teléfono me sacó de mis pensamientos, enfoqué mi vista y había más de 15 mensajes de Draken.

—Mierda—susurré devolviendo la llamada—¿Draken?— pregunté.

—Enana, ¿Estás bien? Te escuchas agitada.

—Ah sí, es que estoy caminando, dime, ¿Qué necesitas?— hubo una pausa en su contestación.

—Chifuyu y Takemicchi te están esperando en Danny's—alcé una ceja porque no entendía que sucedía—Pensé que estabas con ellos—solté un suspiro. No supe que tanto tiempo estuve ahí, en mis pensamientos y con los Black Dragons.

—Ah sí, pero tuve que arreglar algunos asuntos, ya llegó—colgué para empezar a correr, odiaba no tener la motocicleta porque era una floja que no podía correr unas cuantas cuadras o dependiendo de mi humor, podía correr hasta el aeropuerto, después de todo debía mantenerme en forma para poder luchar—Ya llegué—anuncié acercándome a la mesa y todos tenían de confusión o tal vez de enojo, excepto Hanma, él siempre tenía una sonrisa burlona—¿Qué pasa?— dije sentándome y tomando el postre que Draken tenía al lado comenzando a comerlo.

—Takemicchi y Chifuyu quieren pelear contra los Black Dragons—le dirigí una mirada a Chifuyu lo suficientemente enojada.

—Oh ya entiendo, no—dije levantándome de donde estaba—No lo hago por mí, lo hago por Mitsuya, él hizo el trato, creo que solo él tiene derecho de romperlo o no—contesté dándoles la espalda, me sentía mal porque sí que quería luchar contra la Pandilla que alguna vez le perteneció a Shinichiro, pero ellos no tenían que saberlo, al menos no enfrente de los demás Capitanes—Así que si era para eso, me retiro, tengo asuntos mucho más importantes que los Black Dragons—mentirosa—contestó mi cabeza, pero la ignoré.

Esperé a que todos salieran asegurándome de que ninguno me viera, como siempre cargaba una pequeña mochila con cambios de ropa lo suficientemente sofisticados, que no eran mi estilo para poder cambiarme y espiar, generalmente eran mucho más holgadas que mi ropa para poder ponérmelos encima del uniforme de ToMan y sí pienso que es muy cliché, pero no se me ocurrió otra idea mas que esa para poder ir de un lado a otro sin que supieran que fuera yo. Ah y esto lo hice porque Kisaki regresó minutos después de que solo quedaran Takemichi y Chifuyu. Entré después de Hanma y Kisaki sentándome en una mesa cercana, viendo el menú que ya me sabía de memoria y cuando la mesera se acercó, pedí la malteada de siempre.

—Oh tu chica sí que se veía enojada—no podía verlos porque estaba de espalda a ellos, así que puse a trabajar a mis oídos para poder distinguir las voces de los chicos.

—¿Qué tratas de decir?— Chifuyu se escuchaba lo suficientemente enojado o irritado. Por mi parte, me cambié de lugar para verlos de frente—Tú lo escuchaste, ella dijo que lo hacía por Mitsuya—contraatacó.

—¿Enserio? ¿Cómo estás tan seguro de que no lo hizo para proteger a los Black Dragons? Porque según recuerdo ella quería mucho a esa Pandilla—iba a levantarme, pero no lo hice, tuve que contenerme—Además mientras la tregua este activa ni ella, ni ningún líder podrá interferir, eres ingenuo, Matsuno. Mikey está débil viendo como los Black Gragons están ganando poder, quiero aplastarlos aquí y ahora—reí burlonamente sin ser escuchada. Mi novio le apuntó al cuello con un vidrio cortado haciendo que los clientes se sobresaltaran.

Todo termina igual//Chifuyu y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora