Capitulo 26 Revelion. El. (DEVE)

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HALLIE

—Alguien va a decirme qué pasa? —Mi padre pregunta después de varios segundos donde todos seguimos sin hablar parados justo en el mismo lugar que nos encontró.

—Diles que se larguen. —Hunter gruñe como niño pequeño señalando a Jeans y a Jackmar, ese último le miró ofendido
«¿El que culpa tiene? Pobre de Jackmar.»

—Papa, puedo explicarlo... —Comienzo a decir pero mi hermano me interrumpe colocándose enfrente de mi

—Hallie está saliendo con este. —Acusa cruzándose de brazos, esperando a que mi padre enloquezca, me volteo para ver a Jeans que oprime los labios mientras espera lo mismo. Mi padre suelta un suspiro cruzándose de brazos,

—Por eso el golpe? —Pregunta mi padre mirando de reojo a Jeans que sigue observándome dudoso, de seguro espera a que le grite "Corre" mientras detengo a mi padre para que no lo golpe más

—¿Que? ¿No te molesta? —Hunter pregunta decepcionado, me hace pensar que le importa más que me regañen que su coraje

—Me moleste o no, es asunto a parte, ya lo he hablando con tu hermana. —Explica mirándome, asentí dos veces, Jeans abre sus ojos de par en par, sonrío.

Mi padre no enloqueció porque afortunadamente yo decidí hablar con mis padres esta misma mañana, tenía que decírselos antes de hacer pública mi relación con Jeans y no meterme en más problemas, era mejor así. Mi mamá sabía de mi enamoramiento con Jeans Lincer desde que lo descubrí, suelo contarle la mayoría de las cosas que me pasan así que ella no se sorprendió tanto, solo me hizo saber que hubiera querido que le dijera desde antes que ya era novia de él, y mi padre se molestó un poco cuando lo pronuncie en voz alta, pero después me sorprendió con sus palabras que recuerdo bien.

Está bien. —Dijo tomando asiento frente a mi, yo estaba muerta de nervios retorciendo mis dedos bajo la mesa, alce la vista de inmediato y arquee las cejas

—Que dices? —Pregunté incrédula

—Si, mi amor. —Alargó la mano para que le diera la mía. —Sabes que ese chico no es de muy mi agrado, y que su familia tiene fama malísima...

—Pa... —Alzó su mano libre

—No, espérame. —Mi mamá se acercó y colocó ambas manos sobre mis hombros

—Bueno.

—Decía que, estoy de acuerdo con que salgas con el, porque es tu decisión y lo respeto. Que resulte cómo quieres o no, ya es cosa del destino, o de otras cosas, pero quiero que sepas que estaré aquí para apoyarte siempre y que estoy muy orgulloso de que lo hayas hablado directamente con nosotros y que no lo siguieras haciendo a nuestras espaldas, eso habla de lo madura que estás siendo y me siento muy contento por ello. —Mis ojos estaban ya llenos de lagrimas que no pude contener y de pronto las sentí bajar por mis mejillas, sonrió haciendo una señal para que fuera abrazarlo, lo hice no antes de darle un sonoro beso en la mejilla a mi mamá, después lo abracé con fuerza.

Había sido muy buena decisión contárselos.

Hunter fue el que enloqueció en realidad, dio un golpe en el suelo con su zapato y chilló

—Pero papa, ¡él es un idiota! —Rodé los ojos y Jeans suspiro, Jackmar pasó el peso de su cuerpo a la otra pierna mientras seguía contemplando nuestro espectáculo

—Que te ha pasado en el brazo? —Mi padre pregunta de repente al ver que inconscientemente me lo estaba agarrando, baje mi vista a mis dedos que medio cubrían las marcas moradas que ya estaban muy visibles

_El de converse blancos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora