_El de converse blancos

Capitulo 6 Hablando. Fiesta

HALLIE
"Viernes"
Le subí al volumen de mi móvil para que la música cubriera el ruido del alrededor, pues quería estar aquí a fuera, en los jardines del colegio, pero no contaba con el ruidoso escándalo que todos tendrían aquí afuera, la mayoría estaba aquí ya que no todos tenían sus clases completas, un perfecto viernes, iniciando el fin de semana con el mejor pie,  ¿verdad que si?
Me recargue en la banca y cerré mis ojos unos segundos mientras trataba de relajarme un poco, la semana había sido pesada, lo de las carreras fue un fracaso, excepto por lo de Jeans, junto con la cita—no cita—días antes, pero con mi amigo gruñón—dolorcito de cabeza—así como lo he nombrado desde, pues hoy, creo, no avanzaba nada, es que ni como, porque él no coopera ni un gramo, comienzo a desesperarme, pero no me rendiré tan fácilmente, obvio no.

Sentí una patada suave en el costado de mi pierna «¿pero qué rayos?» me quite un audífono.
-Niña.-«Lo he invocado» alce la vista encontrándome con el gruñon—d.d.c.
-Gruñón.-Salude con mucho ánimo exagerado, al parecer, porque mi compañero rodó los ojos, fastidiado.
-Que mierda hacías en las carreras, ni–ña?-Me pregunta aún de pie frente a mi
-Pues a ver, las carreras.-Hice comillas con mis manos, soltó un resoplido y de un movimiento me tomo del brazo
-Ven acá.-Me arrastró detrás de él, a este que le ocurre, ¿o qué onda?
-Oye, a donde me llevas?!
-No hables.-Dijo, le mire ofendida pero me ignoro olímpicamente, que gruñón, me soltó del brazo cuando llegamos al interior del colegio, me señaló la oficina donde comúnmente podrías ir por si tenías algún problema o una queja que quisieras hablar con el psicólogo, pero nadie venía, y el psicólogo salía siempre a intentar hablar con cinqueño era que se le pusiera en frente, y la oficina siempre estaba abierta, así que Deve entro pero no avanzo de la puerta, se giró hacia a mi y hizo un ademán para que entrara, inspeccione mis alrededores, no había nadie, si me asesinaba no se darían cuenta, Deve no sería capas, creo que sabe que soy más peligrosa yo que él, así que con duda entre, en seguida cerró la puerta, me senté en el sofá «que cómodo está, ¿porqué no vine antes?» se sentó a mi lado y se peinó el cabello con la mano, su espectacular cabello gris, raro.

-Quieres explicarme porque hemos venido aquí, Deve?-Pregunte después de segundos sin ruido
-Hablaremos.-Respondió extendiendo las piernas, le mire con las cejas alzadas
-De que o que?-Sonrío sin en verdad hacerlo
-Hallie, estas comenzando a preocuparme.-Frunciéndole el ceño me gire a verlo. -No se, pero a pesar que quiero intento que no me agrades, lo haces, joder. -Dice meneando la cabeza
-Me alegro o me ofendo?-Pregunte riéndome un poco, suelta una risita
-Ya lo ves.-Exclama de pronto
-Que cosa?
-Eso, eres genial, de verdad.-Sonrío, pero él está serio, me está confundiendo de verdad -No soy bueno, la he regado muchas veces, no le importo a nadie y eso supongo que lo merezco.-Dice viendo hacia el suelo
-No digas eso, a tus padres debes de importarle, a tus amigos...-Niega
-No son mis amigos.-Murmura encogiéndose de hombros, se que está abriéndose conmigo, y eso es mucho, así que me acerco un poco más a él
-Un año antes de entrar aquí, mis padres me mandaron lejos, yo era un jodido desastre, peor que ahora, vicios, peleas, salidas, problemas... Así que dijeron "Cambia o te irás" creí que solo me lo decían para asustarme, pero si lo cumplieron, un mes después, me mandaron lejos, no duré ni dos semanas lejos de todo.-Habla entre murmullos.
-Era un pedo, y no podía solo, así que le prometí y juré a mi padre que arreglaría todo, que de verdad mejoraría, y así fue por los meses siguientes.-Voltea hacia a mi y me mira fijo. -Te juro que lo intente, niña, quería cambiar, ser mejor, comencé a alejarme de esas amistades que no eran amigos de verdad, lo hice, traté de enfocarme, cambie de actitud y todo ese rollo, pero lo jodi, de nuevo.-Dijo, sus ojos estaban enrojecidos y yo tenía un nudo en la garganta, pero aún así le tomé de la mano y murmuré
-Que ocurrió?-El se encogió de hombros
-No logre nada, lo empeore, mi padre se alejó de nosotros arto de mi basura, mi hermano mayor se largo, mi hermana se refugió en uno de mis supuestos "amigos" que sólo la engañó y la dejó embarazada.-Se río con sarcasmo, apreté su mano -Mi madre y mi hermana menor, ellas si que han tratado de estar conmigo siempre, a pesar de todo, y yo solo lo arruine, sigo metido en las mismas cosas, pero no soy tan inconsciente como antes...-El sonido de la puerta nos hace sobresaltar
-Que hacen aquí?-El psicólogo nos pregunta con las cejas arqueadas
-Nada, bueno, es que ella se sentía mal y la mandaron acá.-Deve dijo poniéndose de pie, lo imité
-Pero con la pastilla he mejorado, y creo que ya es hora de irnos.-Hable rápido y sonreí jalando del brazo a Deve para salir de ahí de inmediato, el psicólogo solo grito a nuestras espaldas en casi un ruego que nos quedáramos a hablar que quizás lo necesitábamos pero solo corrimos lejos de ahí, Deve se rio de mi cuando no pude seguir corriendo después de un pasillo entero corriendo, me faltaba condición.
-Hallie, yo...
-Bro.-Cárter lo interrumpió apareciendo de pronto, maldito Cárter, el gruñón se disculpó con la mirada y se giró hacia su amigo
-Pasa algo?
-Necesito que me acompañes, en algo, pero tiene que ser ya.-Explica caminando de espaldas, Deve gira a verme y muevo una mano en el aire
-Anda, después habíamos sobre eso, vale?.-Asiente y se pasa una mano por el  cabello, gesto nervios, supongo
-Cuídate, Hallie. -Deja un beso en mi mejilla y rápido desaparece junto con Cárter que sonríe raro, suelto un suspiro largo para después irme a buscar mis cosas, solo tendría una clase más y seria hora de irme, a rogar por el permiso para la fiesta, solo esperaba que mis padre me dejara, al cabo era a unas cuadras de la casa, y regresaría temprano, obvio.
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