COCODRILO [Kaisoo]

Epílogo

Kyungsoo flotaba felizmente en el agua caliente.

Amaba su piscina. Como regalo de apareamiento, no había nada mejor que eso. Él perezosamente movió la cola de ida y vuelta, disfrutando del agua sedosa en su piel.

Le gustaba la casa que compartía con Jongin. Se había mudado cuando los halcones empezaron a vivir en la mansión Queen Anne.

Resultó que no tenían ningún lugar para dormir. Su antiguo propietario había vendido sus apartamentos la última vez que se habían marchado y todas sus pertenencias estaban en cajas.

Baekhyun se compadeció de ellos, pero dijo que Luhan tendría la última palabra.

Sin embargo, habían ganado su sustento. Los cocodrilos de agua salada no pudieron superar la gran cantidad de explosivos que los halcones transportaron a la nave de carga.

Fue suficiente para destruir sus bases, matar la mayoría de cocodrilos, pero no hundir el barco. Kyungsoo no quería ser responsable de un derrame de petróleo si el barco se hundía, ya que no sabía qué otra cosa los cocodrilos habrían querido traer a tierra.

Lamentablemente, después de cinco días, Chanyeol todavía no se había recuperado. Baekhyun se sentaba a su lado todos los días, esperando que saliera de su coma auto inducido, pero todavía nada.

- Sal, sal, pequeño cocodrilo - La voz de Jongin llegó a Kyungsoo en el agua. Él nadó perezosamente hacia su amante.

- Cambia. Quiero hablar con el hombre, no con el monstruo del pantano - Jongin le regañó. Kyungsoo cambió.

- No soy el monstruo del pantano - Protestó.

- De todos modos, no es una muy buena idea. Creo que los peces de colores se burlarían de ti - Jongin bromeó.

- No hay ningún pez - Dio un rápido vistazo para verificar. A Jongin le gustaba salir con sorpresas.

Dejó que le pusiera el anillo de platino en el dedo. No estaban casados, pero Jongin le dijo que así se aseguraba que los humanos supieran que Kyungsoo estaba tomado.

- No - Dijo Jongin, la satisfacción resudando de él.

- Ahora que me tienes bien reclamado, ¿qué quieres? - Preguntó Kyungsoo.

- Esto - Jongin envolvió a Kyungsoo en sus brazos y lo besó como si no hubieran hecho el amor en la última hora.

Kyungsoo voluntariamente se entregó a su compañero. En el fondo de su mente todavía existía la preocupación de que los porosos no se rendirían tan fácilmente y eso le devoraba por dentro.

Tenía que tener cuidado y mantener los ojos abiertos. Sobre todo ahora que tenía un compañero. Por el lado positivo, si tenía que nadar en cualquier lugar que no fuera en su piscina, Jongin le había prometido acompañarlo.

Lleno a rebosar de amor, Kyungsoo dejó que Jongin lo llevara fuera de la zona de baño.

La cama le estaba llamando y era el momento para recordarle a Jongin lo que significaba tener la suerte de atrapar a un cocodrilo.

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Hasta aqui el Kaisoo, nos leemos en el Chanbaek 😉😘