Argumento:
Itachi Uchiha un magnate de nacionalidad japonesa pero por sus venas también corre sangre griega.
Quiere comprar una propiedad... llamada Uzushiogakure, en la cual su madre vivió parte de su vida ahí. Más al ver a ese hermoso rubio cambi...
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Deidara se dejó envolver en esos ojos que lo atraparon en un hechizo misterioso. Las palabras que el Uchiha le dijo solo eran eso palabras pero en una cosa si estaba seguro en poder salvar ese matrimonio.
Verle entre sus brazos Itachi vio esos ojos en los cuales sintió que era salvado de una oscuridad que lo tenía prisionero era como volver a ver la luz a través de sus ojos.
El Uzumaki se sentía atrevido sus miradas entrelazadas, expectantes de cómo deberían actuar pero la decisión la tomó el rubio. Le tomo de las solapas de la americana para dar paso a un beso.
Al unir sus labios sintió una fuerte descarga en todo su cuerpo el epicentro fue entre su entrepierna, los labios del Uzumaki eran pura dinamita pura que estallaron todos sus sentidos.
Itachi adoraba besar esos cálidos labios que lo anhelaban los deseaban estaba a su disposición como él también lo estaba. El cuerpo del Uzumaki vibro entre sus brazos al sentir el cuerpo contrario.
El azabache agacho su cabeza para poder atrapar con sus labios uno de los pezones mordisquearlo poder excitar a su pareja a su amante a su esposo. Deidara dejó escapar un gemido su cuerpo estaba en un estado de ebullición.
Las manitas del Blondo temblaban para poder desabrochar la camisa torpemente pero el Uchiha tomo las delicadas manos se las llevó a sus labios las beso con una sonrisa marca Uchiha le miro.
- Déjame a mí darte el placer que necesitas. – La voz ronca excitada del azabache se dejó oír, el vibrato del sonido de la voz se escabullo como una caricia en los oídos del rubio.
- ¡Estás seguro de ti mismo Uchiha! – La voz sensual del rubio se dejó escuchar los sentidos del azabache se intensificaron.
- Lo estoy yeneka mu... lo estoy.
Itachi volvía a mordisquear los pezones del rubio a juguetear con ellos se levantó para tomarlos entre sus dedos mientras que Deidara se removió dejando salir jadeos de puro placer.
- Eso es Moraki mou. (Bebé) Deja te doy el placer que necesitas.
El sonido del móvil se dejó escuchar la mirada del Uzumaki se fijaron en los del Uchiha pero las manos del rubio lo tomaron de las solapas de la americana.
- No contestes.
El uchiha vio en la pantalla...
"Kisame"
- Quiero que este matrimonio funcione bien, dame mi lugar cuando estés en casa que yo lo haré cuando estés en la oficina, solo llamare cuando sea una emergencia. ¿Lo harás?
Itachi le miro con ferocidad había encendido sus sentidos al mil, Deidara le quito el móvil y lo dejo en la mesita le quito la americana una sonrisa traviesa apareció en los labios del rubio.
