Cᴬᖇᖇᵁsᴱᴸ

Rough Day

- Papi, quiero un hermanito.

Fue el comentario que hizo que a Jongho casi se le fuera el café por la nariz.

- ¿Quieres que, princesa? - pregunto, aclarandose la garganta y volteando a ver a su pequeña bebé.

- ¡Un hemanito, papi! - volvió a decir, emocionada - Cómo Junnie o Nabi, un hemanito para jugar - extendió su boquita en un puchero.

- Uh - compartió una mirada con su novio antes de volver a la niña - ¿No prefieres un perrito, muñeca? Puedes escoger el que tú quieras y nombrarlo como te guste - trato de negociar, acomodando el cabello de su hija.

- ¡No, papito! - frunció el ceño y cruzó sus cortos brazos, moviendo su cabecita lejos del toque de su padre - ¡Quiero un hemanito! ¡Quiero ser hedmana mayor!

- Pero ya eres la hermana mayor de tus primos, amor - intervino Yeosang, con tono de voz calmado - Eres la noona de Yeonjun y los gemelos y la unnie de Nabira - le recordó.

- ¡Pero ellos se van! ¡Yo quiero un hedmanito que se quede conmigo! - salto en su mismo lugar, su ceño nunca dejando de estar fruncido.

- Misuk, un bebé no es un juguete, es mucho trabajo - volvió a hablar Jongho, levantándose de su asiento y arrodilladose frente a su hija - Tu estas muy pequeña aún, tal vez en unos años, tu mami y yo lo pensaremos y...

- ¡Quiero un hermanito ahora no cuando este vieja! - refunfuño la niña, sus grandes ojos café delineados de rojo y con lágrimas que amenazaban a caer en cualquier momento.

- Choi Misuk, deja de gritar - habló un poco más serio - Papá y mamá ya dijeron que no, estas portandote muy mal.

- ¡Papi no me quiere! ¡Papi malo! - explotó en llanto, poniéndose de pie y corriendo fuera del comedor.

Dejando a Jongho y Yeosang quietos en sus lugares.

Misuk nunca se comportaba así, ella no respondía, ella no tenía rabietas y nunca llamaba a Jongho malo, al menos no de manera seria.

Mierda lo peor que había hecho había sido perder un color en el kinder y había llorado todo el día hasta que la maestra la ayudó a encontrarlo.

- No tengo idea de cómo manejar eso - dijo Jongho después de un rato de silencio entre él y su novio.

- Yo aún menos - dijo Yeosang pasándose las manos por la cara - Pero sé quien sí - sacó su celular, empezando a escribir algo y llevándoselo a la oreja - Wooyoung necesitamos tu ayuda.

°°°

- Park Nabira, deja eso en su lugar antes de que te lastimes - habló Seonghwa sin levantar la mirada de la computadora donde hacía su informe de gestión comercial.

- Papi, to' aburrida - se quejó la niña, dejándose caer en el sofá, estirandose y suspirando dramáticamente - Ahh.

- Papi esta terminando su tarea, bebé - su mirada se separó de su trabajo, posandose apenada en su pequeña niña - Papi termina acá y haremos lo que quieras, ¿si?

- ¿Monitos? - preguntó emocionada, levantándose de golpe de su sitio - Monitos, papi, monitos, por favor.

- Sí, mi vida, podemos jugar a los monitos - le sonrió cálido a su pequeño torbellino, que chillo emocionada, poniéndose de pie y corriendo torpemente a su habitación en busca de su traje de monito.

Hongjoong estaba trabajando doble turno hoy y él tuvo una cancelación de clases así que decidió que aprovecharía para terminar unos trabajos por adelantado, claro que no contaba que su pequeño torbellino necesitaba atención las 24 horas del día.