Capítulo 11

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Al día siguiente se repitió la tónica de aquellos días, puesto que el hijo de puta del teléfono sonó casi a primera hora de la mañana. El número era desconocido y estuve a punto de arrojar el aparato por la ventana edificio abajo al medio de la calle cuando creí que era mejor dejarlo para cuando llegara el momento indicado.

— Hola Bruck. ¿Eres Bruck, cierto?

Que linda forma de partir el día, pensé. 

— ¿Que tal, Evka?  

— Un poco preocupada porque anoche me llamaste muy tarde. Resulta que también me llamó tu novia anoche. Dijo que si volvía a asomarme por allá me iba a partir la cara. ¿Por qué tenían que ser las cosas así, Bruck? ¿No te das cuenta de que lo perdí todo por tú culpa y yo sin saber que tenías mujer? Carok ya me lo había advertido. 

— ¿Y qué es lo que te había advertido?

— Que eras un hombre solitario y que nadie te quería. Ahora entiendo el por qué. 

Maldita rata almizclera, pensé. 

— Todo por culpa de tu verga, Bruck. Me dejaste loca con tu cosa, oye. No puedo dejar de pensar en ella.

Me puse de pie y fui por una píldora roja. Ya estaba harto de mis inestabilidades y necesitaba un buen poco de equilibrio y energías bien utilizadas para poder organizarme. Decidí tragarla con vodka y jugo de naranja. Luego regresé a la cama.

— ¿Estas ahí? —Me preguntó ella.  

— Sí, si —Respondí. 

— Resulta que te llamaba porque necesito pedirte un favor. No sé si accederías, pero al menos no pierdo nada con preguntartelo.  

— Pues dímelo, por favor.

Había decidido que iba a reaccionar según lo que se me ocurriera en el momento y las píldoras rojas solían darme bastante buena suerte. 

— Mejor que no, Bruck. 

— ¿Por qué? 

— Tu novia. Creo que ya lo sabes. Por un lado no me interesa que tengas novia. Por otro lado me siento ridícula intentando competir con ella. No sé si se entiende.

Creí que era una excelente idea usar una mentira, tanto contra ella como contra mi mismo.

— Anoche rompimos —Dije—. Prácticamente rompí con ella. 

— ¿Rompieron? ¿Y por qué rompieron? 

— Porque le dije que me gustaba otra chica. Ahora… ¿Podrías decirme cuál es el favor que quieres que te haga? 

— ¿Estás dispuesto a hacerme el favor que sea? 

— ¡A lo que sea! Hoy día amanecí con muchas energías. 

No sé por qué me imaginé que Evka sonreia en ese momento. Yo por mi tenía el instinto de que si me dejaba provocar iba a conseguir algo bueno.

— Pues resulta que tengo un maldito bloqueo con esa novela erótica que tengo que entregar a fin de mes… 

— ¿Y qué tengo que ver yo con eso? ¿Se te ocurre que la lea? 

— Nada de eso, Bruck, nada de eso. Ocurre que para salir del bloqueo se me ocurrió hacer la portada de la obra y me preguntaba si tú… ¿Te gustaría servirme como modelo para la tapa de mi obra?

Mi cerebro sonreía y mis ambiciones celebraban. Era una linda manera de dejar de hacer las cosas que estaba haciendo con el fin de concentrarme y pensar en otro trabajo para el futuro.

— Me encantaría ayudarte —Dije— ¿Como tendría que hacerlo? ¿Quieres que me saque unas fotos acá? 

— Nada de eso, Bruck, nada de eso. Me gustaría que te pasaras por acá lo antes posible porque a estas horas ya hay una muy buena luz en esta parte de la casa. Ojalá pudieses llegar para alcanzar a hacerlo antes de las dos de la tarde.

Miré la hora. Eran las 9.

— ¿Por qué tiene que ser antes de las dos de la tarde? Eso de la luz no suena muy convincente.  

— Por qué a esa hora invité a almorzar a mi amiga hoy. No me gustaría que la linda gobernadora de la ciudad te viese en paños menores mientras te saco fotos.

Tal vez estaba ante la gran chance que iba a tener en mi vida respecto a esa meta final que tanto ambicionaba.

— ¿Quieres que vaya hoy? —Pregunté, sin creer lo que estaba ocurriendo. 

— ¡Por supuesto que quiero que vengas hoy! ¿O estás muy ocupado? 

— Para nada —Respondí sonriendo.

Descubrí con sorpresa que el llamado ese me estaba poniendo altamente cachondo. Decidí que era hora de moverme rápido y bueno, solo deseaba que ocurriese lo que tenía que ocurrir, ojalá lo más pronto posible.

— Te mando mi dirección por mensaje —Dijo ella. 

— Pues vale. 

— Te va a encantar mi trabajo. ¡Te lo juro! 
Muchas gracias Bruck. 

— A ti te doy las gracias. Haré mi mejor esfuerzo. 

— ¿En cuanto crees que puedas llegar? 

— Yo creo que pronto. Oye. 

— Dime.

Pensé que iba a ser una pésima estrategia decir lo que quería decir.

— Olvídalo —Respondí—. Llego pronto. 
— Te espero entonces.

Evka colgó y el maldito teléfono sonó casi de inmediato otra vez.

Era Clavka y no, no me dieron ganas de arrojar el teléfono por la ventana calle abajo en ese momento, ya que las buenas noticias solían ponerme de buen humor.

— ¿Sí? 

— ¿Como amaneciste, miserable gigoló? 

— Muy bien. Muchas gracias por tus palabras de aliento. ¿Que es lo que necesita, señorita? 

— ¿Recuerdas que te dije que te quería a las 8 en el bar clandestino sanitario? 

— Por supuesto que sí lo recuerdo. 

— Muy bien. Mi amiga Doniv está de cumpleaños y se supone que voy a ir a beber unas copas al bar con ella. ¿Me estás escuchando, gigoló miserable? 

— Si escucho. 

— Muy bien. Resulta que iba a ir a beber unas copas con ella pero yo no podré ir. Y resulta que, pensando y pensando, se me ocurrió que podrías reemplazarme.

Algo no me cuadraba y no, era mejor no indagar en nada, puesto que ya conocía a Doniv y debía intentar que no fuese tan terrible aquel trámite. Mi reputación estaba en juego y sí, debía transformarme en ese pobre y triste maldito perro que recibía órdenes.

— ¿Como eso de reemplazarme? 

— Reemplazarme pues. Doniv va a estar allí solita sentada en una mesa y tu vas a llegar y la vas a acompañar. Después de dos mojitos ella se va a poner muy pero muy cachonda y te la vas a ir a follar. Quiero que le des una noche inolvidable ¿Estamos? No quiero que me hagas preguntas ni nada de eso ¿Que te parece? 

— Supongo que está bien.

Clavka colgó. Era divertido andar de buen ánimo otra vez, aunque aún no cumpliese mi meta.

Estaba cada vez más cerca.

Me metí a la ducha y luego me eché a la boca otra píldora roja. Iba a ser una jornada más que larga y exigente en términos de laburo.


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