Miró por encima su celular, eran las 18:01. Había estado prácticamente la mayoría de la tarde trabajando en los planos del proyecto que debía presentar mañana. Sentía todo su cuerpo entumecido, decidió estirar los brazos por encima de su cabeza mientras movía suavemente su cuello de un costado a otro, su cuello crujía con el movimiento y sus músculos liberaban un poco la tensión.Sintió un poco de alivio con tal acción.
– Aquí tienes jefe. Un café doble- Decía una señora con gafas mientras colocaba el vaso de Starbucks en su escritorio- Me tomé la molestia de traerte también un croissant ya que imagino que no has probado bocado en horas – Agrega en tono maternal.
-Gracias Penny, Eres mi salvación. - Respondió con una sonrisa mientras tomaba el vaso de café y quitaba la tapa. El aroma a café recién echo se coló por sus fosas nasales y miró el croissant de chocolate que pensaba devorar en un segundo. – No me di cuenta de que estuve tanto tiempo con estos planos, pero necesitaba revisarlos antes de irme. La presentación es mañana y es muy importante.
Penny lo observó a través de sus gafas de armazón grueso y suspiró. Lo conocía prácticamente desde que era un niño y sabía lo workaholic que podía ser. Trabajaban juntos desde hace 10 años y lo había visto crecer y convertirse en el reconocido arquitecto que era hoy. – Deberías de descansar Ben. Entre la pequeña Emma y este proyecto apenas debes de estar durmiendo. - Le dijo.
-Lo haré. Aprovecharé que hoy se queda con Leia y me iré de aquí directo a la cama. Ya no tengo 20 años y me siento realmente cansado- Dijo riéndose mientras comenzaba a guardar sus pertenencias en el morral negro que siempre llevaba a todos lados. – Además la pequeña está en esa etapa terremoto y hoy realmente debo aprovechar y descansar para la reunión de mañana.
- Haces bien en que se quede con su abuela. No has tenido una noche tranquilo desde hace tanto tiempo. Mereces tener una noche para ti. Me preocupa que no duermas bien. ¿Estás comiendo bien Ben?-
-Si mamá. - Se Río mientras se acercaba a Penny y le daba un beso en la mejilla- Hasta mañana Penny, mándale mis saludos a Tom y dile que mañana su esposa llegará tarde porque te llevaré a festejar con el equipo. Lograremos conseguir este proyecto.
Ese día en particular se sentía realmente agotado. Deseaba llegar a su casa y beberse una cerveza bien fría mientras contemplaba el cielo nocturno. Saludó a sus compañeros mientras marcaba el final de turno y se dirigía a su camioneta, una Toyota Hilux doble cabina que había comprado en el 2018.
Era viudo. Amelia fue una gran mujer que lo acompañó en sus mejores y peores momentos. Se habían unido por la soledad, por darse desesperadamente un poco de compañía.
Ben Era una persona solitaria pero la soledad no le molestaba, es más, su estilo de vida, su trabajo, el tener que estar meses o años trabajando en otros países no le permitía asentarse. Sin embargo él era consiente de no tener ese deseo y admitía que alguna vez lo intentó, pero con el tiempo se dio cuenta que no podría tener una pareja que aceptara sus ausencias y se resignó a ser solo él, hasta que se reencontró con Amelia.
Al principio su relación fue más bien algo físico. Amelia había perdido en un accidente a su prometido y el a su mejor amigo. El dolor los había acercado y ambos se curaban las heridas. Amelia le dio un hogar, un lugar en donde pertenecer y asentarse, le dio una familia y una razón para ser feliz.
La había querido. Sabe muy bien lo mucho que la quiso y lo mucho que le dolió su partida; fue feliz a su lado y ella le dio el mejor regalo de su vida: su pequeña Emma.
El embarazo los tomó por sorpresa, pero se sintieron dichosos con la noticia y decidieron casarse. La felicidad duró poco porque al comenzar el primer trimestre les dieron la noticia que Amelia tenía cáncer de mama. Los doctores les recomendaron terminar el embarazo por el riesgo que tenía el bebé y ella con el tratamiento. Amelia no quiso, el la respetó y acompañó durante todo el proceso. Una vez nacida Emma comenzaron el tratamiento con quimioterapia.

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Todo de Mi
RomantikAU. Hace dos años que Ben Solo quedó viudo y a cargo de su pequeña hija de seis meses. Fueron años difíciles pero finalmente logró salir adelante. Su carrera iba bien y tenía una vida cómoda. Hacía muchos años que había dejado de pensar en el amor...