Capítulo 17. Raices

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— ¿Cómo es esto posible? —. Cuestiona el policia mirando los registros hallados en el disco proporcionado, un exceso de información guardada sin sentido, desde nombres hasta direcciones, todo estaba exageradamente mezclado, no poseía una forma verdadera.

— Al menos ya tenemos algo por lo que avanzar —. Murmura el oficial gato alzando la mirada.

— ... —. ¿Podían considerarlo un avance? Tsukauchi no estaba nada seguro, finalmente lo que tenían no era nada y al mismo tiempo lo era todo.

Tendrían que tener a muchas personas intentando darle lógica a ese desastre, pero al menos, ya habían menos preocupaciones... El siguiente paso sería continuar el interrogatorio a Garaki para poder enterarse más a fondo de la cosa llamada "Unidad de colmena".

El nombre ya era lo suficientemente desalentador por su propia cuenta como para querer ignorar lo peligroso que seguramente podía ser. El oficial se sienta cansado sobre la mullida silla giratoria, tomando el teléfono de su oficina y marcando al celular de Endeavor, pues uno de los mejores detectives debía ver el caso si o si.

Desde el lado de los héroes las cosas se habían complicado demasiado, pues aunque varios intentaran atrapar villanos no tenían un lugar seguro donde guardarlos durante un tiempo indefinido, así que, justo como se había dicho antes, estaban usando la áreas grises de las reglas.  

Matar en ese momento se veía como la mejor opción y nadie se había opuesto, los peores villanos eran los que acababan muertos, los de crimenes menores se guardaban en celdas muy bien protegidas. La ética de todos se desplomó tan pronto como la situación empeoró, ¿Pero qué podían hacer si tártaro continuaba en crisis?

El antes héroe número uno se aparece en la estación en compañía de Hawks, quien mantiene todavía ese gesto sombrío, el rubio mira su entorno con cierto recelo y ninguna clase de brillo en los ojos.

— ¿Hay informes de las balas? —. Indaga el oficial rascando su mentón apenas cubierto de vello.

— Es difícil recrear la fórmula sintética, así que es mejor que no cuentes con ellas —. Murmura el joven de alas rojas, Tsukauchi asiente lentamente.

— ¿Dónde están los informes qué me pediste revisar? —. Enji es guiado por otro policía hasta una de las computadoras para comenzar su labor.

La tarde de los hombres es ajetreada y fastidiosa, con ellos yendo y viniendo de un lado a otro en busca de darle coherencia a las cosas, son papeles entre papeles junto a más papeles y archivos los que deben revisar para obtener una maldita pista, mientras tanto, las llamadas al resto de gobiernos no se hacen esperar, pues mientras la investigación avanza, las verdades salen a la luz.

"Consciencia de colmena" era (como su nombre lo decía) un proyecto realizado con la finalidad de controlar telepáticamente la mente de Nomus de gama alta, nacido de la fusión de más de tres koseis para su correcto funcionamiento. Aparentemente el mejor trabajo del doctor luego de la fusión de Shigaraki y AFO, el objetivo era ser caótico, pues esta vez los Nomu no pararían al finalizar sus ordenes, ni estarían limitados a unos cuantos comandos, la versión orginal de AFO tendría acceso a prácticamente todas la criaturas y eso era definitivamente de mucha ayuda.

¿Cuál sería la desventaja de ese poder? A ellos se le ocurrían varias, pero, ¿Quién demonios podría decirles si están en lo correcto o no? El oficial restriega la palma abierta contra su cansado rostro, el hombre mira el techo con recelo, bufando y extendiendo el brazo hasta la taza de cafe ubicada en la mesa.

— Tsukauchi —. Pronuncia Endeavor apareciendo nuevamente en la habitación, el mencionado dirige su vista a los ojos apagados del mayor, quien sostiene entre sus lastimados dedos una hoja. — Llama al gobierno estadounidense, tenemos un grave problema.

El invierno llegó tarde ese veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora