Pensé caleta en qué malabares hacer para subir todo el equipaje, llevar a mis bebés que estaban durmiendo y abrir la puerta, pero caché que era innecesario cuando vi al Erick esperándonos.
Me ayudó a bajar todo mientras yo los llevaba en brazos, y una vez que los dejamos durmiendo en la cama, aprovechó para hablar.
-Perdón-.
-¿Por?-.
-Por dejarte en medio de la cita-.
-Ta bien-.
-No, imagina te invito al cine y me voy en la mitad, es lo mismo pero peor-.
-No me digai que estuviste pensando todos los días en eso-.
Su mirada bastó pa saber la respuesta.
-Te perdono, aunque para mí no fue mucho, hasta me dedicaste un gol-.
-El gol que nos lleva al mundial, pasa-.
Chucha, se me olvida que este culiao no era na tan humilde conmigo.
Iba a decirle algo cuando caigo en cuenta de que todos estos días se quedó en nuestra casita.
Y se sentía bien.
-¿Estai pensando en lo mucho que me extrañaste?-.
-Yaa, deja de creerte tanto-.
-Entonces deja de mirarme así-.
-Ni siquiera te estoy mirando- dije llevando mi cara hacia él.
-Ahora sí-.
-Pesao-.
-Preciosa-.
-Ya po quiero pelear-
-Yo no-.
-Porfis-.
-No-.
-Y por qué a ver-.
-Pasé 5 años sin ti, nica pierdo más tiempo peleando-.
¿Qué se supone que se respondía a eso?
ah sí
la pregunta
-¿Qué somos?-.
Ahora el que miró raro fue otro.
-¿Ah?-.
-¿Qué somos?-.
-Novios-.
-Pero no me lo pediste-.
-Te lo pedí cuando chica, ¿o se te olvidó?-.
Me sonrojé al recordar el momento.
-Chío, ¿querí pololear conmigo?-.
-¿Ah?-.
-No quería preguntarte porque pensé que en cualquier momento podía tocarme viajar, y no quiero dejarte mal por pololear 4 días-.
-¿Y qué cambió?-.
-Me di cuenta de que prefiero pasar 4 días pololeando contigo, que 4 meses aguantándome las ganas-.
-Yaa, me siento como en una película-.
-¿Entonces? ¿Querí pololear conmigo?-.
-Sí-.
-¿Pero y qué pasa si tuve un pololo en ese tiempo?- le pregunté, despertando de mis recuerdos.
-No tuviste-.
-Pero-.
-Y yo tampoco tuve-.
-¿Querí que te felicite?-.
-¿Por qué querí tanto pelear conmigo?-.
-Queti-.
-Ya, empecemos de nuevo, ¿querí ser mi novia?-.
-Aquí es cuando te arrodillai y...-.
No alcancé a terminar la frase, cuando se puso de rodillas y sacó una caja, mostrándome el anillo más lindo que haya visto en mi vida.
-Te lo quería pedir en un lugar bonito pero ya no aguanto más, cada día estoy más seguro de que si la leyenda del hilo rojo existe, tú eri el mío, Rocío, ¿te queri casar conmigo?-.
Traté de aguantar mis lágrimas de emoción pero no pude, sorry soy cáncer.
-Acepto- dije mientras asentía, y no necesitó más para ponerme el anillo y abrazarme.
-Te amo tanto-.
-por dos-.
-Yapo dilo-.
-Ya bueno, a lo mejor yo también te amo-.
Solo eso bastó para hacerlo sonreír, y por ende, para que yo también sonriera.
•••
HOLAA
actualización sorpresa pq salí del colegio y toy feliz
me puse a llorar escribiendo esto? sí
se lo esperan?
hubiesen aceptado?
todas sus opiniones aquí xfis<3
