Cap 23. Entre Medusas Se Correspondió.

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Preparen bien las nalgas en el asiento.

- ¡Ey! ___- Sam me estaba zarandeando de un lugar a otro para que despertase

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- ¡Ey! ___- Sam me estaba zarandeando de un lugar a otro para que despertase.

-Mmh... ¿Sam? - dije adormilada - ¿Paso algo? -.

-Son las 5:45 y mi madre es de levantarse pronto, no me gustaría causarte problemas- me explico.

-Oh no- negué -Soy yo la que no le gustaría causarte problemas- me levante de un golpe mareándome al segundo.

-Pero con cuidado- se empezó a reír y me sujeto la cabeza para que se me fuese el mareo.

Reí con el -Suelo marearme cuando me levanto muy rápido- dije, miré hacia arriba encontrándome a Sam riendo con el pelo desordenado y reluciente por los rayos de sol, que iluminaban sus mechones de pelo rubios convirtiéndolos en dorado, el calor subió a mis mejillas en apenas unos milisegundos.

-Vamos, te acompaño a la granja, después te doy la sudadera limpia- me tomo de las manos para que me levantase.

-Gracias por todo Sam- le sonreí con cariño.

Nos pusimos los zapatos para salir a fuera esperando no ser vistos por nadie, ya que en este pueblo todo se propaga a la velocidad de la luz. La caminata fue relajante agarrada a su brazo mientras escuchábamos los sonidos de los pájaros despertando, los conejos y ardillas yendo a sus hogares y nuestras pisadas. No hablamos en ningún momento del beso que nos dimos en la noche, ya tendríamos tiempo de hablar mejor. Llegamos al porche de la granja señalando nuestra despedida.

-Gracias por acompañarme hasta casa Sam- le agradecí por haberme hecho un agradable camino a su lado.

-No fue nada- me acarició la cabeza como cada vez que nos despedíamos -Si vuelves a tener algún problema no dudes en venir a mi- se apuntó con su pulgar haciendo una pose orgullosamente infantil.

- ¡Claro! Pero que sea mutuo- le sonreí cálidamente y el devolvió la sonrisa.

Se iba a marchar de vuelta a su casa, pero primero hizo algo que me dejo sorprendida, me aparto el flequillo de la frente dejándola despejada para darme un beso en ella para ahora si irse.

Para nada me molesto, todo lo contrario, me pareció muy lindo de su parte. Espero tener un futuro a tu lado Sam.

Entre en la casa encontrándome una linda escena de Princeso encima de Nube, los dos dormidos enfrente de la puerta habiéndome esperado toda la noche desde que me fui. Sin hacer el mínimo ruido cogí a Princeso en mis brazos dejándolo en la casita que le hice y fui a despertar a Nube.

- ¡Ey! Pequeño- le soplé en la nariz para que no despertase de forma brusca. El despertó abriendo un ojo y cuando me vio se lanzó a mi haciendo pucheros de cachorro muy monos.

-Todo está bien- le empecé a acariciar -Solo fue un descuido- dije como si me entendiera.

Me reincorpore para ir hacia donde las vacas echándolas de comer y dejando que Nube las controlase ya que las deje las puertas abiertas para que comiesen el pasto de la granja. Después, hacia las gallinas que se encontraban esperando a que la puerta del corral fuese abierta, las tenía bien aprendidas y todo.

-𝐍𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐨 𝐫𝐞𝐦𝐨𝐭𝐨 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨- (Sam/Stardew Valley) EN CORRECCIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora