Capítulo 28

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-Día de oro blanco-

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-Día de oro blanco-


"Siento cómo que se me olvida algo... Bueno, si no lo recuerdo es porque no es importante", pensé.

Fui a la nevera a buscar algo de desayuno.

"Uf. Esas fresas con leche me miran muy apetitosas", pensé.

Así que las cogí y empecé a engullirlas, no es la mejor palabra, pero parecía que se iba a terminar el mundo por la forma en la que las estaba comiendo.

Los minutos pasaban mientras que mi paladar se endulzaba con mi desayuno. Yo ya estaba decidida sobre el tema del matrimonio, se lo pediré en cuanto tenga ese collar de sirena, he estado pensándolo por un buen tiempo y mis amigos me han ayudado a decidirme. Mi teléfono sonó en ese momento.

Lo descolgué para ver quién era—. ¿Sí? —pregunté.

—¿Ya no recuerdas el teléfono de tu propio padre?

"Mierda. Básicamente se me acaba de terminar el resto de vida que me quedaba", pensé.

—Papá, te amo. Lo sabes, ¿no? —mi padre se quedó en silencio— ¿Si te cuento algo no te enfadas verdad? —seguía sin contestar.

—Hija, desembucha lo que lleves en esa linda boca.

—Yo... Emh... ¿Recuerdas que te conté que había un lindo chico llamado Sam y que me gustaba?

"Diosito, ponte de mi lado Yoba", recé.

—Sí, y que te hiciste novia de él.

Creo que le gustó la idea de que me guste una persona que me sea fiel y no juegue conmigo, no como Oliver, le dolió que me hiciese eso y, por ende, me había vuelto algo desconfiada.

—¿Que opinas si ahora quisiese casarme con él? —no oí nada por unos segundos, solo como dejó el movil en alguna superficie y... ¿Unos saltos? ¿Saltos de alegría?

"¡Que padre más tierno tengo!", pensé.

Paró de saltar y agarró de nuevo el movil—. Tomaré unas vacaciones e iré a tu boda encantado —su voz se oyó como si tuviese un nudo en la garganta.

—¿Papa estas llorando?

—Yo... Es que estoy feliz de que ya tengas tu propia vida cariño —me hizo llorar también.

—Gracias papá —me quité las lágrimas que salieron sin permiso de mis ojos

—Le pediré a Robin que haga una pequeña cabaña para que duermas cómodo allí.

—Gracias mi niña.

A parte de Sam, también amaba la relación tan unida que tenía con mi padre y anteriormente con mi abuelo.

-𝐍𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐨 𝐫𝐞𝐦𝐨𝐭𝐨 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨- (Sam/Stardew Valley) EN CORRECCIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora