Nadie dijo nada solo nos lanzamos contra ellos atacando por instinto solo nos enfocábamos en destruir a todo a que que se opusiera a nosotros, mi corazón latía muy rápido mientras que mi espada se movía casi a voluntad propia atacando a un sinfín de enemigos de forma despiadada y certera, era un sentimiento nuevo e increíble al ver que yo estaba colaborando en una gran batalla dentro del Sekai, pero a pesar de este sentimiento aun no podía superar las palabras de Alice y al ver los ojos de mis enemigos sentía que eran los de Alice observándome mientras me destrozaba el corazón, creía que nunca sanaría esa herida y al escuchar el acero chocar y los gritos de la batalla en mi mente resonaban las palabras de Alice, mi corazón latía aún más fuerte y mis ojos se llenaron de rabia y algunas lágrimas que trataba de ignorar, a cualquier enemigo que se me atravesaba yo lo derrotaba de forma feroz y con una fuerza que para mí había sido desconocida mientras observaba el cómo mi espada desgarraba la piel de mis enemigos y la sangre se derramaba cubriendo la hoja de mi espada todo ello me daba entender que al fin había conseguido la fuerza que tanto había anhelado pero aun así esa fuerza no era útil, en el momento que luche contra una herida provocada por el amor, pero yo siempre había sido paciente para conseguir la fuerza que ahora tenía, y hace mucho yo había perdido la idea de que el amor existía pero Alice me recordó que existía y era algo increíble, debía esperar mientras yo seguía protegiéndola como todo caballero resguarda a su princesa, que era la chica que me había dado las suficientes fuerzas para continuar en esta absurda guerra y ahora era la razón por la cual yo debía seguir dando lo mejor de mí, Alice yo te demostrare que soy el indicado para ti.
Estaba demasiado perdido en mis pensamientos cuando alguien o algo me sujeto fuertemente del cuello haciendo que me fuera difícil respirar mientras que no podía observar con claridad a mi alrededor pero si podía sentir el cómo contra mi voluntad avanzaba demasiado rápido hacia un lugar desconocido, repentinamente caí en un lugar alejado de la batalla, tome mi espada y me puse de pie algo confundido después note que frente a mí se encontraba la persona responsable de que me haya alejado del campo de batalla, era el chico que acompañaba a Thomas, el chico que vestía de negro y traía con él una katana.
-Bienvenido, mi nombre es Robert –Dijo hacia a mí de forma cortés haciendo una leve reverencia hacia a mí - ¿Cuál es tu nombre?
-Mi nombre es Evans Rowling y soy el caballero del Sekai –por alguna razón algo en el me parecía familiar y a la vez me provocaba miedo- ¿Por qué me trajiste a este lugar?
-Para charlar y no ser interrumpidos por todos esos idiotas que piensan estar librando una guerra –me dijo sonriendo de forma confiada- pues ha pasado mucho tiempo que no te veo, ambos hemos crecido mucho y espero que ya seas lo suficientemente fuerte para que seas un digno oponente.
-¿De qué hablas? –pregunte mientras mi corazón comenzó a latir de forma agitada y no entendía nada.
-¿En verdad no me recuerdas? –Me pregunto mientras sonreía de forma macabra observándome con unos ojos aterradores que lleno de miedo mi corazón- Evans, juraste asesinar al asesino de tu hermano sin siquiera conocer el nombre de tu objetivo y después de tantos años al fin lo tienes frente a ti, y decides charlar con él, ese es un grave error.
-Tu... -abrí los ojos llenos de asombro y miedo incluso mi voz se cortó por el miedo, mi corazón latía muy rápido, todo en mi mente parecía dar vueltas, todo mi ser estaba lleno de una ira incontrolable y mientras recordaba a mi hermano sujetaba mi espada con ira- tu...eres.
Repentinamente llego a mi mente el recuerdo de mi hermano creando un nudo en mi garganta, y en mi mente pasaban los recuerdos de las noches en vela divirtiéndonos o estudiando, todas las veces que él me defendió incluso el momento en el que yo me despedí de el en su ataúd.
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The Other Wordl New Legends (Editando)
FantasyLa magia y la ciencia antes eran enemigas mutuas, pero ya desde casi un siglo eso cambio, con el Ksword se podían mover montañas, caminar y aun mas pero después de guerras la humanidad ha aprendido de ella, y ahora en el año 2333 eran amigas del hom...