15- Entrenamiento infernal Parte 2

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Lloraba desconsoladamente y aun que trataba de ponerme de pis algo me lo impedía, no quería continuar con esta prueba, no quería recordar el día en el que me despedí por última vez de mi hermano, era demasiado triste y personas como Azazel no respetan.

-En verdad lo extrañas –dijo una extraña voz que provenía desde el fondo- pero, ¿Por qué?, si tú fuiste el culpable de su muerte.

-¡Cállate! –grite enojado.

-Parece que estas arrepentido, y que lamentas que la única persona que te entendía se marchara –esa voz volvió a hablar en un tono sombrío y después agrego- y todo por tu culpa.

Comencé a llorar de forma aún más fuerte, las lágrimas caían rápidamente y me sentía desecho al igual que el niño que se encontraba en las escaleras, pues era cierto, yo tenía toda la culpa de que mi hermano terminara en un ataúd, pero el pequeño niño de antes no tenía idea de lo que provoco, después la escena se ilumino mostrando otro de mis recuerdos de niño, antes de que mi hermano muriera, estaba charlando con Brayan, mi hermano de cabello rubio como el de mi madre, era alto y apuesto y siempre sonreía.

-No lo entiendo, ¿Por qué no puedo usar el Ksword? –Dijo el pequeño Evans de siete años sollozando- ahora soy un inútil.

-Tranquilo hermanito –me respondió mi hermano de dieciocho años de edad que colocaba su mano encima del cabello de Evans- No eres inútil, eres muy bueno en muchas cosas, el que no puedas usar el Ksword es un pequeño obstáculo para que tú lo superes.

-Entiendo Brayan, pero... -dijo el pequeño Evans mientras se limpiaba algunas lágrimas y después agrego- quería ser fuerte como tú y pelear contigo en los torneos.

-Tranquilo –Bryan dijo sonriendo calmando al pequeño niño- Cada vez que pelee tú también estarás a mi lado.

-¿Enserio? –Dijo mirando asombrado el pequeño niño- ¿y cómo?

-En cada ocasión que yo tenga que pelear en el Sekai daré mi mayor esfuerzo, peleare por ambos y cada vez que gane la victoria será de ambos –dijo Brayan alegrando a Evans.

-Gracias hermano –Dijo feliz el niño- Tú le ganarías a cualquiera, incluso al campeón del mundo, ¿me prometes que algún día le ganaras por mí?

-¿El campeón mundial?, pero lo llaman el gigante de hierro y es demasiado fuerte –contesto Brayan dudoso- no sé si podría derrotarlo

-Yo sé que tú puedes derrotarlo –dijo entusiasmado Evans- Demuestra que tú puedes asesinar a un gigante, ¿lo prometes?-

-Solo si tú nunca vuelves a llorar por no poder usar el Ksword -contesto el hermano mayor- ¿lo prometes?-

....

Después todo al rededor comenzó a volverse una gran arena, donde yo de hace siete años estaba sentado comiendo golosinas al lado de mis padres en uno de los asientos casi hasta en frente, mientras observaba la arena donde había cuatro puertas al Sekai y muy arriba de ellas había diez pantallas enormes que parecían flotar mostrando lo que sucedía dentro del sekai y los encuentros de peleadores que habían venido de muchos lugares a combatir en el torneo mundial que ese año se había decidido seria en mi ciudad, era increíble ver a mi hermano en una de esas pantallas usando sus alas blancas y sus espadas dobles de un hermoso color dorado para combatir dando todo de el de tal forma que llego a la semifinal, después de esta pelea el ganador pelearía contra el campeón mundial y se decidiría quien sería el nuevo campeón.

-¿Recuerdas este encuentro? –dijo Akumu de nuevo sin señales de algún sentimiento.

-Si lo recuerdo –dije con lágrimas en los ojos y después agregue- en combate de la semifinal del campeonato del 2325.

The Other Wordl New Legends (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora