Todos en la mesa se observaban unos a otros cuestionándose con las miradas, incluyendo a Azusa que era quien normalmente se fijaba solamente en su comida. Observé a Ruki de reojo que partía su pedazo de carne y se la comía con total normalidad.
Maldito idiota.
— ¿Porqué se siente este ambiente tan extraño? — cuestionó Yuma. — Me siento incómodo
— Akira esta más callada de lo que es costumbre — levante mi mirada de mi plato para observar a Kou.
Sonreí y comencé a acomodarme en mi lugar tirando un pedazo de cabello detrás de mi oreja.
— Yo estoy bien — carraspee mi garganta. Observé a Yui sentada frente mío. — ¿Tú cómo estás, Yui?
Ruki levantó su mirada a mi como si estuviera poniéndose alerta sobre algo. Yui parpadeo varias veces y me sonrió tiernamente.
— Bien — susurro.
— Aquí.. se siente... extraño — murmuró Azusa ganándose la mirada de todos los presentes. — Tú.. tienes.. el.. aroma.. de Ruki.
Presione mis labios con paciencia; de verdad odiaba cuando este chico hablaba como si estuviera en cámara lenta.
— Parece ser que a su hermano le gusto — levante mis hombros sin importancia partiendo mi carne.
— ¿Qué? — se sorprendió Kou observando a Ruki y a mi. — ¡Ruki, no creí que ella sería tu tipo!
— No lo es. — entre cerro sus ojos viéndome.
— ¿Ah no? — mencioné ofendida. — Eso no dijiste a noche cuando dormimos juntos y nos besamos — negué. — Hombres.
— ¿De qué nos estamos perdiendo? — busco su mirada Yuma.
— Yo no me fijaría en una niña inmadura, tonta y estúpida cómo ella.
— ¿Y dices que yo si me fijaría en alguien que carga un libro las 24 horas del día cono si fuera parte de si? — lo rete con la mirada. — Eres absurdo.
Ruki endureció su mandíbula con un leve suspiro. Se levantó y salió de la cocina dejándonos a todos sin nada que decir.
De pronto un montón de miradas se enfocaron en mí ocasionando que una incomodidad se consumiera en ese momento.
— ¿Qué? — cuestione.
— ¿Y es bueno? — preguntó Yuma.
— ¿D-de qué? — mis mejillas comenzaron a tomar color.
— En la cama — levantó ambas cejas Kou. — Ruki puede ser un tanto, reservado así qer nos da curiosidad.
Bajé mi mirada frunciendo la boca y sonreí levemente para volver a verlos esperando una respuesta.
— Tal vez.
.......
Observé a todos lados mientras corría en busca de un teléfono. Al verlo de lejos lo tomé y comencé a marcar los dígitos pero no sonaba siquiera.
— ¿Es enserio? — susurre tomando el cable cortado del teléfono. Colgué con un bufido y corrí a la entrada de la mansión.
Busqué entre los arbustos del lugar en busca de algo brilloso. Una bolsa de plástico brillo entre los arbustos y rápidamente lo tomé encontrando el teléfono celular que había metido antes de ingresar por completo al lugar.
Lo encendí y comencé a marcar el número de mi madre.
— ¿Hola? — del otro lado de la lineal se escucho su voz.
— ¿Mamá? Hola — sonreí con un leve sentimiento de tristeza. — ¿Cómo estás? Perdón por no haberte llamado antes.
Comencé a caminar cubriendo el celular con mis manos y observando a mi alrededor a la defensiva para que nadie me descubriera.
— Aki, hija, estoy bien — tosió. — También te extraño mucho, ¿Cuándo regresaras? Extraño a mi hija, aun eres muy joven y me da miedo que te pase algo en ese trabajo de turista en el qué estas. — volvió a toser.
Me senté en medio de unos arbustos con un nudo en la garganta. La peor cosa que he hecho no es haber matado a mucha gente, sino, el haberle mentido a mi madre sobre un trabajo que realmente no es.
Soy una asesina.
— No se cuando regrese — trate de sonar normal. — Pero, prometo volver pronto, mamá. ¿Has tomado tus medicamentos?
— Si, parece ser que tus amigos me cuidan mucho ya que me traen medicamentos y me han traído dinero pero, no puedo recibirlo.
— Recíbelo, ese dinero es mio. Yo les pedí que te lo dieran — mis ojos comenzaron a cristalizarse. — Tengo que irme, te llamaré después.
— Adiós, Aki, cuídate. Te amo — tosió.
Sonreí aun cuando ella no me veía y corte la llamada. Apague el teléfono y lo puse en la bolsa ocultándolo en la tierra de los arbustos.
Salí de ahí y observé un lugar fijo, mi madre me dijo que me cuidara pero, vine a matar a una chica de 17 años como si no importara su vida.Iba a matar a una niña como si fuera una basura.
Negué mis pensamientos negativos corriendo dentro de la mansión. Si me permitía consumirme por mis sentimientos humanos no podría hacer lo que me pidieron.
Debía matar a Yui y irme.
Entre a la habitación que compartía con Ruki y entre las esquinas de la misma tomé una pistola que había escondido. La cargue y tomé aire cerrando mis ojos y pidiéndole a Dios que me perdonará por lo que había hecho y seguía haciendo.
Yo realmente no quería matar gente pero, no tenía otra opción.
Guarde el arma en mi pecho y salí en busca de la rubia con rapidez; busque en su habitación, en la cocina, en la sala y incluso en los pasillos pero, no había rastro de ella.
Finalmente la encontré en el jardín con Yuma mientras el parecía estarle mordiendo su cuello, no me sorprendía nada ahora. Saqué el arma y verifique nuevamente que estuviera cargada y apunte hacia ella.
— Tengo que hacerlo — susurre para mi misma.
— No lo creo. — susurraron en mi oído.
La persona detrás mío paso su brazo en mi cuello comenzando a presionar con fuerza ocasionando que el aire y la fuerza se fueran de mi cuerpo y el arma cayera de mis manos.
Deje de ver luz hasta ver negro.
...
Les juro que tratare de ponerle mas atención a todas mis historias :(
ESTÁS LEYENDO
Asesina; Ruki Mukami
Fanfiction'La venganza es lo más dulce' <3🌻 Esta historia solamente se encuentra en Wattpad si es visto en otro lugar sin el permiso del autor será denunciado. 🍓