Capitán América: Un buen hombre.

Pantanos

—Florida.

Las ranas croaban y las luciérnagas resplandecian entre la oscuridad de los pantanos extendidos de Florida, pues ahora sin alguien que los parara, o siquiera le importara, estos lograron extenderse con apoyo y cuidados de la personificación del pantano echa guardian. Los héroes ahora dormían sobre el mismo, habiendo usado los árboles entrelazados por sus enormes ramas como su apoyo, pues habían usado estos como sus camas para esta noche, con una combinación de acolchanamientos con las prendas, y algunas mantas, que llevaban y simplemente durmiendo sobre las ramas. Todos claro, a excepción de Antivenom, pues este había extendido su simbionte para crear una amaca, del mismo modo que Moon Knight, salvo que este usaba su capa.

—Está ahí otra vez— confesó Jessica, con los ojos entrecerrados, mientras que se movía unos centímetros hacia Steve, quien dormía a su lado

—Ignoralo y se irá— respondió Steve, pegándose un poco más a Jessica en busca de confortarla

—Tus sentidos son normales, yo hasta puedo olerlo— añadió Laura, con los aun cerrados, mientras que el agua chacueleaba en la cercanía, manteniendo un poco inquieta a Kate

—Odio que este por ahí, me da miedo— confesó la arquera, mientras mantenía los ojos cerrados con fuerza

—El nos cuida a su manera— contestó Antivenom —, además, después de todo lo que hemos vivido ¿Te miedo Man-thing?

—Tengo cierto "algo" con las cosas que rondan en la oscuridad de los pantanos y pueden hacer que mi muerte se vuelva una muerte hentai— añadió Kate, cubriéndose el rostro con un gorro

—¿Miedo de que te guste Man-thing?— pregunto Antivenom

—Eso asqueroso— intervino entre susurros Jessica, mientras tomaba su arma luego de varios intentos a ojos cerrados

—Si que lo es— continuó Steve

—Pudrete, Eugene— finalizó Kate

Un nuevo día llegó y ahora el agua chacueleaba con el avanzar del paso de los héroes; Steve y Jessica iban a la cabeza, dirigiendo aquella pequeña tropa por la pantanosa liquidez del escenario. Laura buscaba con cierta presión algo en su mochila, atrasandose un poco y siendo a su modo cuidada por Kate, quien se mantenía alerta mientras la mayor de las Kinney tenía la mano dentro de su mochila.

—¡Carajo!— gruñó la mutante —¡No están!

—¿¡No trajiste los audífonos!?— pregunto entre un grito Kate, restandole tensión al agarre en la cuerda de su arco —Me lleva, ahora si voy a morir...

—¿Qué tienen de importantes unos audífonos? Quiero decir, demonios Laura, nos sirves más sin ellos con tus sentidos agudizados— dejó al aire Antivenom

—Bueno, pasa que se los pedí— respondió Kate —escuche que tenia un par de canciones de Wallows y, vamos, en mi vida pensé que los iba a volver a oír...

—Iremos a Miami— intervino Moon Knight —E-Estoy seguro que encontraremos algo— respondió Moon Knight, entre una pequeña queja

—¿Estas bien?— pregunto Antivenom, acercándose al capado héroe

—S-Si— contestó firme Moon Knight, antes de seguir caminando con la capa enrollada sobre su mochila y usando el bastón de apoyo —hay que continuar, estamos a tres o cuatro días máximo.

—Alto— susurro como advertencia Laura, sacando sus garras con lentitud y mirando a su alrededor —, algo nos sigue, puedo oírlo moverse entre el agua atrás de nosotros, tal vez unos cinco metros...