La caída de Knull fue inevitable cuando en un ultimo esfuerzo, los héroes de acabaron con la oscuridad encarnada en deidad; pero no fue el final brillante esperado, pues aunque el fin de aquella tortura llego, una nueva empezó al quedar sin control...
Los héroes habían logrado conseguir un viejo autobús para salir a máxima velocidad tras aquel enfrentamiento contra los remanentes de Knull que habían sido devorados por el enorme lobo que ahora los perseguía incesante; Moon Knight conducía mientras evitaba ver hacia atrás, puesto que se había auto impuesto la misión de no frenar hasta que sus compañeros dejaran de gritar y disparar hacia atrás en afán de acabar o aullentar al lobo, cosa que no parecía estar pronta a pasar. El lobo daba fuertes pasos en aras de alcanzar aquel autobús; jadeaba de manera que sólo un simbionte podía crear a partir de sus ferales cuerdas vocales. Pronto una especie de tentáculos viscosos emanaron de la espalda del lobo e intentaron tomar la parte trasera del autobús, pero fallando al sentir las garras de X-23 cortando los extremos de estos al mismo tiempo que como podía, Antivenom los quemaba con su simbionte mientras se mantenia disparando en el techo del autobús.
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—¡Está cosa no cede, Cap!— grito Kate, quien lanzaba flechas, estas hechas con palos delgados y nada más que largos clavos en la punta de los mismos
—¿Tu crees?— grito sarcástica Jessica, cargando su escopeta y disparando hacia el mismo por aquella abertura que habían hecho en los cristales traseras
—¡Marc!— grito Steve, mientras recargaba su arma a la par que avanzaba por el pasillo hasta el asiento del conductor —¿¡Cuanto falta para la playa!?
—Una hora quizás, sin tráfico tal vez media hora— bromeó Moon Knight, aún con una mano sobre el volante y otra en su costado
—¿Aun con esa herida?— pregunto Steve, viendo con atención aquel lugar donde estaría su herida bajo el traje
—Todo bien Capitán, solo tengo que conducir hasta llegar y relajarme— contestó Moon Knight, prácticamente ignorando aquella pregunta y acelerando
—¡Veo la playa!— grito Kate al girar hacia el frente del vehículo, notando el azul más allá del negro de aquella ciudad
El autobús esquivaba cada destrozado vehículo en su camino, desde estacionados o abandonados, hasta simplemente destruidos o volteados; poco a poco, y tras avanzar ya un par de kilómetros en aquel autobús, la compañía no se hizo esperar, y pronto los simbiontes libres de la zona, que a juzgar por el lugar eran pocos, pronto rodearon y empezaron a perseguir el autobús a una distancia medianamente segura de aquel lobo, solo a los lados del autobús o unos metros detrás del lobo, pero sin bajar la velocidad y persiguiendo de manera fiera a los héroes.
—¡Tenemos compañía!— grito Jessica apenas vio a un simbionte saltar sobre un costado del autobús, disparandole directo al rostro, haciendo que este soltara el vehículo
—¡En eso estoy!— grito desde el techo Antivenom, sujetando el rostro de uno de estos que se había trepado al techo y logró hacer que este cayera inconsciente —¡Tal vez no soy quien pero, tenemos que apresurarnos o tendremos aun más compañía!
