(❗) Culpabilizar

220 24 1
                                    

Lizzie había seguido con aquella relación con Cody, él estaba esforzándose para no hacerle tanto daño a su novia pero aún, cuando estaba de malas solía ignorarla, todo esto para no herirla.

Pero fallaba.

Por su parte su amistad con Helen era lo único que podía hacerla sonreír, Cody lo notaba su mirada estaba bastante diferente hacia él, pero aún podía verse amor, aunque no como antes.

Un día después de una misión volvió a casa de Lizzie, ella dejo un post-it que decía:

Cody:

Volveré en un par de horas, salí con una amiga.

Te dejé la cena en el microondas,

Con amor Lizzie ❤️.

—¿Y yo soy pendejo? —se preguntó a si mismo.

Veía por la ventana y entonces vio a Helen con Lizzie, su mirada era tan parecida a como lo miraba a él cuando eran niños.

Helen estaba entrando en su corazón.

Salió del lugar y bajo, estaba dispuesto a asesinar a Helen de ser necesario, ni siquiera experimentar con él, solo ir y matarlo.

Lizzie se volvió de piedra al verlo, no podía moverse del susto.

Helen se puso frente a ella, según él para protegerla.

—¡Aléjate de mi novia! —le ordenó el castaño al pelinegro.

El de los orbes azules le pidió que se calmará, que Lizzie y él solo eran amigos. Lizzie le pidió que no hiciera una escena diciéndole lo mismo que Helen.

Solo somos amigos cosa que para Helen era algo horrible, ya que él si la amaba.

—¿Qué dices? ¿Entonces por qué tenías que mentir? Lizzie, idiota... ¡Vamos a casa y lo hablaremos ahí! —el castaño ordenó nuevamente.

Helen se negó a dejarla ir y fue entonces que Cody le lanzó un golpe directo a la cara al pelinegro, pero Lizzie se interpuso y fue golpeada por primera vez.

Ella chillo por la sorpresa y el dolor y de inmediato Helen se acerco al igual que Cody.

—Lo siento, no fue mi intención, quería golpear a este idiota —dijo Cody.

—Lizzie, ¿Estás bien? —preguntó el pelinegro.

—No Helen, mi nariz está sangrando —dijo ignorando completamente a Cody, haciendo que este la tomara en brazos con bastante brusquedad y se la llevará ante las súplicas de ella y que Helen los siguiera.

Cody cerró el apartamento y Helen no tuvo más opción que irse, aunque después volvería, eso estaba claro.

Lizzie fue puesta en el sofá y prontamente Cody puso su rostro en un ángulo de 90° grados y fue por hielo.

—Cody... —musitó la chica.

—Se lo que vas a decir... y lo siento —se disculpó.

—Es que no creo que... 

Florecita, Helen te desea lo sé y tú lo miras de una forma que me lastima, no quiero perderte ¿Entiendes? 

Lizzie asintió sintiéndose culpable.

—Tú me mentiste para ir a encontrarte con un hombre que no soy yo, eso no es justo Lizzie —pudo el hielo en la herida y dió un pequeño masaje.

—Lo siento, no quiero lastimarte Cody —se disculpó ella.

—No quería golpearte fue un accidente, además fue tu culpa.

—¿Mi... Culpa?

—Por irte con él, por mentirme... Lizzie, me hiciste daño ¿Lo sabes no?

La culpa se apoderó de su corazón y quitó el hielo de su rostro para abrazar al castaño, ella beso su frente y le pidió perdón.

—No va a pasar de nuevo Cody.

La tenía a su merced, ella no podría escapar.

Violentometro || X-virusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora