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Ivan estaba furioso, cerró con fuerza la puerta de la habitación blanca y se tumbo en la cama. Seguro su madre lo odiaba y hacerle esto le parecía lo más gracioso del mundo.

¿Como se atrevía a dejarlo tres semanas sin celular? Ni siquiera le había dejado explicarle las cosas a Sofia y Gerry, ellos estarían preocupados por el.

Se levantó al escuchar un estruendo, Emilio no podía ser el estaba comiendo galletas abajo, camino hasta la ventana

El mismo chico de la mañana parecía regañar a una de las vacas del establo, más adelante había una carretilla con algunas mandarinas  esparcidas por el suelo

Sus abuelos salieron y se acercaron al menor el les explicó haciendo algunos ademanes los tres rieron, luego su abuelo lo abrazo por los hombros guiandolo al interior de la casa.

El queria ver de nuevo esos ojos verdes tan bonitos, así que se acomodo su gorrito y bajo hasta la cocina.

—¿Que haces aquí?— Pregunto Emilio con una galleta en la boca

—Yo también quiero galletas— Se alzo de hombros

El castaño frunció el ceño, ¿Desde cuándo a Ivan le gustaban las galletas de chocolate? La puerta fue abierta, sus nonos venían con un chico.

—Mira Emilio el es Bogdan, nos ayuda con la siembra y también con los animales— Dijo su abuelita sonriendo

—Un gusto Emilio— Extendió la mano

—El gusto es mio Bogdan— Estrecho su mano sonriendo

—Oh no, solo dime Bogg o Boggi

—Esta bien Boggi— Los dos sonrieron— Me alegra y en verdad aprecio que ayudes a mis nonos en la asienda, me encantaría hacerlo también pero...

—Hey tranquilo, yo entiendo.

Sonrieron, Emilio le extendió el plato de galletas así que tomo algunas. Bogg noto que ahí también estaba Iván y que ellos eran gemelos, aunque lo último ya lo sabía pues don Arturo siempre le hablaba de ellos en el huerto.

Se preguntó porque Emilio era tan amable y carismático y el era tan enojon e irritable.

—Hola otra vez Ivan—Sonrió tranquilo

El mencionado se limito a alzar las cejas. Una mujer rubia y rizada salió de la sala de estar

—¿No estabas enojado?— Le dijo a Ivan

—¡Quería galletas! ¿O que? ¿¡Tampoco puedo comer de las galletas de mi abuela!?— Se levantó de golpe

Boggi retrocedió por inercia.

—Yo no te dije eso Ivan, solo te hice una pregunta.

—Pues creo que era obvia la respuesta— Mordió molesto una galleta

—Bueno Marisol te quiero presentar a alguien.

—¿A quien?

El es Boggi— El señor le sonrió

—No bueno, hasta que se me hace el gusto conocerte pequeño mis padres me han hablado mucho de ti— Se acercó a abrazarlo

—El gusto es mio, es un placer conocerla o bueno conocerlos— Sonrió timido

—Mamá, ¿Puedo quedarme también?— Dijo Emilio—Puedo comer galletas en el desayuno y ayudar a Boggi con las tareas de la asienda y...

—Emi— Su madre le hablo tranquila—Puedes venir para las vacaciones de Verano, ¿Esta bien?

—¡Siii!— El castaño salto emocionado— Bueno pero ahora ¿Podemos ir a ver a las vacas?

Pregunto en dirección a Bogg el asintió sonriendole

—¡Vamos!— Tomo su mano para jalarlo afuera

—Yo los acompaño— Dijo Ivan finalmente

Todos excepto Bogg voltearon a verlo más que sorprendidos, ¿Realmente estaba pasando? ¿Iván quería ir con los animales?

—Claro ven también— Sonrió

Los alcanzó y tomo la mano de Boggi. El menor volteó a verlo confundido y con un ligero sonrojo

—No se en donde es— Se alzo de hombros

A Boggi le parecía ilarante que no conociera el hogar de las vacas siendo esta la asienda de sus abuelos. Pero no dijo nada, además también estaba sujetando la mano de Emilio

Sacudió la cabeza y comenzo a caminar al lugar, los ojos de Emilio brillaron al ver a una pequeña vaca que había nacido hace poco menos de un mes, se solto del agarre corriendo hasta ella.

Ivan se limitaba a admirar el paisaje, sus manos aun estaban entrelazadas.

—No eres de por aquí, ¿Cierto?

—Gracias a dios, no.

—¿Bromeas? 𝑃𝑢𝑗𝑎𝑙𝑡 es hermoso

—No, no lo creo.

Te lo demostrare — Sonrió timido el castaño.

𝐏𝐔𝐉𝐀𝐋𝐓  [𝐁𝐨𝐠𝐠𝐢𝐯𝐚𝐧]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora