izuku midoriya es un estudiante de U.A. Culpa de sus amigas, había sido arrastrado o mejor dicho, obligado, a vestirse de un atuendo de porrista de su escuela, enseñando a todo estadio por culpa de ellas.
Llegando así un destino algo complicado para...
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Katsuki: ¡No bajes el rostro! - grito una vez más agarrando mis mejillas y estirándolas, haciendo que me duela.
Izuku: ¡k-kacchan! ¡me lastimas! Y perdón.. - este dejo de agarrarmelas y se acomodó en el suelo, para sentarse mientras cruzaba sus brazos, dando entender su molestia y su expresión.
Katsuki: ¡pues no bajes el rostro! Y tampoco vayas bajando el volumen mientras hablas, es molesto, además no se te escucha, y seguramente te lo va a pedir otra vez que le digas lo que dijiste y te acobardaras- soltó un gruñido antes esto.
Era un miércoles en la mañana, fui a ver a kacchan en el receso por una pequeña ayuda, la cual, para mi no es una pequeña ayuda, es demaciada, mis nervios me consumen demaciado, al punto que me duela mucho el pecho.
Este con molestia me siguió en el salón para hablar, y así estamos, le explique mi situación, lo que planee hacer y que me ayudara a declararme, ya que este se confesó a kirishima-Kun hace un tiempo y resultó.
Solo me miro con molestia ante mi pedido de ayuda, suspiro y empezó a regañarme de no ponerme nervioso, también lo que tengo que hacer, entre más cosas, me obligó hablar un poco lo que le quiero decir, ya que no levantaba la voz y consecuencia de eso, me obligó, este no me juzga lo que le quiero decir, si no como lo digo, con verguenza, sería mucho para vergonzoso si me criticara mis palabras hacia todoroki.
Se había acabado el receso, y me dijo que me ayudara el viernes, un día antes de la salida, ya que, como estamos trabajando y diferentes horarios, será difícil encontrarnos y hablar.
Estuvimos en el salón "practicándo" y como ya es costumbre, recibiendo regaños que mayormente son quejas, pero ya estando acostumbrado desde que teníamos 7 años, solo lo escucho como si solo estuviese hablando normal, o tal vez de muchos gritos y explosiones de parte suya, ya me dejo sordo.
Estuvimos así hasta que se acabara el descanso, le gradeci y solo me respondió con un tronado lengua. Me fui para mi lugar y recibí la clase como es habitualmente.
Estuve una vez más en el trabajo, ahora si, todoroki me había prestado su traje, el después se puso el mio, en verdad si me daba risa, nunca me imagine todoroki estando vestido en esa forma, pero de cualquier forma, se veia lindo.
Y el así estuvo toda la tarde, cautivando miradas y una que otra risita de los clientes, el solo seguía normalmente porque en verdad, también a él le parecía chistoso, aunque su expresión neutral no lo diga.
Después me fui para mi habitación de la academia, no sabría que hacer en esos momentos, estaba cansado como para ir a correr o entrenar, así que no le pensé mucho para después pensar en ir a mi casa y visitar a mi madre, solo tenemos permitido ir los fines de semana, pero una mentirita no hará daño.
