A la mañana siguiente, SooBin había despertado porque algo estaba dándole comezón en su nariz, algo peludo y con olor a alguna fruta que no reconoció.— ¿Qué?... — SooBin abrió sus ojos lentamente, presa aún del sueño, frunció el ceño al ver que tenía al chico gato abrazado a su torzo, con su cabeza recostada en su pecho y sus orejas picándole la cara. —Aléjate de mi, peludo... — SooBin talló sus ojos, moviéndose un poco para lograr que el gato se moviera de sobre él, pero no se movió ni un centímetro, al contrario, se acurrucó más a él, dejando sus molestas orejas más cerca de su rostro, y emitiendo un cálido ronroneo. — ¡Que te muevas cosa fea! — SooBin exclamó, asustando a Yeonjun porque había gritado muy cerca de sus orejas.
El recién despertado se sentó en la cama, bostezando y estirándose con comodidad. Había dormido muy bien, después de mucho tiempo había de nuevo abrazado a alguien al dormir, y no a los peluches que tenía en casa de Baejin.
—Buenos días SooBin hyung... — dijo con una sonrisa, después de darse la vuelta sobre el colchón para ver a su dueño.
—Tus orejas feas me picaban la nariz — gruñó. Yeonjun tocó sus orejas, acicalándose, un poco avergonzado, bajo el regaño de SooBin.—Lo siento... — se disculpó sincero. SooBin bufó.
—Además me abrazaste, eres muy extraño... — agregó sentándose en la cama, después de haberse desenvuelto de las sábana.
Yeonjun lo miró curioso. Para él los abrazos no eran extraños, a veces no podía comprender porque para otro sí. Entendía eso del espacio personal, pero él no puede evitar querer abrazar, le gusta la cercanía, no es un gato huraño, y disfruta del contacto.
— ¿No te gustan los abrazos?
—No, además me acabas de conocer ayer y ya dormiste conmigo y me abrazaste mientras estaba desnudo. — Yeonjun movió su cabello, rascándose un poco, él no miraba nada de eso malo.
—Bueno, disculpa si te incomodé mucho... — Yeonjun sentía que disculparse era lo único que podía hacer, nunca había convivido con una persona que se molestara por convivir.
—Ya, da igual... — habló SooBin para salir del tema. Se levantó de su cama y sintió frío en todo su cuerpo desnudo y sólo cubierto por un bóxer. Se dirigió a buscar ropa en un mueble frente a la cama, siendo consciente de que todos sus movimientos eran atentamente seguidos por la mirada curiosa de Yeonjun. —Bueno, ¿y qué tú no haces algo más que mirarme? — habló, cortando con el silencio que se había extendido. Yeonjun se sobresaltó, sin saber qué contestar. —Voy a bañarme, tu ve por ahí, a hacer cosas de gatos, qué se yo...
Yeonjun asintió, se levantó y siguió a SooBin hasta la puerta. El mayor se detuvo haciendo que chocara con su espalda. Se dio media vuelta y lo miró serio.
—No rompas nada, ni andes mordisqueando algo por ahí, ni hagas pipí en el suelo — le ordenó señalándolo con su dedo índice larguirucho.
Yeonjun asintió varias veces ante cada orden, preguntándose quién creería SooBin que era, ¿quién se haría pipí en el suelo a su edad? Él ya pasó esa etapa.
SooBin caminó hasta encerrarse en el baño, y Yeonjun salió de la habitación. Se dirigió a la cocina, pensando en que si hacía algo de comer para SooBin no le molestaría. Se sintió suertudo de que Jin fuese un dueño atento que se tomó el tiempo de enseñarle muchas cosas qué hacer en casa, como limpiar y cocinar. Sólo le enseñó lo básico, podía hacer un desayuno simple para SooBin, Jin nunca lo dejaba usar aceite o cuchillos, así que sería algo bastante sencillo.
Mientras que Yeonjun se entretenía en la cocina, SooBin había salido del baño silenciosamente de regreso a su habitación, tomó su celular y marcó rápidamente a Beomgyu.—Buenos días SooBin. — SooBin negó, conteniendo las ganas de gritarle hasta de lo que moriría.
— ¿Y qué se supone que tienen de buenos, mocoso? — SooBin escuchó una risa de parte de Beomgyu, y eso solo le causó más ganas de asesinarlo — ¿por qué has traído un feo chico gato a mi casa, estúpido?
— ¡Yeonjun no es un gato feo! Es muy bonito.
—Si es tan bonito por qué no te lo quedaste tu, ¿eh?
—Es que tu lo necesitas más, yo solo quería ayudarte... — SooBin suspiró, conocía todo el sarcasmo que Beomgyu estaba usando.
—Tu querías burlarte de mi, eso querías narizón.
—Bueno, dime quién tiene más para burlarse, ¿yo o el que quería invocar a un demonio?
— ¡Solo era una broma! creí que me detendrías a tiempo. Ya superé lo de mi ex.
—Y así lo hice, hyung. Ahora tienes a un lindo y dulce gatito, evité que te poseyera algún ente por ser virgen.
—Ay, no soy virgen, ya callate ¿si?... — SooBin bufó y cerró sus ojos. Beomgyu había soltado una risa del otro lado de la línea. —sólo ven en un rato. — pidió, para después colgar y arrojar el celular a la cama.
Yeonjun había escuchado toda la conversación, y cuando escuchó los pasos de SooBin acercarse a la puerta salió corriendo silenciosamente de regreso a la cocina.
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꒰Gato malo꒱˖ ᎒ ©Soojun
Fanfiction( 100% demon made in hell ) ☾︎ | contiene: humor, soft, smut ☾︎ | Adaptación, créditos a ©daeguyz. ☾︎ | hybrid au¡ ☾︎ | Portada hecha por @missin_kitten_ ♡ ~3 en #chicogato [20.10.21] [10.11.21] ~6 en #tomorrowxtogether [23.10.21] ~2 en #soojun [15...