♡᎒ Cumpleaños

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🌻


SooBin dejó de masticar y se quedó quieto, viendo cómo el rostro de Yeonjun se ponía un poco rojo por sentirse avergonzado, y cómo su cola se enredaba entre sus dedos. Terminó de comer lo que tenía en su boca y dio un sorbo al vaso de leche.

—Uhm... — no sabía qué contestarle, mucho menos si lo miraba con sus mejillas coloradas y sus ojos atentos, demasiado tierno, no quería hacerlo sentir mal o algo por el estilo, pero tampoco podía solo quedarse callado y simplemente mentir. —Yo no...

—Sé limpiar hyung... Y también puedo cocinar, casi nunca estoy en mi forma de gato así que no dejaré pelos en tus sillones, ya no me hago pipí... Seré un buen gato, SooBin.— SooBin hizo una mueca, incapaz de contestarle con algún comentario hiriente cómo era su costumbre, así que mejor se quedó callado. Acercó la silla a su lado y le indicó a Yeonjun que se acercara.

—Ven siéntate... — Yeonjun obedeció, y tomó asiento en la silla junto a SooBin. —Esta bien que puedas hacer todo eso, pero yo vivo solo y mi sueldo a penas me alcanza para pagar este lugar y lo que como, además...

— ¡Pero no tienes que gastar en mi! Yo traje ropa así que no me tienes que comprar nada, y Hueningkai hyung me regaló una caja de galletas de avena, tampoco me tienes que comprar comida... — SooBin quiso reír de la manera en la que las orejas de Yeonjun estaban erguidas mientras hablaba. No se lo diría, pero ahora mismo pensaba que se veía muy lindo rogándole.

—No puedes vivir a base de galletas de avena... Además te decía, que cuando terminen mis vacaciones entraré a la universidad y no tendré tiempo para mascotas... — Los ojos de Yeonjun brillaron cuando escuchó la palabra "universidad", esa palabra de nuevo. Parecía que ese lugar pretendía dejarlo sin dueños.

— ¿Universidad?... ¿t-tu también?... — Yeonjun ahora se sentía más triste, entonces tendría que regresar a casa, estar solo y simplemente esperar por Baejin. SooBin se sintió culpable de ver la expresión de tristeza en Yeonjun. Iba a hablar para preguntar a qué se refería con que él también, pero entonces Yeonjun se levantó de la silla. —Lo siento... — se inclinó suavemente, mostrándose un poco avergonzado. —Estaré en tu habitación... — se dio media vuelta y desapareció por el pasillo, entrando a la habitación de SooBin.

SooBin suspiró, no le gustaba la sensación que justo ahora estaba sintiendo, se sentía culpable y no era normal en él. Ver esas orejas y esa cola peluda bajas no era agradable.Terminó de comer apresurado por el sonido de la puerta siendo golpeada, se levantó y abrió encontrándose con una enorme sonrisa en los labios de Beomgyu.

— ¿Por qué estás sonriendo, mocoso? — Beomgyu entró, y atrás de él estaba Hueningkai, como siempre con su expresión nula. SooBin lo invitó a pasar y pronto los dos estuvieron sentados en uno de sus sillones.

— ¿Y Yeonjun? — preguntó Kai, mirando en el suelo la maleta en la que había empacado sus cosas.

—Está en mi habitación — contestó SooBin, señalando el pasillo. Hueningkai se levantó y sin decir algo se dirigió hasta encontrar la habitación de SooBin y entrar. SooBin miró a Beomgyu, quien dejó unas bolsas sobre la mesa del comedor.

— ¿Que es eso? — SooBin se acercó, para empezar a hurgar dentro de las bolsas que Beomgyu dejó, encontrándose con ropa y artículos de higiene personal. — ¿Por qué me traes esto? Ya me bañé si intentas decir algo...

—No son para ti — Beomgyu apartó las manos de SooBin de las bolsas. —Son cosas de Yeonjun. Su ropa es especial, los bóxer y algunos de los pantalones tienen una abertura que le permite poner su cola sin que se lastime. Pronto será su cumpleaños, así que le compré algunas cosas de obsequio — explicó Beomgyu con una sonrisa.

— ¿Cumpleaños?

—Sí, y le haremos un festejo.

— Beomgyu... — SooBin de repente se sentía extrañamente invadido. —Justo de Yeonjun me gustaría hablar.

—Hazlo, te escucho. — SooBin suspiró y se sentó pesadamente sobre la silla.

— ¿Pretendes meter a mi departamento a un híbrido sin mi consentimiento?...

—SooBin, no me digas que es por feo. Lo acabo de conocer y es la cosa más adorable que haya visto, no puedes quejarte de tenerlo... — dijo Beomgyu cruzándose de brazos.

—Sí, sí Beomgyu. Es muy lindo y todo eso... — cedió, restándole importancia. —Pero no hablo de eso, yo a penas y me puedo mantener, entraré a la universidad, encontraré novia pronto...

— SooBin, por favor... — Beomgyu rodó sus ojos.

—Bueno, lo último quizá no... — cedió. —Pero sí que puedo quejarme...

—De acuerdo, ¿por qué no puedes quedarte con él?

—No puedo quedarme con Yeonjun. Será un gasto más y una responsabilidad que no quiero aceptar.

꒰Gato malo꒱˖ ᎒ ©SoojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora