Helena S. (En pausa)

El Río

*Capitulo 9*

El Río
***

El frio nos estaba congelando a todos, la brisa no se apiadaba de nosotros, llevamos más de diez horas en el bosque Alana esperando un resultado. Toda el área estaba siendo custodiada por policías, las personas de búsqueda y extracción estaban metidas en el río buscando algún cuerpo o lo que más se asemejara a ello.

La incertidumbre consumía a todo mi equipo, mientras más pasaban las horas la esperanza de encontrar un cuerpo desaparecían, el tiempo lo teníamos encima y los superiores exigían resultados, algo que yo les podía dar si me daban tiempo, pero no lo hacían.

Los reporteros o -los Buitres como mi equipo y yo les llamamos- habían llegado hace más de dos horas pidiendo más información sobre el caso. La carpa donde nos encontramos estaba lo suficientemente alejada como para no poder escuchar sus gritos pidiendo la exclusiva cuando veían pasar a un policía por la zona.

-Detective ¿está seguro de que estamos buscando en el lugar correcto?-. pregunto un oficial con cautela. 

-Completamente seguro.- sentencié con un voz fría y cansada, ya había perdí la cuenta de cuantas veces me habían hecho es maldita pregunta cada vez que pasaba una hora, el oficial salió corriendo asustado al momento en que me escucho.

- Elías...

-Nada de Elías, Ramírez, sé que no me equivoco-. Solté frustrado volteándolo a ver.- el río es demasiado profundo y extenso hay que darle más tiempo, solo eso.

-Está bien, solo tienes que tomarte un descanso de vez en cuando, no te has despegado de esa computadora desde hace más de una hora y no has dormido en toda la noche.- menciono poniendo una mano en mi hombro-. recuerda que somos un tu equipo, no tus enemigos, te apoyamos, pero tienes que tranquilizarte.

-Lo sé, solo que ya me cansé de que los superiores me estén presionando por algo que ni ellos querían resolver.- me quejé tallando mis ojos cansados y adoloridos.- pareciera que todos aquí ponen en duda mis ordenes.- solté lo que tanto me había estado fastidiando desde que acepté el caso.- y para echarle más leña al fuego todavía los superiores me amenazan con despedirme, menuda mierda. 

Me recargue en el respaldo de la silla viendo como las personas entraban y salían de la carpa con suma tranquilidad y cansancio, voltee la cabeza para ver la pila de archivos que esperaba a que los revisara a mi costado derecho, tenía trabajo, mucho trabajo... 

-Sabemos la presión que tienes encima, Elías, pero William está resolviendo lo de los superiores y con lo otro siempre sabes cómo resolver eso, te tienen respeto recuérdalo.- mención Ramírez dándome una palmada en la espalda reconfortándome.- y no te van a despedir eres uno de los mejores, hacer eso sería una estupidez y lo sabes. 

 -¿La prensa ya se fue?- pregunto Jonathan somnoliento interrumpiendo nuestra conversación mientras se tomaba su segunda taza de café después de despertar de su pequeña siesta entre dos sillas como si fueran una cama.

-No todavía no-. Dijo la Sara entrando a la carpa fresca como una lechuga ¿Cómo le hacía? -. Y acaban de llegar dos televisoras más.- agrego con desdén.  

-No se van a ir hasta que les demos algo.- interrumpió Antonio con tono severo y serio levantando su vista de la computadora antes de que pudiera hablar.- y lo sabes bien Elías, ¿Cuándo vas a dejar que el niño hable con los reporteros? te recuerdo que pertenecía a coordinación de medios, sabe cómo hacerlo.- termino diciendo solo para apuntar a Jonathan con su bolígrafo. 

-¿Yo qué?-. pregunto Jonathan desconcertada ya que se estaba volviendo a quedar dormido, Sara lo movió del hombro, pero este parecía que se arrullaba con el movimiento.